El Prohibido Amor de un CEO romance Capítulo 224

De pie frente a la enorme ventana Lorelay mira las gotas de lluvia deslizarse por el frío vidrio hasta llegar al suelo con una lentitud desesperante.

Afuera la lluvia ha aminorado, las nubes grises cargadas de lluvia parecen darse por vencidas de descargar su furia contra la tierra.

Los recuerdos de Lorelay pasan como flashazos en su mente.

La bella chica recuerda miles de momentos que vivió al lado de David, su padre.

Los miles de recuerdos del hombre son los únicos buenos recuerdos que ella tiene de cuando era una desamparada niña pequeña.

Lorelay recuerda el cariño paternal escondido y la preocupación que siempre mostró por ella cuando se convirtió en una joven adulta.

Lorelay también recuerda cuando ella regresó de su exilio y cuando pudo abrazarlo después de mucho tiempo.

Ahora Lorelay no volvería a verlo ni a escucharlo nunca más.

Lorelay la leído el papel una y otra vez.

Las palabras escritas de puño y letra de su padre piden, cómo última voluntad, ser cremado lo antes posible.

Por tal motivo Lorelay sostiene en sus manos la urna que contiene dentro las cenizas de su padre.

Flora mientras tanto intenta controlar su desconsolado llanto en brazos de Ryan, pero parece imposible.

Ryan consuela a su esposa quien no puede detener su llanto por el fallecimiento de su padre.

Flora de pronto de siente sola pues Lily, su madre, ahora tiene una nueva vida con el empresario Gibrand con quién se casó.

La madre de Flora vive lejos de ella, por lo que la chica se aferró a su padre quien vivió con ella durante un buen tiempo.

Y esa diaria convivencia aumentó el vínculo de amor y afecto entre ellos.

Lorelay escucha el descorazonador llanto, ella también desea llorar como nunca antes lo ha hecho.

Sin embargo la chica se mantiene tranquila y ecuánime en la medida de lo posible.

El sonido de la lluvia fuera bien puede amortiguar el sonido de su llanto piensa Lorelay.

Edward vigila a las tres pequeñas niñas quienes juegan con sus muñecas.

Ninguna de las nenas esta triste ni ha llorado la muerte de su abuelo.

Las tres le dieron un respetuoso beso a la mano fría de su abuelo y le desearon buen viaje antes que el cuerpo de David fuera llevado al crematorio.

Las abuelas Freda y Situ hablan con los padres de Ryan por videollamada pues estan muy lejos para que regresen de inmediato.

Los padres de Ryan ofrecen sus condolencias a las chicas Mu por el sensible fallecimiento de David Mu.

Lorelay aprieta la urna entre sus manos mientras recuerda que su padre dispuso sus pocas pertenencias y dinero en cuatro cuentas bancarias.

Una cuenta para las dos hijas de Flora, una cuenta para Flora, una cuenta para Lorelay además una cuenta reciente para su nieta Emily.

David Mu repartió sus pocas pertenencias entre sus hijas y nietas amadas.

Lorelay deja con respeto la urna de cerámica sobre una mesita, la chica desliza la puerta de cristal para salir del lugar donde está.

Unas cuantas gotas de lluvia empapan el oscuro vestido que ella viste, haciendo que la tela mojada se pegue a su cuerpo.

Lorelay camina hasta un rinconcito apartado del jardín sin importarle que la lluvia la empape.

La chica tampoco siente frío aunque su cuerpo esté tiritando de frío debido a que su piel está helada

Es como si ella se hubiera entumecido por dentro y no sintiera nada en absoluto.

Cayendo de rodillas, Lorelay permite que todo el dolor acumulado en su pecho salga en forma de llanto.

Abrazando sus piernas Lorelay solloza la muerte de su padre.

Las amargas, saladas y frías lágrimas de mezclan con las gotas de lluvia.

"Papá..."

Solloza Lorelay antes de abrazarse con más fuerza.

Lorelay nunca esperó recibir la llamada de Flora, tarde por la noche, para informarle que papá había fallecido en su cama.

David Mu murió como un Rey.

Si bien, la muerte de los padres es lo más natural y lo que los hijos esperan y temen, el momento en que sucede es mucho más amargo y duro.

Estar frente a frente con el cuerpo del ser amado que parece dormido, pero no volverá a abrir los ojos nunca más simplemente destroza el alma.

Lorelay comprende que nunca volverá a hablar con su padre.

Ni tampoco volverá a sentir sus abrazos, ni caricias.

"PAPA!"

El lamento triste Lorelay es acompañado por un rayo el cual surca el cielo haciendo que el cielo se ilumine antes que el sonido impacte en el aire.

"Lorelay!"

Ryan exclama cuando encuentra a la chica después de buscarla por todos lados.

Ryan, quien tuvo un presentimiento salio sin paraguas de la casa y tuvo la suerte de hallar a Lorelay hecha ovillo en un rincón completamente mojada.

"Déjame, yo la llevaré adentro."

Edward quien sostiene un paraguas aparece detrás de Ryan en ese momento.

