19 de julio del 2001
— Mi hija debe de haber nacido ya— hablo Patrick mientras sus hermanos y la novia de John lo observaban, estaban en el patio de atrás junto a la piscina. — Un mes sin ellas, un maldito mes sin ellas y siento que me muero, que haré si no las encuentro.
— Las encontraremos hermano —dijo John animándolo.
— Creo que estoy perdiendo las esperanzas — contesto sin esperanzas entrando a la casa.
22 de julio del 2001
Lorelein se encontraba en una entrevista de trabajo, desde el día que vio a Christian de nuevo con París, sabía que no debía estar cerca de el para no crear sentimientos. Y por eso ahora se encontraba en su quinta entrevista de trabajo en la semana.
— Lo siento, pero no cumple el perfil que necesitamos. — hablo la señora dejando su curriculum en la mesa y deslizándolo hasta Rory. Los ojos de ella se llenaron de lagrimas, se estaba frustrando al no poder encontrar trabajo, se estaba quedando sin dinero y no quería recurrir a Christian, que desde el día que se fue de su departamento, no lo había visto mal.
—Por favor. — Suplico. — Es mi quinta entrevista de trabajo — su vez comenzó a entrecortarse. — Lo necesito mucho, me estoy desesperando, es necesario este empleo tendré un hijo, pero no por mi desempeño sera bajo, al contrario tengo a alguien por salir adelante solo necesito una oportunidad, déjeme una semana a prueba y si no le gusta mi desempeño no podre ninguna resistencia si me despide.
La vista de la señora no se apartaba de Lorelein, pasaron segundos que ella sintió como horas.
— Te daré la semana de prueba y si no eres capaz ten seguro que te despediré.
— Muchas gracias, muchas gracias — dijo emocionada. — Se lo juro que no se arrepentirás.
— Comenzaras el lunes. — Ella asistió. Después de media hora mas Rory salio feliz por su nuevo empleo.
30 de julio del 2001
Kharolan le cantaba una melodía a la pequeña, que se estaba dejando caer en los brazos de Morfeo, unos segundos después cayo dormida, la acostó en la cama, colocando una almohada y se recosto alado de ella.
— Te amo tanto. — susurro dando un beso en la frente de la pequeña.
Kharolan encendió su teléfono, inmediatamente mensajes de Patrick inundaron, simplemente los ignoro, envió un mensaje a sus hermanos que estaba bien y tecleo el número de Rory. Al tercer tono ella respondió.
— Hola.
— Hola Rory, soy yo Kharolan.
— ¡ah! Hola, ¿cómo estas?.
— Todo es tan dificil cada día, ¿Y tu?, ¿cómo vas con Christian? — Rory soltó aire y sabía que no era una buena señal.
— Desde su cumpleaños que no vivo con el, tengo un nuevo trabajo y trato de salir adelante, pero cuesta, no se porque llegue a pensar que el me iba a querer, pero simplemente esta con París de nuevo.
— ¿Regreso con ella? — cuestiono
— Sí — la voz de Rory se escuchaba cargada de tristeza. — Kharolan, ¿en donde estas?. — un suspiro abandono el cuerpo de esta-
— Lejos, pero no se puede huir de los problemas.
— ¿Regresaras algún día?. —ambas se quedaron en silencio, pero se interrumpió por unos toques en la puerta de el departamento de Kharolan.
— Espera Rory. — Kharolan abrió la puerta encontrando a Klaus con unas bolsas de comida y otras, se quedaron mirando unos segundos, hasta que el llanto de la pequeña inundaron la habitación.
— Yo la cargo — Klaus paso, coloco las bolsas en el piso y cargo a la bebé.
— Rory ¿sigues ahí? .
— Claro, ¿Cuando nació? — pregunto emocionada.
— El 13 de julio, es lo mejor que me ha pasado en la vida. — Miro a Klaus que ya había calmado a la bebé. — Rory acerca de tu pregunta, necesito sanar y poder verlo sin sentir absolutamente nada.
— Te entiendo, te dejo que acabo mi hora de descanso, me encanto haber platicado contigo.
— Claro, pronto comprare un nuevo teléfono, para hablarte de el. Cuídate y a mi sobrino.
— Claro, cuida a la bebé y cuídate tu. — la llamada finalizo.
Kharolan se giro, Klaus estaba recostando a la pequeña que había quedado profundamente dormida de nuevo.
— Gracias. — Agradeció.
— Traje un poco de comida, quiero pensar que no has podido salir por la bebé — ella asistió. — ¿Podemos comer?.
— Klaus, no me interesa tener ninguna relación con alguien. — Aclaro, el la miró y sonrió.
— No te preocupes, tampoco interesa una relación con alguien.
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