Boda bajo un contrato romance Capítulo 10

´´Yo soy de cumplir mi palabra 'se dice Jeff en su mente.

—Si claro esposo, mi lindo pensativo —responde la rubia, y bien sabe que el pensó algo, pero no lo dirá todavía.

Jeff agarra el tenedor y hace la misma dinámica que hizo ella anteriormente con el tenedor.

Jeff pudo hacer que Lucrecia volviera a sonreír.

Las mejillas de lucrecia se ruborizan y se hacen cada vez mas rojas, de tanto sonreír.

Todos estaban solo viéndolos peor no comentaban nada hasta que la madre de Lucrecia se acerca y ella ya sabía que preguntaría su madre exactamente.

—¿Cómo se conocieron?, ¿Cuánto tiempo llevan conociéndose? —Pregunta la madre.

En eso la prensa apareció fotografiando a los esposos, la prensa no pudo quedarse quieto les picaba las manos por saber que pasaba y ambos se quedaron sorprendidos.

—¿Dónde se conocieron?, contéstale a tu madre, queremos saber tambien, sabemos que tus negocios son importantes, pero esto te lo teníamos muy guardadito —dice la reportera.

—Mami la verdad nos conocimos en una fiesta, yo había perdido mi documento único de identidad, y me urgía encontrarlo, Jeff se acercó, me ayudo a buscarlo y allí supe que era el amor de mi vida —dice la rubia Lucrecia jugando con su cabellera larga.

—Exactamente, yo pensé lo mismo, fue como amor a primera vista, de aquellos que te flechan y solo llevamos 7 meses de conocernos y decidimos que era hora de casarnos, y darnos la oportunidad —le dice Jeff nervioso.

—¿Qué hay con tus negocios de empresa? —Pregunta la reportera.

—Primero es mi familia después los negocios —responde Jeff.

—¿Es cierto que te la quieres llevar para Francia? —Pregunta la reportera.

—No quien le dio esa información tan errónea —suspira.

La rubia solo sigue picando su plato para comer.

—¿Es cierto que tenia prisa de casarse por unos terrenos y de mas cosas que le darían?, ¿Se caso por interés? —Pregunta la reportera causándole una herida profunda en el corazón a Lucrecia, sintiéndose usada.

Lucrecia termina de dar solo un último bocado el cual fue el mas amargo de su vida suspirando de dolor recordó que quizá todo eso de casarse fue por interés y que quizá el no sienta nada por ella, y sea excelente en la actuación, sintiéndose ella triste, sintiendo que le falta el aire no es fácil tener a reporteros y fotógrafos a la vez.

—Que dice, claro que no aparte no tengo ningún interés por regalos, desde hace mucho quería un matrimonio como este, nos casamos por amor, dejen de tergiversar las cosas por favor, y con permiso nos tenemos que marchar un momento, solo déjenos en paz —responde el rubio Jeff.

Lucrecia se levanta y camina con su vestido blanco de boda medio se enredó casi se cae, Jeff la sostiene, ella estira sus manos, sintiendo de nuevo ese vacío e ideas llegaron de la nada a su mente se convirtieron en una negatividad, ya ni ella misma entendía que pasaba con ella misma, ella solo se dirigía en busca del baño, para ahogar sus penas y esconder la cara.

Una de sus lágrimas de confusión rodea por sus mejillas, se va caminando por el pasillo cuando de pronto escucha que alguien dice ´´Esta lloviendo, hay un ciclón allá afuera nadie salga, está muy fuerte´´.

Jeff esta atrás de ella, y ella esta como en shook, realmente estaba rota, aunque lo niegue Jeff sabe que ella necesita más amor que nunca.

—Estoy contigo —le susurra Jeff.

—No se Jeff, ya no se como siento, sé que después de la luna de miel, todos estarán muy preguntones, es una semana tu y yo, todo parece magia, solo dime que estarás allí y que no me abandonaras, esto es nuevo, yo no se qué hare, a veces te siento extraño, y otras como que, si pudiera funcionar lo nuestro, no lo se hoy siento una mezcla de confusión, esa reportera me dejo en que pensar, solo tómame entre mis brazos y dime que estas aquí conmigo —le dice Lucrecia con voz triste.

—Estoy aquí para ti, y quiero cuidarte, no hare nada de lo que no te sientas cómoda, haremos lo que tu quieras tranquila, no te me desesperes —dice Jeff.

—Ok está bien, gracias, me puedes cargar en tus brazos, no me quedan energías para caminar y escuche a alguien que dijo que esta lloviendo fuerte —le dice lucrecia.

Comentarios

Los comentarios de los lectores sobre la novela: Boda bajo un contrato