El Prohibido Amor de un CEO Felicidad en retrospectiva

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"Y ahora que pasará?"

Cuestiona ella.

"Tu regresarás a tu villa encanto."

"Yo sigo con mi vida."

Responde el hombre.

"Siempre eres así de frío?"

Cuestiona ella sin poder creer lo que escucha.

"Cuando tuve sexo contigo no fui frío o si encanto?"

Responde él burlonamente.

"Deja de llamarme así!"

"No soy encanto, me llamo Ekaterina, ya te lo había dicho y soy..."

Exige molesta la chica.

"Si, si ya se, la hija del embajador ruso en esta ciudad, uy que importante."

De nuevo se burla Jens.

"Mira encanto Ekaterina, te sugiero que no nos volvamos a ver."

"Ya te probé, ya te usé y no eres la gran cosa."

Declara Jens ligeramente.

La chica abre los ojos la escuchar las irritantes palabras que golpean su ego.

La chica iba contradecirlo pero el imbécil Jens se le adelanta.

"Además yo voy tras una presa más grande, que vale mucho mas la pena que tú."

"Una presa que será difícil de cazar, pero en cuanto lo haga le haré la asesinare para colgarla en mi pared como el trofeo que representa."

"Tu solo fuiste un aperitivo encanto, asi que puedes irte ya a..."

El ruido de la mano estrellándose fuertemente contra la pomposa cara de Jens fue lo más satisfactorio que pudo tener Ekaterina, pues a pesar de que si Jens pues sabía medianamente provocar algo de placer, la verdad dicha es que no fue un gran amante.

Y su miembro dejaba mucho que desear en longitud y grosor.

Además que sus gemidos o rugidos o ruidos que Jens producía durante el acto eran incomodos de oír, exagerados y burdos.

"Pues tu no fuiste un gran amante, apenas y disfrute y tuve que fingir algunas veces mis orgasmos para que te sintieras bien."

Se defiende Ekaterina.

"Deberías consultar algún especialista para tu pequeño problema entre tus piernas."

Ekaterina señala moviendo el dedo pequeño de su manita, cosa que Jens entendió muy bien.

"Y si tu no abres la boca yo no esparcire rumores acerca que eres un pésimo amante con miembro pequeño."

La chica sale furiosa de la habitación de hotel después de amenazar sutilmente a Jens.

Detrás de ella caminó su guardaespaldas que la había escoltado la noche anterior cuando Jens la llevó a ese hotel con la promesa de sexo brutal.

Brutal....

Se repetía ella en su mente.

Lo único brutal fueron sus ruidos incomodos.

"Puedes creerlo Igor?"

"Ese idiota dice que no soy memorable, que soy poca cosa, que no..."

Los sollozos no la dejaron continuar caminando ni hablando por ese pasillo de hotel lujoso.

Igor, su guardaespaldas abre la puerta de otra habitación para que ambos entren.

Cerrando la puerta detrás de ellos Igor le extiende un pañuelo desechable a la chica para que se limpie las lágrimas de su bella carita de niña.

Cuando terminó, Eksterina abraza al guardaespaldas porque se siente realmente mal.

Ella solo se fijó en la hermosa cara de Jens y su porte refinado.

Ella creyó que había encontrado un caballero que la haría suspirar en la calle y gemir en la cama, pero se había equivocado tan rotundamente que su ego y su cuerpo ahora le pesaban.

"Gracias Igor, siempre eres un ángel conmigo."

"Me daré una ducha y nos iremos."

"Me asquea el toque de ese imbécil en mi cuerpo."

Igor sin hablar le hizo una seña y ella pudo ver que su padre le había mandado ropa ya para que se cambiara.

Lentamente Igor se acercó a su espalda la chica y la rodeó con sus brazos fuertes.

Igor media más de metro ochenta y posee el cuerpo increíblemente marcado, musculoso y fuerte.

Ekaterina se deja querer, pues ahora se siente increíblemente mal.

