El Alpha Millonario © romance Capítulo 51

Capítulo cincuenta

Pov Wade

Mis ojos arden de tanto restregarlos con mis manos sucias debido al combate del día de ayer.

Sentado afuera en el pasillo espero los resultados de Sara.

Ayer cuando se desmayo al frente de mí me dieron ganas de golpearme, ¿cómo pude separarme de ella y más cuando estaba lastimada? su cuerpo estaba frío y su piel paso a un grisáceo, sin pensarlo mande a Matías a buscar a la bruja de la manada y levante a Sara para llevarla hasta nuestro cuarto y ahora estoy aquí, en el duro piso de madera esperando desde ayer, sin bañarme o saber sobre la manada, y sinceramente en estos momentos no me interesa si matan a alguien o se largan, quiero a mi luna sana y salva.

Escucho pasos acercándose a la puerta y rápidamente me levanto, de la habitación sale la bruja detrás de nana y mi intento de entrar y verla es en vano cuando me cierran la puerta de una.

—PERO, ¿QUÉ HACEN?, DÉJENME VERLA—grito desesperado y jalo mi cabello.

—Hijo tranquilo, podrás verla cuando te des una ducha y te cambies de ropa —observo a nana tenderme la ropa, ignoro su comentario y llego hasta el pomo de la puerta.

—Si cruzas esa puerta, así como estás, ella volverá a recaer, necesita estar en un lugar limpio para recuperarse —esta vez la fría voz de la anciana a mis espaldas me detiene, aprieto mi mandíbula y tomo la ropa para ir corriendo a el baño del pasillo.

Entro al mismo y me despojo de la ropa para entrar a la ducha.

¿Cómo es posible que ella este en esta situación?

Ella es más fuerte que yo.

Me siento inútil, no protegí a Lauryn como era debido.}

Y tú que piensas de como me siento yo.]

Termino y salgo a secarme, lanzo la toalla a un lugar del baño y me coloco la ropa que nana me dio, salgo de ahí corriendo y sintiendo como los rasguños, marcas, mordiscos, cortes y golpes arden al estirar la piel.

Llego a la puerta y suspiro antes de abrir, mi corazón golpea fuerte en mi pecho y mis manos dudan en abrir, pero finalmente decido entrar. Cierro la puerta detrás de mí y observo su cuerpo lleno de vendas y moretones, el grisáceo que antes tenía se ha ido un poco y cierro los ojos dejándome llevar por su dulce aroma.

Como un adicto llego hasta su lado y aspiro fuerte. Está con un hermoso vestido de tiras blanco de encajes, me acuesto a un lado de ella y toco su frente raspada —Te has esforzado mucho, eh —me acomodo mejor y paso mi brazo por debajo de su cabeza —Eres una chica fuerte—doy un beso a su frente —Dime ¿qué otra mujer en la tierra daría su vida por un hombre? ¿acaso estás loca? —niego —te gusta llevarme la contraria—sonrío —señora de Dhall.

Miro la pared y un recuerdo de nuestra vida comienza a pasar por mis ojos, desde lo humana que se creía hasta su casi muerte, lo que hace que por mis mejillas bajen gruesas lágrimas.

—Nunca creí que lloraras tanto —susurra apenas audible, bajo mi vista y ahí está ella, una de sus manos viaja a mi pecho y lo acaricia.

—Shhh, no te esfuerces—alzo su barbilla y planto un beso en sus labios.

—Pensé que moriría, yo no me sentía en mis seis sentidos —acaricio su rostro—y en lo último que pensé fue en ti—se estira un poco y choca sus labios con los míos en un suave beso.

La puerta es tocada y gruño en señal de respuesta, me separo un poco y hablo —¿Quién? —se abre la puerta revelando a la anciana que antes me regaño.

Ella cierra la puerta y se aproxima a nosotros, Yoshua gruñe en advertencia y ella para, su ropa negra yace impecable y sus ojos grises no traen buenas noticias.

Da una leve inclinación y procede a hablar—Alpha, Luna —mira a Sara y ésta asiente —esto será rápido, Alpha. La luna sufrió un choque al corazón, como ya sabrán ella es un demonio poderoso al ser la hija de una reina, es una Alpha licántropa que se completa con ser su luna —calla por un momento.

—Eso ya lo sabíamos, ¿es todo? —pregunto.

