Ámame otra vez romance Capítulo 1

Prefacio.

—¡Estoy embarazada!

El silencio sepulcral que le siguió a aquel eufórico anuncio de la mujer, solo fue roto por el estruendo del cristal rompiéndose al caer al piso e hizo que Hope Morgan diera un pequeño salto del susto y una ligera exclamación saliera de sus labios.

—Cariño, ¿estás bien? —preguntó ella acercándose a su esposo.

Blake Cameron miró a Hope, su bella y tan amada esposa, pero era como si la viera por primera vez.

¡Qué ciego había sido! ¡Qué idiota y confiado había sido con ella!

—Blake…

—¿Qué has dicho, Hope? —preguntó alejándose del toque femenino que solo minutos antes deseaba y añoraba sentir sobre su piel.

—Dije que estoy embarazada, ¡Estamos esperando un bebé! —exclamó con una enorme sonrisa de oreja a oreja.

Hope Morgan no había sido más feliz en su vida que ahora, luego de tres años de feliz matrimonio, por fin habían concebido su primer hijo.

—Dime…, —dijo el hombre sintiendo cómo la rabia bullía en su interior—. Dime con quién me has engañado, ¿¡Quién ha sido el hombre con quien has compartido tu cama!? —gritó furioso.

Hope se encogió, como si Blake le hubiese dado un golpe.

—No sé de lo que hablas, Blake…

—¡No te hagas la santa! —explotó tomándola del brazo con fuerza—. Dime, ¿quién es el padre de tu hijo? —preguntó con los dientes apretados.

—Estás loco, Blake. ¿Cómo puedes preguntarme esto? ¡Eres el único hombre en mi vida! —gritó la joven.

—Soy el único idiota que creyó que eras diferente al resto de las mujeres. ¡Fui el imbécil que pensó que tú eras una mujer íntegra! —gritó lanzando a la joven sobre el sillón.

Hope lo miró con miedo, por primera vez en tres años, sintió el verdadero terror. No comprendía por qué Blake le hablaba de esa manera, pero dudar de la paternidad de su hijo no tenía sentido.

—No sé lo que ocurre contigo, Blake, pero eres el padre de mi hijo, ¡Era virgen cuando me entregué a ti y desde entonces he sido únicamente tuya! —gritó con lágrimas en los ojos.

—Eres una mentirosa, ¡una farsante, Hope! —la acusó.

—Blake…, no puedes tratarme así, ¡jamás te he dado un solo jodido motivo para que desconfíes de mí!

—Porque no había evidencia de tu infidelidad, pero ahora…, ahora crece dentro de ti. ¡Llevas en tu seno el hijo de otro hombre!

—¡Estás loco!

—Sí, estoy loco de dolor y de rabia, Hope… ¡Jamás voy a perdonarte esta traición! —gritó.

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