Ella cerró los ojos, disfrutando de los besos que Igor deposita en su cuello.

"Eres deliciosa, ese estúpido no sabe la joya que tuvo el placer de poseer por unas horas en sus manos."

Susurra Igor en el oído de la chica.

La reacción de ella fue pegar sus caderas con las de él y recargarse en su fuerte pecho mientras dejaba escapar un suspiro de excitación.

Igor comprende que tiene la oportunidad perfecta de cumplir sus fantasias al disfrutar los placeres carnales que esa hermosa niña podría darle.

Y no la dejaría pasar.

Lentamente la desvistió repartiendole besos cálidos y caricias que provocaron que Ekaterina se sintiera amada, adorada, deseada, frágil en las enormes manos blancas de ese gran hombre.

Igor siempre se mostraba duro y serio en la calle, protegiéndola de todo.

Pero, ahora en la intimidad se comporta terriblemente dulce.

Acariciandola con lentitud, como memorizando cada centímetro, cada curva de la piel de Ekaterina, Igor procura darle el placer que ella merece.

El beso de ambos los unió de forma demoledora, la pasión los inundó y cuando los dos llegaron juntos tomados de las manos al clímax, supieron que nunca más se separarían.

Ese día Igor borró fácilmente el patético recuerdo del cuerpo de Jens y su asqueroso toque del delicado cuerpo de Ekaterina.

Igor le enseñó, varias veces, como se siente un orgasmo devastador y apabullante.

Juntos usaron la habitación durante todo el día.

Ellos no lo sabían en ese entonces, pero serían pieza clave para acabar con Jens y ayudar a Lorelay en un futuro.

Mientras ellos terminaban su segunda ronda de sexo increíble y sudoroso, Lorelay se dedica a pintar un cuadro para Dániel y Johana por su inminente boda.

Por la mañana habían ido a la prueba del vestido de novia.

Johana parecía una princesa sacada de un cuento de hadas que se casaría muy pronto con el príncipe azul, en este caso, Dániel.

La tela del vestido era hermosa, el talle le quedaba perfecto y se amoldaba a su delgada figura de la chica como si fuera un guante.

El vestido dejaba al descubierto la espalda de la novia.

El escote esta revestido de una tela de encaje hermosa y sumamente suave al tacto.

El velo y el tocado de flores era simplemente exquisito.

Todas las chicas que acompañaron a Johana ese día suspiraron al verla salir del vestidor para que le dijeran sus opiniones.

Lorelay se sintió encantada al ver a su amiga y guardiana tan bella.

Ella felicitó a sus diseñadores por tan hermoso vestido.

De igual forma, Maggie y ella usarán un vestido de color perla que daba justo arriba de la rodilla, elegante y discreto pero también muy hermoso.

"Te ves simplemente hermosa Johana!"

"Eres la novia mas hermosa que haya visto."

"Y ya hemos tenido dos bodas en muy poco tiempo."

Maggie halaga a Johana mientras le acomoda el velo.

"Estoy tan nerviosa que no he podido dormir bien."

"Dániel ha tenido mucho trabajo, me siento bloqueda por momentos..."

"Dios, me gustaría que no fueramos tan vigilados por los paparazzi."

Johana toma solo infusión para mantener sus nervios tranquilos.

Ella aumentó la dosis de esa infusión, pero a pesar de todo sentía nerviosa todo el tiempo.

"Solo será un día, olvídate de lo demás."

"Pasaras toda la vida al lado de Dániel como su esposa."

"Y serán muy felices."

"Anímate Johana!"

"Será hermoso y te apoyaremos en cada paso."

Maggie abraza a Johana para tranquilizarla.

"Espero que haya un vestido también para mí, pero de color negro porque no pienso ponerme color perla o blanco nunca."

Carolina entra por la puerta de la lujosa tienda de vestidos de novia confiada y feliz.

Luce muy recuperada, descansada y bronceada.

"Vaya!"

"Te ha tratado bien Dinamarca y Paul Carolina?"

Exclama Maggie mirando a la chica.

