El Prohibido Amor de un CEO romance Capítulo 74

"El señor Leng, el afamado empresario hotelero y de campos de Golf agradece sus condolencias debido al sensible fallecimiento a temprana edad de su amada hija Shirley Leng."

"Se decía que la señorita Shirley Leng estaba comprometida con el joven empresario Edward Situ..."

"Pero eso fue desmentido por su padre está mañana diciendo que ese compromiso se había anulado hacía meses."

"Todos enviamos nuestras más sinceras condolencias..."

Emily apagó la tele sin emitir ni una sola palabra.

Shirley había muerto y ella no le importaba.

Se había quedado en el departamento de Ryan y Flora porque ya no quería seguirle causando molestias a Dániel en su departamento.

Aunque los dos chicos y Teresse le pidieron que se que quedará, ella se negó.

Emily quiere estar sola.

La niña quiere pensar, meditar y sanar.

La boda de su hermana había sido un completo desastre.

Su hermana ya había salido del hospital pero no había regresado a ese departamento, pues sus suegros se lo habían impedido.

Flora y Ryan se habían quedado con sus padres en su villa familiar donde  los cuidaban como si ellos fueran niños pequeños.

Aunque Emily había querido ir por su hermana al hospital, Amely la mamá de Ryan le mandó un mensaje de parte de Flora diciéndole que se quedara con Dániel.

Su hermana le pidió que la visitará dentro de un par de días.

Ryan y su padre se habían hecho cargo de las demandas y la empresa.

Los amigos de Ryan gestionaban lo mejor que podían las contrademandas de Edward.

Por fortuna ellos conocían a jueces poderosos y estos desestimaban las contrademandas rápidamente.

Sin Dániel alrededor, Emily se sentía vacía, oscura, llena de odio hacia cierto bastardo cretino, sola, dolida...

Dániel había ido a presentar su renuncia junto con la de Emily a la empresa de diseño, pero solo aceptaron la del chico.

Carl envío un mensaje a Emily pidiéndole que fuera en persona a la empresa hablar con él.

También le pedía que ella entregara en persona el proyecto de la villa de las cantantes de K-Pop.

De esa forma ella podría explicarles su visión y motivaciones para la distribución de la hermosa casa.

De mala gana Emily aceptó todo lo que el señor Carl le pedia.

En pijama, la niña se sentó a recordar las palabras que Dániel le dijo antes de salir.

"No salgas mi princesa."

"Te enviaré comida."

"Tu solo descansa, relájate y cuídate."

"Ya te extraño, regresaré pronto."

El chico le dió un beso que la hizo volar sobre campos de algodón de dulce, rosa, morado, suave, dulce, cálido...

Pero después de que Dániel se fue la amargura la invadió.

Pero amargura porque?

Es lo que ella no sabía.

La niña se sienterara y eso no es bueno.

Nada bueno.

Emily se dió una ducha reconfortante, se arregló para salir.

Por primera vez en mucho tiempo tenía tiempo para pensar que hacer con su vida, lo que le había pasado y lo que siente realmente...

Todo la confundía, no se entendía nada.

Un auto se acercó a ella despacio, Emily no le dió importancia por lo que siguió su camino.

"Niña, que desconsiderada eres con esta pobre anciana."

Exclamó fuerte y claro la abuela Situ desde dentro del carro.

"Señora, discúlpeme pero usted es abuela de ..."

Respondió Emily tratando de ser lo más educada posible, sin ser cortante.

"Si, soy abuela de un nieto idiota que no sabe que tenía oro en las manos."

Declaró la abuela Situ.

"Solo quiero charlar contigo y no de mi estúpido nieto."

"Emily podríamos tomar un té o un café?"

Preguntó la abuela con un tono de ruego.

Emily nunca había sido grosera con las personas mayores y no iba empezar en ese momento así que a regañadientes aceptó.

Se subió a su auto al lado de la abuela.

Pronto llegaron a una cafetería que es íntima y pequeña.

Se sentaron frente a frente antes de que la abuela comenzara a hablar.

"Emily, que sabes de tu familia?"

Esa pregunta sorprendió a la chica.

"Casi nada, porque pregunta abuela Situ?"

Algo en la abuela de Edward aún la daba desconfianza.

"Que dirías si te digo que tienes un primo al cual ya conociste."

"Además, se que tu madre y la madre de Edward se conocieron hace tiempo cuando eran jóvenes."

La cara de asombro de Emily es demasiado evidente!

"Tengo información de tu familia de sangre, tu familia biológica pero..."

"Pero no sé si me creeras viniendo de mí en la situación en la que estamos."

La abuela le dió un sorbo a su té y lo encontró insípido.

"Sabes porque preparas un mejor té que esta agua con color y sin sabor?"

Comentó con asco la abuela Situ dejando de lado su taza.

Emily negó con la cabeza, procesando lo que le había dicho la abuela antes de responder.

"Abuela Situ, como puedo saber que no me miente?"

"No puedo confiar en usted plenamente."

Emily comenta.

"Lo sé niña."

"Por eso te llevaré a hablar con alguien que no te hará dudar."

"Las dos iremos a visitar a tu primo."

El corazón de Emily comenzó a latir desesperadamente antes de contestar.

"No voy a ir sola."

"Ya no puedo confiarme."

"Está pueda ser una trampa de su nieto."

Emily dejó en claro su miedo.