Niega —Se acuerda de la vez que su luna fue secuestrada por el príncipe vampiro —aprieto mis manos. Como no acordarme de ese maldito —por desgracia ella sufrió una transformación vampírica interior que se vio afectada por su hijo, a media que crecía él iba jalando la energía de ella hasta tomar completamente la parte vampiro y llevándose con sigo la parte más poderosa de su demonio, es por eso que no resistió, que no pudo con todo y ahora es más humana que una inmortal—ambos nos miramos y volvemos a observarla —tu cuerpo ya no puede hacer todo lo que hacías debido a eso, ahora, la parte más importante que deben saber es que tienen que proteger con su vida a su primogénito, es el bebé más poderoso que hay y cientos de personas lo tratarán de robar para utilizarlo, es un híbrido muy fuerte que sabe y crece sin precedentes y ya lo demostró matando a una persona con tan solo tocarlo, cuídenlo —y con esto último desaparece frente a nosotros.

—Tengo miedo—es lo único que sale de sus labios después de un largo silencio y sinceramente lo entiendo, yo también estaría así.

—Cálmate preciosa, yo estoy aquí para ti—trato de apaciguar su angustia un poco y ella tira su cabeza a la cama.

—Son tantas cosas que no sé ya ni que pensar—sus ojos se cristalizan y tomo sus manos.

—Hey hermosa, recuerda que no estas sola, pelearemos juntos en esto, yo te seguiré amando si eres humana, vampiro, demonio e incluso una hermosa loba —sonríe y rápidamente eso cambia a una mueca.

Muerde sus labios y cierra sus ojos —Tengo dolor de cabeza —y como si la hubiese llamado nana entra a la habitación con cientos de cosas sobre una bandeja.

Saca una cuchara y tira de su especialidad en ella—vamos nena, levántate —Sara se apoya en el colchón, abre la boca y traga lo más rápido que puede —ahora toma un poco de esta otra, te hará bien —ella vacila un poco, pero finalmente toma, llena unas hojas de una crema chocolate y la pone en su frente.

—Que alivio —se vuelve a acostar y yo me levanto para darle un poco de espacio.

—Nana, ¿estás bien? ¿No estás cansada por todo lo que ha pasado?

—No mi niña, me he recuperado rápido gracias a la medicina, además de que no fue mucha cosa lo que me hicieron —aprovecho esa distracción y retrocedo.

—De igual forma, si te sientes mal me dices, que aquí estoy yo para ayudarte —sonríe y niega, se voltea y tira un poco de medicina en la cuchara.

—Tú no te vas a escapar, ven aquí —niego—Wade, lo necesitas—camina hasta mí con su medicina y cierro mi boca.

—Wade —Sara me riñe y junto mis cejas—mi amor, mi Alpha, ¿podría usted tomar su medicina? —Dios, si lo pone con esa vocecita que es lo que no me tomo. Trago fuerte al sentir el amargo sabor en mi paladar y suspiro buscando aire.

—Que niña eres —la voz de Elizabeth suena por todo el cuarto y volteo para ver como deja a Amir en la alfombra suave, Matías viene detrás tratando de aguantar la risa y por la puerta se asoma mi padre que está lleno de vendas, también Emilie e Isaac que carga en sus brazos a mi hermoso sobrino; Paola, Andrews, Santiago, Sofía, Roberto, las dos sobrinas de nana, Aruna y finalmente el idiota de Henrry.

Todos miran a mi futura esposa pidiendo permiso de pasar y ella sonríev—vamos entren, que esperan —se levanta cuidadosamente y escaneo su cuerpo.

Sé que le esta doliendo pararse, pero me lo negará, porque hay invitados, corro hasta su lado cuando veo que tambalea y ella se sujeta de mi antebrazo.

—Tranquila, una cosa a la vez—susurro para nosotros.

—No soy una discapacitada, Wade —sonríe y dirige su vista a todos —bien, ¿en qué les puedo ayudar? —sus ojos brillan.

—Nosotros queremos disculparnos por la actuación de allá abajo el día de ayer. Estábamos agitados por todo que no nos dimos cuenta de su mal estado y lo sentimos—las sobrinas de nana agachan la cabeza.

—Sí, todo fue tan confuso y rápido, el ver que mi sobrino mató a un demonio y luego esas emociones —Emilie da un paso al frente.

—El ver cómo llegaban a la mansión otra vez tan simplemente —mi padre mira el gran ventanal a un costado.

—El no poder defenderlos con honor hasta el final —Roberto y Paola dicen a unísono.

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