El Prohibido Amor de un CEO Noticias Inesperadas

Emily había despertado más temprano por la mañana, después pasar la noche en la cama con Edward.
Se apresuró a darse una ducha para alistarse.
La niña debía ir al trabajo y entonces ella recordó.
Mandó un mensaje para Dániel.
"Dániel, llegaré directamente al lugar del proyecto, te veré allá de acuerdo?"
Dániel contestó.
"Emily, todo en orden?"
"Si, claro, te veré más tarde de acuerdo?"
Respondió la niña.
"Está bien Emily."
Contestó Dániel.
El chico se quedó mirando su celular pensando si debía poner el "te quiero" al final de la oración o no...
No quería que Emily lo alejara.
Ayer la había besado finalmente.
El beso hizo florecer ese amor lindo que sentía por esa niña hermosa que se metía en su mente, en sus sueños y que se estaba metiendo lentamente en su alma.
Tommy salió del cuarto con una limpia y dócil Teresse.
Hoy era el día en que ella regresaria con los Black para iniciar el contraespionaje.
"Seguro que ella lo hará bien?"
Cuestionó Dániel con severas dudas.
"Muy seguro Dániel."
"Teresse?"
Murmuró Tommy.
La chica asintió antes de de responder.
"Seré fiel a Tommy, cumpliré mis deberes y regresaré cuando tenga algo importante en mis manos."
Respondió con firmeza la chica.
Después de un rápido beso en los labios de Tommy, Teresse abrió la puerta y se fue.
Ambos la vieron cerrar la puerta detrás de ella.
Dániel miró a Tommy con incredulidad.
"Y si nos delata?"
Preguntó Dániel.
"No lo hará, te lo garantizo."
"Ahora quieres saber algo más de tu Emily?"
Inquirió Tommy hacía Dániel quien afirmó.
"Encontré a su primo en esta ciudad, pero hay demasiados hombres con ese nombre."
"Dániel, algunos de los miembros de su familia dirigen operaciones clandestinas."
"Aún debo averiguar más."
"Ella puede ser alguien importante."
Aseveró Tommy caminando a la cocina para preparar su desayuno.
"A quien estás mandando mensajes?"
Edward detrás de Emily le dió el susto de su vida por lo que casi tira el celular al suelo.
"A nadie, nos vamos?"
Preguntó Emily entre nerviosa y asustada.
Edward la miró intrigado, pero no dijo más.
La examinó a detalle y decidió que debería comprarle más ropa adecuada.
"Si, vámonos ya."
Respondió Edward.
"Recuerda que hoy te llevarán de comer y no puedes rechazar la comida, entendiste?"
Sentenció Edward.
"De acuerdo."
"Yo vendré todas las tardes después del trabajo para poder terminar de diseñar el departamento."
Afirmó Emily algo triste al recordar que Edward soñaba con su futuro bebé que tendría con Shirley.
Su prometida y futura esposa.
"Nunca más debo de enredarme con este hombre de nuevo."
"Su prometida ya está embarazada, por lo que no puedo ser su amante."
"No, nunca más."
Pensó con decisión Emily mientras Edward la observaba en silencio.
El Aston Martin que ya conocía Emily se estacionó frente a la entrada de los lujosos departamentos.
El chófer les abrió la puerta del auto.
Emily apoyada por Edward entró al auto y él entró del otro lado.
Dániel la esperaba dentro de aquella casa ayudando a Cinthia, la nueva chica del equipo que suplía a un chico que había pedido licencia por enfermedad.
Cinthia estaba total y perdidamente enamorada de Dániel y le había rogado de rodillas al señor Carl para poder tomar el lugar del enfermo.
Cuando lo logró, supo que tendría una oportunidad de oro para pasar todo el día con Dániel.
Sin importarle que él estuviera interesado en Emily.
Ella envidiaba secretamente a Emily, desde la fiesta de la empresa cuando ella había llegado de la mano del guapísimo Dorian.
Se veían tan lindos juntos y ahora Dániel había aparecido.
