El hombre con la máscara de zorro romance Capítulo 349

-No es posible.

En este momento, Ichiro empezó a entrar en pánico.

-Señor policía, es un malentendido. Nunca he hecho tales cosas. Tienen que presentar pruebas.

El policía no pudo evitar burlarse viéndolo tan nervioso. Volvió a mostrar la orden de arresto frente a él.

-Señor Matsuda, ve claramente este papel en mi mano, por favor. Sin evidencia, ¿crees que podemos aprobar tal orden tan casualmente? Ven con nosotros, no hagas defensas innecesarias.

Ichiro sabía que todo había terminado. Le dio a Oscar una mirada fiera, fue puesto esposas electrónicas y abandonó la mansión.

Tan pronto como los insignificantes se fueron, Oscar se cambió la expresión en su rostro repentinamente. Pellizcó los hombros de Laura, la miró de arriba a abajo. Al ver que estaba intacta, que no había huellas de daño ni ropa rota, se alivió suspirando y la abrazó en sus brazos de inmediato.

-Genial, afortunadamente que estás bien. De lo contrario, lo mataré.

-Tontito.

Laura sonrió, abrazó a Oscar con afecto y le dio dos suaves palmaditas en su espalda ancha.

-Por supuesto que estoy bien. Pero me asustaste, que fuiste tan rápido y me encontraste tan pronto.

Al pensar en esto, Oscar desvaneció la sonrisa. Miró hacia el otro lado y luego explicó suavemente.

-Fue Olivia quien me contó su plan. Si no hubiera sido por ella, yo no habría podido encontrarte tan rápido, ni mucho menos reprimir a Ichiro.

-¿Olivia?

Laura tenía en mente inconscientemente la expresión perdida de Olivia antes de ser raptada.

-¿Está bien Olivia? Debería sentirse muy dolorida ahora. Sea como sea, debemos agradecerle. Si no fuera por ella, no podrías encontrarme tan pronto.

Oscar se burló. Obviamente no estaba de acuerdo con la idea de Laura.

-Si no hubiera sido por ella, no habrías sufrido tanto, ni mucho menos sido enredada por tal perversión. Se lo merece.

-Oscar -se apoyó en los brazos de Oscar Laura y tapó sus labios con un dedo-. Sea como sea, es tu hermana, y también es una víctima. Si no fuera confundida y criada por los males, no se convertiría en lo que es ahora. Deberíamos tratarla mejor.

Oscar miró fijamente a Laura, y finalmente se rindió. Sonrió y sacudió suavemente la cabeza y tocó la nariz de Laura.

-Eres siempre tan bondadosa.

Laura inclinó la cabeza y apretó el brazo de Oscar,

-Vámonos, cariño, vámonos a casa, Iker todavía debería estar en casa esperándonos.

Al oírlo, Oscar se volvió a sonreír y la miró fijamente con amor.

-Es verdad que Iker está esperándonos en casa.

Los dos hablaron con dulzura por todo el camino. Al llegar a la mansión de Rasgado, vieron a Lorenzo sentado en el banco del patio, con las manos en las rodillas. Parecía mucho mayor que antes.

-¿Qué pasa, papá?

Comentarios

Los comentarios de los lectores sobre la novela: El hombre con la máscara de zorro