Cállate/Cállame BL romance Capítulo 6

Por supuesto que a la mañana siguiente debía buscar la forma de alejarme, tenía que revisar los documentos que registré mientras él dormía, pero no podía irme sin que Allan lo supiera, sería demasiado evidente que buscaba algo, por ende, tuve que esperar a que despertara y es entonces cuando encontré una excusa para marcharme luego de ducharme.

Sinceramente, me sentía orgulloso de mis habilidades de actuación, ya que fingí que no deseaba alejarme de su cuerpo, cuando en realidad me sentía físicamente exhausto, no quería hacerlo de nuevo, mi cuerpo necesitaba descansar o no podría sentarme dentro de un año.

Una vez que llegué a mi casa, me cambié de ropa para seguido encerrarme en mi despacho y revisar la información. Había muchos documentos relacionados con la agencia, incluso yo los tenía, por ende, no eran relevante, incluso parecía que no tenía nada fuera de lo usual, sin embargo, había un número encerrado al que él seguramente planeaba llamar, además tenía escrita la palabra “paquete”.

Entre los registros de datos busqué a quien le pertenecía el número, así es como llegué a la fotografía de una atractiva mujer, al principio no entendía por qué estaba relacionado con ella, no parecía ser nadie relevante, además no tenía antecedentes criminales, o por lo menos eso creía hasta que investigué más a fondo notando como sus antecedentes habían sido borrados.

No había demasiada información de donde buscar, como dije, sus antecedentes habían sido borrados e incluso se cambió el nombre, ella actualmente se llama “Lucy” y tiene un bar que ha sido inspeccionado muchas veces por la policía.

Mi plan de esta noche era visitar aquel bar, no sabía qué encontraría, seguramente habrá drogadictos o delincuentes, por ende, me aseguré de alistarme con anterioridad. Por supuesto que con esto me refiero a preparar mi arma, no puedo ir desarmado a un sitio que podría ser peligroso.

Por otro lado, como aún tenía mucha información qué revisar, utilicé toda mi tarde en unir lazos que me permitieran averiguar sobre el plan de Allan, por supuesto que en la pizarra holográfica puse la fotografía del omega como punto de partida, mi plan era investigar todo lo que estuviese involucrado con el omega.

Por ahora, teníamos un par de sospechosos, en donde también se encontraba Allan, como eventualmente debo fingir que estoy trabajando con él, hice dos respaldos, uno que se llamaba “Omega” y el otro “Alfa”.

Ambos eran estructuralmente iguales, la única diferencia es que en uno estaba la fotografía de Allan, mientras que en la otra no. Sabía que Allan no sentiría curiosidad por abrir la proyección de alfa, ambos somos especialistas en este rubro, por tanto, he tenido que investigar a muchos alfas.

Mi día sólo se centró en ello, al menos hasta que por fin, a eso de las nueve me encaminé al bar en donde me escabullí entre la gente. A simple vista parecía un sitio normal, había varias mesas y una barra de licores gigantesca en donde varias personas se encontraban apoyadas, ya que también había asientos en la barra frente al barman.

Yo buscaba a la mujer, quería ver qué clase de comportamiento tenía, incluso ver qué tan peligrosa podría llegar a ser, normalmente cuando alguien desea desaparecer del mapa, significa que hay alguien detrás de ti, así que cuando la vi la examiné de pies a cabeza, era atractiva, la foto no mentía, además vestía de una forma sensual y como era de esperarse, varios posaron sus ojos en ella cuando apareció en el bar.

Yo fingía ser un cliente más, incluso bebí un par de cerezas, por supuesto que no me senté en la barra, más bien estaba en un sitio más apartado fingiendo que miraba unos documentos. Mi vestimenta era básicamente un disfraz, quería simular que era un profesor “sumiso” que iba en contra de la violencia.

Lo curioso es que, a eso de las diez, apareció Allan, por supuesto que me las ingenié para que no me viera, sin embargo, él estaba muy concentrado en aquella chica, por ende, no me notó. Pude ver como luego de hablar unos minutos la chica le entregaba un sobre pequeño, parecía dinero.

Allan sonrió, ella le dijo algo que parecía divertirle, además lo besó. En ese momento creí que quizás tenían una relación, ella le sonreía de forma coqueta, casi insinuándole algo. Supuse que sería sexo, como había mucha gente en el bar, no podía usar mi reloj para oírlos, las voces de los demás interferirían en la comunicación, sin embargo, luego de un rato ellos se encaminaron a lo que parecía ser una oficina.

Por supuesto que hice un escaneo de la estructura del bar, así que podía ver dos puntos rojos dirigirse a una habitación, no sé si es una oficina o si se trata de algo más, sin embargo, pasaron alrededor de media hora juntos hasta que, a eso de las doce, Allan se marchó.

Mi mente pensaba en dos opciones, la primera, es muy probable que hablaron sobre el omega al que todos estamos buscando, incluso quizás de cosas ilegales, mientras que, la segunda opción es que tuvieron sexo.

Sinceramente, preferiría la segunda opción, nosotros no tenemos una relación que involucre sentimientos, por lo que obviamente no me interesa si besa o si se acuesta con alguien, sin embargo, si me interesa si llegase a estar involucrado en cosas ilegales.

Cuando la chica regresó, no pensé que fijaría sus ojos en mí, creí que me había descubierto, ya que sólo estuvo diez minutos hablando con un par de personas antes de sentarse frente a mí.

–¿Eres policía? –me preguntó sin rodeos, haciéndome reír.

–Si fuese policía no estaría revisando exámenes– respondí, mi plan es parecer un profesor.

–No te había visto antes– comentó tomando uno de los exámenes– ¿por qué los revisas aquí?

–Tuve problemas con mi compañero de piso– respondí haciéndola reír.

–Déjame adivinar ¿es un imbécil? –preguntó tratando de adivinar.

–Es un poco inmaduro…–murmuré.

–Seguramente quieres irte ¿verdad? –trataba de asegurar.

–No, al contrario– respondí viendo como parecía cada vez más interesada en mí.

–Es curioso, la mayoría llega aquí con tal de escapar de sus esposas– comentó acercando sus manos a mi corbata– ¿Qué tal si nos divertimos?

–Lo siento, pero no estoy interesado– respondí haciéndola sonreír.

–Si tienes pareja, te aseguro que no se enterará– insistía, por ello la miré a los ojos.

La chica era de cabello negro, su piel blanquecina realzaba gracias al vestido de color rojizo que llevaba puesto, además el tono de su labial era exactamente igual a su vestido. No había duda de que era una chica que realzaba entre tanta gente, incluso sus ojos color miel eran llamativos.

Sin duda era atractiva, pero cómo no sabía si había tenido sexo con Allan, prefería rechazar su propuesta, no quisiera tocar a la misma chica que quizás Allan ha tocado, sería extraño.

–¿Normalmente te funciona esa táctica? –pregunté regresando mi vista a los exámenes– ¿no deberíamos conocernos primero?

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