Y también Emily lo acaparaba.
No era justo!
"Dániel, podrías ayudarme a colocar está estantería por favor?"
"Pesa demasiado para mi."
Rogó en tono dulce la niña.
Dániel no se pudo negar, por lo que le ayudó.
"Por la noche quiero que estés en Golden Osmanthus, enviaré el auto por ti."
Ordenó Edward antes de que Emily saliera del auto.
La detuvo un instante para darle un rápido beso tomándola de la barbilla.
Emily descendió del auto esperando que nadie la viera antes de entrar a la casa.
La niña se puso a trabajar para poder olvidar todo.
Sobretodo quería terminar de diseñar el departamento de Edward.
"Quien es Emily Mu?"
Preguntó un mensajero de la compañía.
Todos miraron a Emily.
Dániel se acercó al repartidor y le quitó las cosas de las manos antes de dárselas a una apenada Emily.
"Firme aquí, vendré en unas horas."
Comentó el repartidor y se fue dejando a todo el mundo anonadado.
"Porque le trae comida a ella el mensajero de la empresa?"
"Acaso por ser líder de este proyecto se le dan más privilegios a Emily?"
Todos murmuraba.
Al escucharlos, Dániel volteó a ver a todos con ojos de pocos amigos, por lo que todos guardaron silencio.
"De hecho, está comida es para compartir, acerquense!"
"Todos podemos comer, es demasiado para mí!"
Comentó Emily feliz sacando platos y cucharas desechables de las bolsas.
Pronto todos tomaron algo del delicioso desayuno.
"Bien manejado."
Dániel le susurró a la niña cuando nadie los veía.
El joven llevó a Emily a una habitación vacía para abrazarla
"Te extrañé."
Pensó Dániel.
El chico buscó la pequeña boca de fresa de la niña, pero en ese preciso momento sonó el celular de Emily.
"We're falling in and out."
"We're Falling in and out."
(Caemos en lo inconsciente, caemos en lo inconsciente.)
"Maggie, hola!"
"Que.. que?"
Respondió Emily en brazos de Dániel.
Él la volteó y la abrazó por detrás para poder oler su cabello y besar sus mejillas.
"Emily, me voy de emergencia en unas horas."
"Necesito verte en este momento."
"Se que estás trabajando pero, puedes venir a la galería de James?"
Rogó de forma imperativa Maggie, quien veía a James hablar con alguien.
El joven elevaba el tono de su voz más y más con auténtico enfado.
"Está bien, avisaré y llegaré en un momento..m"
"De acuerdo ya voy!"
Emily terminó la llamada y sujetó a Dániel por los brazos.
"Dániel, debo irme por unos minutos."
"Podrías cubrirme?"
Cuestionó la niña algo nerviosa tratando de zafarse del abrazo de Dániel.
Dániel la miró y está vez si tuvo éxito al besarla.
Tomando su carita entre sus manos impidió que la bella niña alejara.
Suspirando y a regañadientes, Dániel dejó de besarla.
"Iré contigo, no te dejaré ir sola a donde vayas."
Respondió Dániel caminando a dónde estaban todos antes de dar instrucciones.
Ambos salieron rápidamente en el auto de Dániel.
"Porque se irá de repente Maggie?"
Se preguntaba Emily preocupada pues su vida era su trabajo en la editorial.
James había terminado de discutir por teléfono con su padre adoptivo al decirle que Maggie lo acompañaría y no la dejaría atrás.
No había sido una conversación placentera pero su padre pudo entender sus razones.
Él mismo había querido proteger a la madre de James pero al final no pudo.
El sonido del timbre de la galería hizo que ambos se sobresaltaron.
Maggie caminó a la puerta.
Emily y un chico esperaban en la puerta.
Maggie los dejó entrar.
Emily le pidió a Dániel que la esperara un momento sentado en un sofá individual.
Por pura casualidad James se asomó y vió a Dániel sentado en la recepción.
"Que bueno que pudiste venir, no me avisaron que estabas aquí."
