CUATRO ALFAS PARA LAS MAFIOSAS romance Capítulo 17

Al siguiente día por la mañana, el canto de las aves alegraba el día, había caído una tormenta por la madrugada y todavía había nubes en el cielo que cubrían al astro sol, los lobos Ferragamo no habían podido pegar un ojo en toda la noche, encontrar a sus lunas y no tenerlas cerca era demasiado frustrante e insoportable

Karino dejó escapar un profundo suspiro antes de entrar a la mansión Almanza, su Alfa lo había amablemente obligado a ir a negociar la mercancía, el beta pidió ver a Rodolfo Almanza, el mafioso acepto recibirlo y ordenó que lo llevarán a su despacho

Karino vestía un costoso traje gris y en sus manos llevaba un portafolio, el señor Almanza lo invitó a tomar un café mientras le platicaba la historia de su familia y como había llegado a los Estados Unidos, Karino lo escuchó paciente, después de todo no había visto a nadie más ahí í que pudiera suponer un peligro para emparejarse, poco a poco se comenzó a relajar

La tarde noche anterior cuando Esmeralda despertó se preguntaba si había sido un sueño lo que vió? ese hombre tan atractivo que la reclamó como suya y la hizo perder el conocimiento era acaso un fantasma?

Esmeralda encaminó sus pasos a las caballerizas y salió a todo galope en el mismo caballo café al jardín, no sabía por qué pero ese lugar la estuvo llamando toda la noche a ir, solo que esmeralda creía en los fantasmas y ni de broma saldría en la madrugada de su habitación

Llegó por fin desmontando cómo toda una amazona para fijar su mirada en las hermosas flores de colores que yacían plantados ahí, estaba tocando una rosa roja aspirando su aroma cuándo una gruesa y fascinante voz la hizo dar un salto del susto

Ese mismo aroma tienes tú, flores mezclado con un toque de madera, Mariano sonrió en una mueca por el susto que le había dado a su luna

Quién eres tú?

Yo! yo soy Mariano, un hombre que a quedado prendado de tu belleza, ahora que te e dado mi nombre dime, cuál es tu nombre preciosa?

Yo...yo me llamo Esmeralda, pero qué estoy haciendo dándole mi nombre a un desconocido? que bien Esmeralda! ahora nada más falta que te secuestren, murmuró Esmeralda muy bajito pero adivinen quién escuchó a la perfección? Mariano Ferreti

Tienes miedo de que te secuestre te lleve conmigo y te ame por el resto de mi existencia?

Yo...yo... me escuchaste dije apenas en un hilo de voz

No debes temer de mí, pidió el sanguinario Alfa Mariano, tú no preciosa, hagamos algo ven,! el Alfa extendió su mano a Esmeralda, no te secuestro si me concedes una cita, te prometo que estarás completamente a salvo a mi lado

Me lo prometes?

La mirada azul turqueza de la hermosa Esmeralda se encontró con la mirada verde musgo del Alfa, él la observó por unos segundos, te prometo que no te haré nada que tú misma no me supliques que te haga! dijo el acercándose a tomar un mechón del negro cabello de la mujer

No.. no te voy a suplicar nada, tartamudeo Esmeralda, yo nunca suplico por nada, te advierto que tus hermosos ojos esmeralda no me van a convencer!

El Alfa Mariano solo la miró, La joven deseaba saber lo que estaba pensando pero no lograba leerlo

Vamos! o piensas quedarte aquí todo el día! saldremos por la puerta de servicio, así no nos verán, ¿tienes un auto? o caminas de aquí para allá? preguntó Esmeralda

El Alfa no respondió solo caminó trás de ella que conocía la mansión Almanza cómo la palma de su mano, una vez que salieron si beta Josefina llegó manejando el maserati de Mariano, era color negro, hermoso, impecablemente limpio

Esmeralda retrocedió por un momento ¿estás tratando de formar un harem? si es así creo que mejor volveré adentro a desayunar con mi familia, cuándo ella estaba dando media vuelta, el Alfa Mariano habló

Josefina baja del auto! que los hombres te lleven a la empresa y encárgate de que todo marche a la perfección! ordenó seco y sin nada de cortesía, Josefina obedeció de inmediato

Si Alfa! respondió la hermosa mujer de cabellera violeta y ropa negra formal, ella llevaba puesto un traje de ejecutiva moderno, Josefina era la beta de Mariano, siendo éste el Alfa más sanguinario de los Ferragamo había sido una total sorpresa que la diosa luna le hubiera designado cómo mano derecha a una mujer, solo que Josefina era un arma letal, su familia era una familia de betas muy antigua, preparaban a los mejores betas del mundo para proteger y apoyar a sus Alfas en todas sus actividades, Mariano realmente confiaba en Josefina, en sus excelentes habilidades en el combate y en el desempeño del trabajo que requerían las empresas

Mariano tomó la muñeca de Esmeralda con el cuidado de no hacer demasiada presión para no lastimarla y la llevó a la parte del copiloto abriéndole la puerta para que entrara, la beta Josefina no perdía de vista a su Alfa, nunca lo había visto ser de esa forma tan caballerosa con un mujer, ¿por qué lo hacía? acaso era esa mujer de larga cabellera negra su luna? sus preguntas no fueron respondidas, su Alfa salió a toda velocidad del lugar con otra mujer que no era ella, por que sí, Josefina estaba enamorada de su Alfa desde hacía muchos años, tanto que no le interesaba buscar a su mate, con solo estar cerca de Mariano ella era feliz y no iba a permitir que ninguna mujer así fuera su luna se lo robaran

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