"Es un gusto que estés aquí Carolina!"

"Amiga, te extrañé, porque no me avisaste que vendrías?"

Lorelay se levanta para darle un abrazo fuerte a la ruda chica.

Cuando contempla el semblante de la chica y solo puede encontrar felicidad reflejada en sus ojos.

"Todo es culpa de Paul."

"Véanlo ustedes mismas!"

"Esta afuera en el auto esperándome."

Exclama Carolina con fastidio.

Todas se asoman por el enorme ventanal para efectivamente ver el auto de lujo de Paul el cual esta estacionado con él esperando a Carolina a que salga de la tienda.

"Es tan incomodo!"

"No me deja en paz ni un solo momento!"

"Me sigue a todos lados, no me deja hacer nada sola, me trata como una niña, me consiente

"Si sigue así lo mataré, en verdad juro que lo haré!"

"Me esta volviendo loca con sus mimos y sus

Todas las chicas escuchan las palabras de la chica antes de echarse a reir.

"Bienvenida al club de hombres que nos aman demasiado!"

Dijeron casi todas al unisono.

"Dániel no me deja ni ir al supermercado sola."

Declara Johana.

"James no me deja ir sola a comprar algo a la

Asevera Maggie.

ya sabes a qué grado puede ser posesivo Edward."

"Aunque antes no podíamos vernos por sus obligaciones."

"Ahora me ha estado vigilando mucho y tampoco me deja hacer mucho

Asegura enfatica Lorelay.

Todas estan de acuerdo que sus hombres las aman demasiado como para separse de ellas por unos minutos siquiera.

"Pues ustedes los soportan porque los aman!"

Se queja amargamente Carolina.

"Tú porque Edward es tu alma gemela."

"Tu te casas con Dániel, tu alma gemela, tu amas

"Pero Paul...ahora es diferente."

Responde la chica en voz baja.

"Prefería como era antes cuando peleábamos y nos golpeábamos."

"Ahora la única violencia que obtengo es cuando me da nalgadas cuando..."

y es tan vergonzoso eso!"

Todas volvieron a reir por las palabras de decepción de Carolina.

Ellas saben que Paul la ama demasiado, por eso es así con ella.

"Él te ama demasiado, se que no es lo que quisieras, pues antes eras muy independiente, pero valoralo."

"Paul hace todo eso por ti, te adora demasiado Carolina."

Indica Lorelay.

"Dániel adora demasiado a Johana por eso es que se casa con ella en este evento super publicitado y estan felices los dos."

"No es así Johana?"

le quita el velo a la chica para que responda.

"Si, estamos nerviosos, pero ansiosos y felices."

"Ya queremos que sea el día de la boda."

"Ya queremos ser esposos para toda la vida y tener hijos."

muchos hijos pero niego a tener más de dos pequeños a los que amaremos

Johana declara decidida.

Carolina se sienta en el sillón junto a la ventana mirando al auto donde Paul la espera pacientemente revisando su celular.

cada minuto que no está con su amada Carolina para revisar sus empresas, las entregas de sueros de la verdad y armas, pues los Black jamás pararon de distribuir y elaborar compuestos químicos.

Salvo la vez que secuestraron a Daniel Black y Lara su esposa.

Pero ahora, los Black vuelven a ser los número uno en drogas, sueros y armas de todas las ciudades y el

"James se casará pronto con Maggie en una boda enorme como la de Aurora."

"Y lo hará porque la ama."

"Yo eventualmente también me dejaré convencer por el insufrible y tonto Edward para que nos casemos."

"Y lo haré porque lo amo y es mi alma gemela."

"Aunque también es un bastardo la mitad del tiempo."

Carolina se ríe al escuchar a su

Las palabras que más le gustan para describir a Edward fueron "Insufrible" y "Bastardo."