Comentó James estrechandole la mano a Dániel muy agradecido.
"Vamos, hablemos en mi despacho."
Pidió James.
asintió mirando hacía dónde Emily se había ido.
"Maggie que pasa?"
"Porque te vas con tanta prisa"
Inquirió Emily.
voy con James a casa de su padre."
"Emily no se cuándo regresaré."
Declaró tristemente Maggie.
"Toma las llaves de nuestro departamento."
"Emily debes saber algo importante ahora mismo."
"Cuando regresé, Ryan compró ese departamento para ti."
Se sinceró Maggie con Emily.
"Me pidió que nunca te dijera, pero ahora que está comprometido con Flora no encuentro razón para seguir ocultandote eso."
El semblante de Maggie se puso serio.
que sepas que siempre serás mi mejor amiga."
"Cuídate de ese bastardo de Edward Situ."
"Alejate de él lo más posible."
"Emily, te quiero mucho amiga."
Maggie caminó hasta la niña para abrazarla fuertemente.
Emily sintió miedo y tristeza por las palabras de su amiga querida.
Parecía que su amiga se despedía para siempre y jamás volvería a verla.
"Maggie, porque?"
"Pero no podré mandarte mensaje o hablarte por celular?"
entiendo, tu vida está aquí, la editorial..."
Comenta Emily intentando reprimir sus lágrimas.
"Mis prioridades cambiaron."
"Quiero estar con James siempre."
Emily y no puedo vivir sin él."
palabras llenas de amor y convicción dejaron sin habla a Emily.
Maggie amaba a James.
Ella jamás dijo que amaba a su ex novio y ahora sentía amor por
Resignada, Emily le devolvió el abrazo, besando la mejilla de su amiga, Emily contestó.
"Cuídate tu también."
"Si algo malo pasa llámame, iré por ti a dónde estés."
"Solo cuídate y de vez en cuando hablame."
"Sabes mi número, por favor."
Rogó Emily al borde de las lágrimas.
"Lo haré."
"Por favor, dales este regalo a Ryan y Flora y mis
"James también les mandará un regalo..."
Ambas sintieron un nudo en la garganta cuando unos leves toquidos en la puerta las separó.
James abrió y vió a las chicas secandose a toda prisa las lágrimas de sus ojos
Dániel entró y consoló a Emily.
James observó la íntima interacción entre las dos, por lo que también abrazó a Maggie quien sollozaba.
Ambos hombres solo se vieron y asintieron en silencio como despedida.
En el auto, Emily se sentó en silencio.
amiga se iba y no sabía si regresaría.
"Dónde estuviste?"
Edward interrogaba a la chica frente a él.
"Maestro, hice lo que me pidió."
"confiaron en mí y creyeron mi cambio de actitud."
Comentó Trini, la espía que le había dicho Tommy que se llamaba Teresse.
"Ven aquí, siéntate en ese sillón."
que estar cien por ciento seguro."
un pequeño frasco de transparente y una aguja pequeña.
Trini sin miedo, se arremangó su suéter y dejó al descubierto su brazo.
"Maestro, estoy lista."
Aseveró Trini.
Edward le inyectó el suero de
Paul gozaba de una inusitada tranquilidad frente a su equipo en su casa.
Las entregas iban bien.
La producción estaba ya al cien por ciento de capacidad.
Edward no había llamado por tonterías...
Algo malo pasaba y él podía sentirlo.
Era demasiada calma.
"Revisen todo, quiero un informe de búsquedas raras."
"Ya no quiero más sorpresas."
Ordenó Paul a su equipo.
