Helena
Llegué llena de maletas al departamento del Sheik junto con Matt y Alex.
- Me voy, buenas noches.
Matt tenía curiosidad como era, quería saber qué habíamos hecho en la tienda, pero no se lo dije.
Me pagaban y todavía lo disfrutaba, me sentía como una prostituta, esa era toda la verdad y la vendedora tenía razón cuando dijo que yo era una de sus amantes, eso probablemente era un lugar común, sus mujeres eran llevadas allí para ir de compras y entonces la vergüenza se instaló en mi ser.
- Querido paleto, los males que vienen a pensar - se sentó en mi cama - piensa que ayudaste a tu familia y aún tienes sexo con el ardiente Sheik.
- Me siento un poco sucio Matt, esa no es mi naturaleza – también me senté – Es como si fuera otra persona cuando estoy con él, pero luego recuerdo por qué estoy aquí.
- El paleto no es así, y cambiemos de tema.
Viste cuanta ropa linda – aparte de que la vendedora era buena hice una nota mental – Y de paso creo que mañana estarás en los diarios de Nueva York.
- ¿Por qué?
– cuestiono sin entender.
- Porque había reporteros ahí en el centro comercial, siempre hay alguien tras la pista del Sheik, y los vi tomándote fotos.
- Lo único que faltaba ahora era imaginarse ser la portada de un periódico y más aún en la parte del chisme - y me acosté en la cama.
- Mejor que los obituarios de campesinos sureños.
"Idiota" Me río a carcajadas y le lanzo una almohada.
- Bueno, empaquemos estas cosas junto con las otras, algunas piezas que ya tenía en el armario.
- Quién sabe, yo en Nueva York comprando en Prada con mi camiseta vintage de Gucci y un Sheik en el costado - Me reí a carcajadas - Las damas me miraron con cara cuando entré a la tienda, como de dónde sacó este esta camiseta falsa – me acordé, claro en ese momento estaba muy enojado pero ahora solo sabía recordar la cara de la rubia aguada.
- Ahora dime - se levantó de la cama - ¿Qué hacíais en Prada?
- Deja de ser curioso, Matt.
“Y se nota que es falso.” Señaló la camiseta.
"Solo porque no te lo dije, no tienes que reírte de mi camisa", hice un puchero.
- Entregarán las otras piezas mañana justo a tiempo para el baile benéfico.
- ¿Qué beneficio bola?
No me informaron, miro con sospecha.
- Mañana habrá un baile benéfico para la alta sociedad y el Jeque es uno de los invitados de honor de la fiesta.
Después de que todo estuvo arreglado en el armario, nos quedamos allí en mi habitación y hablamos de nuestras vidas, amores y decepciones.
El pobre Matt tuvo una vida muy dolorosa, pero después de conocer al Sr. Muller, cambió su vida y hoy en día trabaja viajando por el mundo y siendo este profesional ejemplar, Sheik tiene mucha prisa y se ha convertido en su brazo derecho.
Y hoy, además de ser un gran profesional, tiene una vida estabilizada.
- Campesino tengo hambre.
- También estoy matando de hambre a Matt.
- Redneck tiene hambre - bromeó conmigo y yo me reí - ¿Pedimos una pizza?
- Sí - aplaudo - Me encanta la pizza, mejor que la comida francesa del otro día.
Pedimos la pizza y nos quedamos allí en la sala del apartamento, ya que Matt me dijo que no vendría a casa hoy.
Estaba decepcionado y sentí una punzada de celos, pero no dejé que se notara.
Matt dijo que tenía algunos asuntos que atender en otra ciudad, tomó un helicóptero y se quedó a dormir.
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