"Dale una oportunidad a Paul, Carolina."

que estás aquí llamaré al diseñador para que te tome medidas para tu

en mente algo fabuloso y oscuro

risas femeninas de las chicas se escuchan fuerte en el salón donde se prueban los

tres horas de risas, pláticas del corazón y de hombres, todas se despidieron para regresar a sus

sienta un momento a descansar sus ojos rememorando la hermosa tarde de chicas que pasó junto con sus mejores amigas, sus compañeras de

el momento en que Carolina salió dem edificio para ir al auto con

vieron a Paul bajar del auto para abrirle la puerta del pasajero como un verdadero

se quedó un minuto mirándolo para después abrazarlo por el cuello, pararse de puntitas y besarlo apasionadamente ante los silbidos, aplausos y gritos de felicidad de sus

que ella ama tanto a

a separarse le dolería tanto a ella que no sabría que hacer con

mientras bebe su elixir para combatir el dolor que aún le aqueja en su

veces el dolor se dejaba sentir como en

manos manchadas de pintura roja Lorelay recuerda haber compartido el postre de fresas con Edward la noche anterior cuando él volvió a darle a beber el elixir de amor cuando ella salía de una reunión con un socio de la empresa

salía de la sede del edificio Lorelay se sorprendió al sentir un pinchazo como una picadura de abeja justo cuando Edward apareció a

a abrir los ojos, Lorelay estaba en la cima de un edificio muy alto adornado

una mesa elegante para que

cena fue exquisita, refinada y cuando llegó el postre, Lorelay se maravillo al ver que era de fresa, pues durante mucho tiempo ella no pudo comer fresas porque le recordaban a Edward y le causaban

al estar con él sentada, sintiéndose extrañamente ligera y feliz, compartió con Edward

disfrutaron con una sola cuchara para los

cuchara fue reemplazada por el dedo de

labios con sabor a fresa reemplazaron

saber como, Lorelay terminó sentada encima de Él besandolo apasionadamente a la luz de la

por reconocerse, por saborearse,

estaba resumido en sus labios, en la lengua

los jadeos, sus inhalaciones cortadas de aire, sus suspiros, sus gemidos en la boca

"Te amo demasiado, te amo."

Susurra Lorelay intoxicada de amor.

también te amo y te

tanto, pero ahora estas

Eres mía, siempre fuiste mía."

habla mientras recorre con su boca la piel exquisita de la chica en su

a su amada para llevarla a una habitación especial donde una cama blanca los

no iba a tener sexo

quiere dormir al lado de

tiempo que Edward no dormía bien pues solo pensaba en

está vez nada le impidió a Lorelay regalarle un orgasmo purificador a

Él hizo lo mismo después.

no saciados con ese pequeño entremés los dos durmieron enredados en esa

desnudos completamente, los dos por fin se fusionaron en ese único ser que tenían que

En esa alma única perfecta.

energía de los dos se apaciguó para darles una merecida tregua y permitirles dormir bien, recuperando sus

"Buenos días mi amor."

tiernamente Edward a Lorelay susurrando en su oído mientras que ella despertaba del hermoso sueño donde sus hijos y Edward siempre eran

vivían una vida plena, libre y

"Buenos días amor mío."

agazapada contra duro y musculoso pecho de Edward, recostando su oído para escuchar el corazón de su

pero si no lo

Edward antes de colocarse encima de Lorelay para besarla

poco abre las piernas de la chica para tener acceso a su cálida

con eso de que necesitabas veinticuatro

"mmmmhhh..."

El Prohibido Amor de un CEO novela Felicidad en retrospectiva

En El Prohibido Amor de un CEO Felicidad en retrospectiva, el amor entre él y ella es hermoso y cálido. Me gusta mucho su personalidad sobria y decidida, a diferencia del conejito blanco colegiala de voluntad débil. Cuando está en peligro, sabe cómo protegerse. Cuando no sea reconocida por todos, usará sus acciones para demostrarlo todo. Por supuesto, una heroína de élite también se debía a que su presencia apoyaba el cielo para ella. Lee El Prohibido Amor de un CEO Liliana Situ Felicidad en retrospectiva en readerexp.com