Cállate/Cállame BL romance Capítulo 18

Ya han pasado dos meses, no cabe duda de que me está gustando mucho esto de pasar tiempo con Allan, sobre todo porque justamente como pensaba, él me consiente llegando al punto de hacerme sentir muy amado, es realmente encantador, además como he pasado muchas noches en su casa, tengo un poco de ropa en su armario.

Sé que no es la gran cosa, pero de cierta forma me hace feliz saber que tiene algunas de mis cosas en su casa, por otro lado, si bien no podemos vernos con frecuencia debido al trabajo, me complace decir que nos hemos vuelto más cercanos y hasta he comenzado a usar apodos tiernos fuera de la cama, aunque es una lástima que ya no le excite cuando lo llamo “mi amor”

Bueno, de cierto modo aún le excita, sin embargo, sólo cuando estamos en un momento caliente que involucra palabras obscenas. La primera vez que lo nombré “mi amor” fuera de la cama, este se excitó y acabamos haciéndolo en la cocina, aunque con todas las veces que lo he nombrado de esa forma, su efectividad disminuyó.

Hoy es el quinto día que pasamos sin vernos, es viernes, así que estaba pensando hacerle una visita luego de salir del trabajo, ya que entregué a un sujeto que debía cazar, adoro esto, fue muy divertido acecharlo hasta que no pudo escapar de mí.

Por otro lado, como bien mi jefe me aseguró, no me ha pedido que lo investigue, de hecho, me está dejando disfrutar de mi relación tal cual como prometió que haría.

Ahora mismo estamos muy bien, él no ha hecho nada sospechoso, sólo trabaja como normalmente solía hacer y solemos llamarnos durante las tardes, justo antes de dormir para mantenernos en contacto.

Lo otro importante que debo recalcar es que, estoy buscando una casa de campo, he visto muchísimas, pero no he logrado encontrar una que me permita experimentar aquella tranquilidad que siento cuando pasamos tiempo en la caravana.

Quizás sea porque estaba con él, puede que en realidad ese sea el factor que me falta para poder comprar la casa que deseo.

–“Quiero verte” –le escribí por mensaje esperando a recibir una respuesta durante lo que quedaba de tarde, sin embargo, me leyó a los segundos más tarde.

–“Ven, estoy en la caravana” –me informó.

–“Adoro cuando respondes deprisa ♥” –dije antes de encaminarme a mi auto con tal de conducir hasta la caravana, aunque claro, antes me aseguré de pasar a mi casa en busca de ropa.

Cuando llegué, por supuesto que me sentí feliz de verlo, además adoro la parte en donde nos saludamos con un tierno beso en los labios mientras sus brazos me envuelven con ternura.

Como eran las siete, no me sorprendió que él tuviera la cena lista, incluso antes de cenar pacientemente me esperó con tal de que pudiera ducharme. Durante la semana hablamos bastante, yo quería saber sobre su día, mientras que él deseaba saber sobre el mío creando un lindo momento que continuamos en la cama.

No de una forma sexual, al contrario, únicamente estábamos abrazados, él pasaba su brazo por debajo de mi cuerpo, mientras que yo pasaba mi pierna izquierda por encima de su cuerpo y apoyaba mi cabeza en su pecho, algo que le facilitaba a su mano derecha a deslizarse por mi pierna con tal de acariciarme dulcemente.

–¿Recuerdas la casa que quiero comprar? –le pregunté levantando mi mirada para buscar sus ojos– bueno, encontré una, pero no me convenció.

–¿Sigues con eso? –preguntó riendo.

–Claro, no sabía que lo necesitaba hasta que conocí este lugar, además tú no me quieres vender este sitio– dije fingiendo estar desanimado por lo último.

–A mí también me gusta mucho– me aseguró.

–Pero mi amor, estoy dispuesto a darte todo lo que me pidas– le aseguré de forma coqueta.

–¿Y si mejor construimos una casa? –me preguntó– la caravana también me gusta mucho, pero necesitamos más espacio.

–Hmm…–solté pensando, su propuesta no estaba nada mal– ¿podemos tener piscina? –pregunté haciéndolo sonreír.

–Claro, sería nuestra, así que asegúrate de decirme todo lo que quieres– me respondía, haciéndome sentir muy emocionado por la idea.

–¿Estás seguro? –le pregunté acomodándome sobre su cuerpo para verlo a los ojos.

–Estoy completamente seguro de que quiero vivir contigo– me aseguró.

–En serio me encantas– le dije segundos antes de besarlo completamente feliz.

Comentarios

Los comentarios de los lectores sobre la novela: Cállate/Cállame BL