Adicta al sexo romance Capítulo 41

KHAROLAN POV

Mis palabras salieron sin pensarlas, amaba a Patrick, pero están frustradas de que dejara de hacer cosas por estar a mi lado, sabia que era una carga para él, bueno más bien para todos. Me miraba mientras sus ojos estaban conteniendo las lágrimas y yo me sentía pésima.

—Per.. Pero yo te amo Kharolan— tomo mis mano —No te das cuenta, no me alejes de ti— su voz sonaba a suplica, me envolvió entre sus brazos y sentí las lágrimas de Patrick, él estaba llorando por mí. Me sentí tan cruel, lo separe de mí.

—Yo también te amo Patrick, solo quiero espacio, necesito espacio para mí—mi voz se quebró—No quiero sentirme más como una carga para mi familia, para ti, quiero soltar esto, no me quiero sentir culpable, quiero poder tener la relación que tenia con mi hija, contigo— tome aire para que la opresión en mi pecho fuera menor —esta ya no soy yo, quiero mi vida de vuelta.

—Te daré tu espacio pero no me saques de tu vida—suplico

—Nunca—prometí, rompiendo el espacio que había entre nosotros abrazándonos.

1 DE MAYO DEL 2007

Dos años de casada, hoy estaba haciendo dos años de casada con Patrick, iba a ser un mes que no lo había visto en persona, estábamos comunicados, mis cuñadas había venido algunas veces al igual que mi madre, claro después de acompañarme a mis quimioterapias.

Mañana iba a ser mi ultima sesión y después de eso tendré que ir a cheques quincenales, después mensuales y al final semestrales, si en cinco años no regresaba, era casi probable que nunca más lo hiciera y eso es lo que esperaba, ya que quería recuperar mi vida

6 DE JULIO DEL 2007

Estaba sentada comiendo una ensalada, en el sillón de mi apartamento, llevaba casi tres meses viviendo sola, extrañaba tanto a mi hija, pero cada que quería hablar con ella por teléfono solo escuchaba sus berrinches, mi hija me odiaba. Patrick me visitaba de vez en cuando, solo una vez por semana, desde hace un mes ya que no podía estar más tiempo sin verlo; platicábamos como amigos pero no había afecto entre nosotros, yo lo seguía amando más que nunca y sabía que el también lo hacia.

Me pare lave el plato y me fui a bañar cantando, me estaba sintiendo yo de nuevo. Salí desnuda, con mi corto cabello aun mojado, una costumbre que había adoptado al estar sola, busque mi ropa, coloque una peluca corta que llegaba hasta mis hombros, me maquille, para después vestirme con un pantalón negro y una blusa blanca, poco a poco estaba recuperando mi color, mi peso y esperaba que mi vida también se recuperara , tome mi bolsa metí, billetera, llaves y celular. Y salí de mi departamento para comprar el regalo de mi hija, la cual cumpliría en una semana.

—¿Que le gusta a ella?— le pregunte a mi esposo mientras hablábamos por celular.

—Cualquier cosa que tú le des le encantara.

—Ella no me quiere Patrick.

Comentarios

Los comentarios de los lectores sobre la novela: Adicta al sexo