En la mansión Leng, la abuela Situ estaba tratando civilizadamente de hablar con Shirley y su padre acerca de romper el compromiso anunciado.
retractaremos, no se puede cancelar este
bastante en empresas Situ y queremos lo que ofrecieron en
en voz alta el padre
comprendo que sea difícil está separación
comprendo que se verán afectados sus
"Pero intenté entender."
continuar con este
desafortunadas, en este caso el encuentro de su hija con el heredero de los
Comentó terminantemente la abuela Situ.
busca compensación financiera, diga su precio, podemos llegar a un acuerdo el padre de Edward
quiero terminar en malos términos con su familia, podemos quedar en buenos
pie, la abuela Situ, se apoyó de su ayudante para poder tomar su bastón y comenzar
si insiste en esta boda, contra mi voluntad tendrá que ir directamente con el padre de Edward por
jamás podrá darles lo que invirtieron más un diez porciento de interés por las
Declaró confiada la abuela Situ.
Matriarca de la noble familia Situ soy la única con poder para
Shirley, lamento que te haya metido en ese embrollo, de verdad
no me equivoco, no amas
un capricho para ti no es
por las palabras de la anciana tiró las tazas y el juego de té que estaba en la mesa frente a
Se levantó y comenzó a reclamarle.
"Usted no me puede hacer esto!"
"Seré el hazmerreir de la ciudad!"
se llevará a cabo quiera o no quiera
no me importa si Edward no quiere casarse conmigo o no
puede separarme de Edward ni siquiera
Gritó Shirley.
palabra asustó a
"Niña, dijiste Lucy?"
Preguntó la abuela Situ con preocupación.
"Así es!"
supuesta novia muerta de Edward me secuestró y me tendió una trampa con ese
en mi sano juicio hubiera aceptado intimar con ese imbecil de no haber sido porque nos
perra se rió de mi y esto es lo que
no le daré el gusto, claro que
"Edward es mío!"
"YO LO GANE!"
"Ella perdió!"
Gritó enloquecida Shirley.
da cuenta de todos los años que pasé tras Edward tratando de que se fijaría en
de la nada, esa perra infame lo embrujó y él hasta iba a casarse con
"Con ella!"
"La muy hija de puta!"
Las palabras de Shirley eran delirantes!
cuando su auto apareció en el
cuando se sospechó de que Flora Mu pudo haberla matado pero todos sabemos que no era
y su madre son unas cobardes que no tuvieron agallas para pelear
es que Edward pudo destruir su reputación
oportunidad llegó a mi y no la soltaré, lo
"Edward me pertenece, es mío!"
mi esposo y todo lo que tiene será
veía por primera vez la verdadera naturaleza egoísta, maniaca y desquiciada
adivinaba que debajo de esa falsa careta de amabilidad y ternura combinada con complacencia se escondía una bruja altanera con las peores
Y la abuela siempre acertaba.
una proposición que hacerte Shirley e involucra más dinero del que ustedes
de un posible título de nobleza en Dinamarca, les
abuela después de un breve momento de
Ambos Leng asintieron.
"Título de nobleza."
único que pensaron padre e hija, cortados por la misma
quiso contarle a Dániel porque estaba triste, solo le pidió tiempo para comprender lo que su amiga le había
que ella no quería llorar frente a
a la casa del proyecto, la niña se puso sus audífonos y se encerró en un cuarto con una mesa a dibujar
no perdió el tiempo e invitó a Dániel a comer con las demás personas
aceptó de mala gana, pero quería respetar a
después ella le contaría que
Dániel no quería forzarla a nada.
mordía con fuerza el labio inferior tratando de reprimir los sollozos
Leer El Prohibido Amor de un CEO novela Noticias Inesperadas de Liliana Situ
En El Prohibido Amor de un CEO Noticias Inesperadas, lo entiendo perfectamente, el matrimonio contigo es forzado. Pero aun así aceptó, porque su corazón pronto se dio cuenta de la mitad de su vida. En Noticias Inesperadas, la toleró, la mimó y se sacrificó por ella. Él la dejó seguir sus propios pasos, pero como estaba preocupado de que se cayera, todavía la observaba para sostenerla. Su amor no es un cliché, ni irrealmente dulce, sino muy verdadero y abnegado. Lee El Prohibido Amor de un CEO Noticias Inesperadas del autor Liliana Situ en readerexp.com