CUATRO ALFAS PARA LAS MAFIOSAS romance Capítulo 13

Bruno estaba decidido a no marcar a Rafaela cómo su luna aún, el Alfa era terco, su lobo Dan estaba furioso con él, Dan la quería a su lado ya mismo y para siempre, " Bruno dónde la pierdas salgo y te devoro"

Karino

Alfa! dale de tu sangre a beber, estoy seguro que le ayudará a sanar su herida y se va a poner mejor!

Bruno de inmediato dejó salir sus colmillos para desgarrar su muñeca, dejó caer las gotas de sangre en los deliciosos labios de Rafaela, fue imposible no recordar cuándo los besó hasta el cansancio esa noche en la cabaña el encanto cuando la hizo suya, él había sido su primer hombre, su piel todavía llevaba su olor impregnado

Rafaela

Por unos momentos no supe nada de mi, estoy despertando de a poco y apenas enfoco puedo ver al Bruno Ferragamo y otro hombre a su lado, los dos se me quedan mirando esperando confirmar algo que no sé que es ¿qué me pasó? trató de incorporarme y vuelve el mareo, m*****a sea! por qué me estoy sintiendo mal precisamente en la oficina de éste idiota! murmuré, volteé para todas partes cuando creí escuchar un gruñido, era como de un animal, parece que estoy delirando

Bruno

Me a llamado idiota! a mí! al Alfa Bruno Ferragamo, voy a enseñarle a respetarme a está malhumorada mafiosa, si piensa que yo soy como cualquier hombre que a tratado antes de equivoca!

Rafaela

Vuelvo a incorporarme, necesito salir de aquí, ya a sido mucha humillación por hoy, no puedo demostrar debilidad frente a mis socios, eso afecta el negocio y no estamos para cometer errores, vi que ya no me mareé y me puse de pie, voy a retirarme señor Ferragamo? dije tajante

Alfa Bruno

Rafaela espera! todavía puedes marearte, además no hemos solucionado lo del cargamento de coca, quisiera conservar el acuerdo original

Rafaela

Prefiero consumirla yo misma en su totalidad que venderle a un hombre sin palabra y con tan pocos valores como tú! busquen otro vendedor por qué los Ferragamo están vetados desde hoy en la familia Almanza, es mi última palabra

Bruno

No puedes hacer eso Rafaela! estás mezclando el negocio con malentendidos personales! me interpuse entre mi luna y la puerta, ella está muy muy cabreada conmigo y tiene razón lo sé, pero los Almanza no pueden irse de mis empresas sin firmar éste contrato, cada minuto que pasa de no hacerlo estamos perdiendo dinero

Rafaela

Haste a un lado, no me obligues a ser ruda contigo, la mirada verde y azul turqueza se encontraron retandose, ésta vez Bruno lo había jodido todo, el contrato de la venta de la coca y la unión con su luna, ella estaba que desprendía fuego por sus bellos ojos

Rafaela sacó su arma, una nueve milímetros con diamantes incrustados que era regalo de su padre, apuntó hacía el Alfa Bruno sin vacilación, muévete o te dejó cómo colador!

Bruno no dejaba de analizarla quería encontrar un rastro de debilidad pero no encontró nada, Rafaela estaba dispuesta a dispararle si no se apartaba, el beta Karino estaba clavado en su sitio viendo la bizarra escena de su sanguinario Alfa y su indomable Luna

Alfa Bruno

Esta bien Rafaela, te dejaré ir para que pienses mejor...

De pronto un grito distrajo al Alfa ¿que demonios está pasando en mi empresa? quién grita de ese modo?

En el piso treinta y dos, el Alfa Adriano había seguido el olor de su luna, cuándo la alcanzó pudo ver lo hermosa que Cristian era, su belleza lo impactó, la diosa luna se lució al mandarle una luna tan bella, más nunca imaginó que sería una mafiosa fría y cruel

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