(COMPLETO) El Loco De Mi Prometido romance Capítulo 48

—Solo puede pasar un familiar— la enfermera se había acercado a nosotras para informarnos que podíamos pasar a ver a Nicolas aunque este aún no se había despertado.

 

—Alice— me dijo la madre, cediendome el paso a la sala

 

—Está bien, Señora Augier, ve tú, yo voy a llamar para ver como esta Samuel— estaba al tanto de la preocupación que tenía su madre al verlo ese estado, por lo que la dejé visitarlo primero mientras yo iba a averiguar algo sobre mi hijo.

 

—Te acompaño, Alice— mientras su madre entraba a verlo, Sam y yo salimos del hospital para llamar y saber como estaba el bebé.

 

—Amanda, hola, soy Alice— estuve mucho tiempo alejada de mi bebé, me pregunto cómo estará.

 

—Señorita Alice, ¿Cómo está? ¿Cómo se encuentra el señor Nicolas?— hacia bastante tiempo que no oía la amable voz de Amanda.

 

 

—Él está mejor, la operación fue un éxito, pero quisiera saber ¿Cómo está Samuel?— por más preocupada que esté por Nicolas también, él estaba al cuidado de su madre y mi hijo no.

 

—Hoy se encuentra muy bien, se quedó dormido hace poco— me alivia mucho saber que se encuentra en un buen estado, espero no haya notado mi ausencia.

 

—Bien, nos quedaremos un poco más en el hospital, ¿Sabes? Avísame si ocurre algo— mis ganas de verlo eran inmensas pero debía asegurarme de que su padre esté sano.

 

Terminé la llamada y vi a como Sam se acercaba con dos cafés en su mano.

 

—Toma, de seguro han sido unos días difíciles para ti, deberías descansar— Es cierto pero no será tan fácil.

 

—Gracias, Sam. Pero no podré descansar mientras Nicolas continúe en esa situación por

 

mi culpa— por más de que todos me digan que la culpa no ha sido mía, me siento realmente culpable.

 

—Alice, ya deja de culparte, nada de esto es tu culpa, tu no disparaste esa arma, ¿O sí?— no, yo no la disparé pero yo fui motivo del disparo.

 

—Yo lo cause, debí dejarle claras las cosas a David desde un principio— y no es que no lo haya tratado, a él le costaba demasiado entender mis sentimientos.

 

—Eso no...

 

Una llamada entró a mi celular por lo que nuestra conversación se vio terminada.

 

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