"Sabía que dirías eso, Emily."

"Por ello, él está en camino hacia acá."

Emily frunció el ceño al pensar que la abuela se refiere a Edward.

Pero, por la puerta de local Dániel entró con prisa.

Avanzó con paso firme y rápido hacía donde de encuentran sentadas la abuela Situ y Emily.

Emily pronto se encuentra de pie en atrapada en los brazos del guapo chico.

"Estás bien, princesa?"

"Te pedí no salir y cuidarte."

Comenta Dániel.

"Alguien me avisó que estabas en una cafetería con la abuela de Edward Situ."

"No sabes lo que tuve que correr para llegar aquí lo más rápido posible."

Dániel la abrazó y besó a Emily ante la atenta mirada de la abuela.

El chico dirige su mirada a la abuela antes de exclamar con voz amenazante.

"No podrá comprarla con su dinero para que desestime los cargos contra su nieto."

Amenaza Dániel con voz severa a la abuela.

"Además le informo que procederé contra él por las ofensas contra mi novia."

"Emily no esta sola."

"La protegeré de toda la familia Situ si hace falta."

La abuela Situ tiene una sonrisa complacida en su rostro mientras escucha hablar al chico.

A la abuela le parece que Dániel se comporta como un caballero de reluciente armadura rescatando a la damisela en peligro del fiero Dragón.

"Y el Dragón soy yo."

Esa idea divirte a la abuela quien se rie entre dientes.

"No sé burle."

Exige Dániel un poco molesto.

"No me burló de ti niño."

"Y no le pedí a Emily verla para chantajearla con dinero para que desestime los cargos contra mi tonto nieto."

"O se fuera de la ciudad..."

La abuela Situ habla de forma conciliadora hacia los chicos.

"Además, yo te hablé por celular para que reunieras con nosotras."

"No soy amenaza, tomen asiento por favor."

Tanto Dániel como Emily se miraron un segundo antes de tomar asiento de nuevo.

Mantuvieron sus manos entrelazadas en todo momento.

"Cómo dije antes, Emily, tengo un poco de información acerca de tu familia de sangre."

"Y por tal motivo me gustaría  llevarla con su primo ahora mismo."

"Y ella no quiere ir sola, por eso es que tú la acompañaras también, jovencito."

Asevera la abuela Situ.

"Esto es importante para ella y para mí en cierto modo y para su primo."

"Podemos partir ya?"

Pregunta la abuela antes de hacerle  un ademán a Tim para que la ayudara a levantarse.

La abuela pagó la cuenta por el insípido te.

Dániel cuestiona en voz baja a Emily si en verdad quiere ir con la abuela.

Después de todo sigue siendo la matriarca de la familia Situ.

"Estás conmigo y nada malo nos pasará."

"Iremos."

Emily intenta parecer segura.

Dániel la besa.

Esta Emily que es más segura de si misma le encanta.

Emily pudo darse cuenta de que se dirigían a la galería de James.

James y Maggie estaban ahí,  esperandolos en la puerta.

"James!"

"Maggie!"

Exclamó feliz Emily al verlos.

La niña corrió para darle un sincero abrazo a Maggie.

"Cuando regresaste?"

Preguntó Emily al borde de las lágrimas.

Ambas chicas volvieron a abrazarse con fuerza.

Cuando dejaron de abrazarse, Maggie buscó refugio en los brazos de James quien la recibe con un beso.

Dániel carga en brazos a Emily provocándole una sonrisa.

"Maggie, James, quiero presentarles a Dániel, mi novio."

Emily hizo la presentación.

Los dos saludaron a Dániel.

Cuando entraron a la galería de arte, Emily esperaba ver a su primo en ese lugar.

Pero al parecer solo estaban ellos reunidos ahí.

La abuela y James se miraron con un poco de incredulidad.

"Emily, se que esto es algo repentino para ti pero es la verdad."

"Y debes saberla."

Habló James.

"Tu eres mi prima de sangre."

"Tu madre era hermana de mi madre."

Cómo?

"Emily, a ambos nos mintieron desde pequeños."

La niña no puede creer las palabras del chico!

"Emily, tu apellido es Baek."

"Eres parte de una familia misteriosa."

"No quiero abrumarte con más detalles por ahora pero..."

Emily escuchaba pero no comprendía nada!

Baek?

Ese apellido no representa algo para ella.

James continua ante la mirada atenta  de todos.

"Llevabas un colgante de jade con este símbolo cuando te encontraron."

"Siempre lo dibujas porque es tu símbolo de nacimiento y de tu familia."

James les mostró la foto ampliada del dibujo que Emily había firmado hacía unos meses cuando había ido a dibujar con él.

A la niña le pareció que habían pasado años de eso.

"Te he estado buscando casi toda mi vida adulta."

"Cuando mi padre me contó la verdad de muchas cosas de la vida de mi madre y de la mía."

La voz de James está cargada de emoción.

"Emily, tus padres aún viven y tu madre te extraña demasiado."

La carita de la niña no refleja ninguna emoción.

En cambio aprieta con fuerza la mano de Dániel con cada palabra pronunciada por James.

"Debes saber que también tienes un hermano, pero él..."

"Él está en el mal camino."

"Es un poderoso lider de la mafia."

James desliza su mirada hacía la abuela Situ antes de continuar.

"La abuela y yo nos preocupamos por tu seguridad."

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