"Lorelay, vamos mi amor, entremos a casa para que puedas cambiarte de ropa."

Pide Edward mientras extiende el paraguas a Ryan para que deje de mojarse.

Lorelay intenta levantarse del suelo pero Edward se adelanta para cargarla en brazos y llevarla más rápido dentro de cada.

Las niñas miran la escena por la ventana, dentro de casa.

Emily no comprende por que mami salió a mojarse a la lluvia o porque esta tan triste por la muerte de su abuelo.

"Te extrañan abuelo."

Susurra Elisbeth, las demás niñas miran al mismo punto en específico.

La energía del abuelo David acaricia las mejillas de las nenas quienes sonrien.

La caricia es cálida y hermosa justo como siempre les acariciaba las mejillas el abuelo David.

Las tres vuelven a rebotar sobre el mini trampolín pues están felices pues su abuelo las cuida.

"Niñas, están bien?"

Preguntó la abuela Freda cuando entra a la habitación, al momento la abuela supo.

"David, regresaste?"

"David, debes irte ya, te veremos pronto."

Pide la abuela Freda, la neblina grisácea se acerca a ella antes de desaparecer.

"Ni una palabra de esto a sus papás mis niñas."

"Esto queda entre su abuelito y ustedes, comprenden?"

Pide la abuela Freda, lass nenas asienten en silencio, después vuelven a jugar alegremente .

Las tres niñas saben que su abuelito David es feliz y libre donde esta, las tres pueden sentir eso.

Por esa sencilla razón ellas no estan para nada tristes.

Además su abuelito David les dijo que las ama y que las cuidara de otro modo.

La abuela Freda sonríe porque todo iba conforme a lo planeado y estipulado.

Sin las infusiones de la juventud recorriendo sus cuerpos, los tres mayores de la familia Mu, Baek y Situ, por fin estan comenzando a sentir el paso del tiempo.

Es su momento.

David trascendio año nueve meses después que su nieta Emily nació.

Solo tres meses faltan para la hora final.

"Freda ve con Lorelay, ella está muy afectada."

Pide la abuela Situ hacía su amiga.

"Puedes darle una infusión para que se tranquilice?"

Cuestiona la abuela Situ.

"Lo haré Aline, vigila a las nenas."

Indica la abuela Freda hacia su amiga.

Aunque las niñeras de las nenas y algunas doncellas están disponibles para esa labor, las abuelas tratan de pasar el mayor tiempo posible con sus nietas.

La abuela Situ toma asiento en el sillón de la habitación de las nenas para deleitarse mirando a sus nietas reir y brincar felices.

La abuela Situ atesorar en su mente esos últimos instantes felices con ellas.

Aunque Elise y Elisbeth no son descendientes Situ ni Baek también las estima mucho por lo que la abuela Situ ha preparado una última sorpresa para la familia Niam Mu.

Pronto ellos se enterarían.

Ryan hace que Flora beba una infusión tranquilizante para que deje de llorar pues la chica ya tiene los ojos demasiado rojos debido a tantas lágrimas derramadas.

El personal de la villa Niam-Mu se encarga de recibir a los demás integrantes de la familia quienes visten de negro en señal de respeto y luto.

Ryan se apresura a recibir y dar la bienvenida a todos, las chicas inmediatamente abrazan a Flora quien de nuevo rompe en llanto.

El desgarrador llanto contagia a las demás chicas quienes también se encuentran llorando con ella.

Ryan también de siente sumamente triste por el fallecimiento de David pues el señor siempre lo trato como un hijo y verlo partir fue demasiado triste para el chico.

La muerte de David solo hace pensar a Ryan en que el día que sus padres también fallezcan.

Y él tendrá que pasar por ese trago amargo también.

Y ese pensamiento es simplemente muy doloroso.

Dániel fue el primero en abrazar a Ryan, después Paul, Tommy, Bruce y James quien cerró el círculo.

Unas lágrimas silenciosas resbalan por la mejilla de Ryan mientras que los demás bajan la vista en señal de respeto.

Todos los chicos alguna vez hablaron con el señor David Mu.

Todos alguna vez rieron con alguna anécdota loca o chiste contado por el señor Mu.

En la boda de James el señor David fue especialmente cómico y agradable.

Todos los chicos escucharon uno o dos consejos empresariales del padre de Flora y Lorelay.

Ahora el señor Mu no esta más en el plano terrenal.

Flora se limpia las lágrimas y la nariz con el pañuelo que le proporcionó Teresse.

"Vamos Flora, porque no te cambias por ropa mas cómoda para que intentes descansar un poco?"

Sugiere Maggie intentando levantarla del sillón donde están sentadas todas.

Flora como Lorelay se levanta como robot, entumecida por completo de cuerpo, mente y corazón.

Caminando automáticamente rodeada de las chicas Flora se dirige a su habitación.

Justo en ese momento Edward sale de la habitación donde Lorelay está cambiada y termina de secarse el cabello con una secadora.

Carolina y Johana entran con ella para ofrecerle el pésame a Lorelay.

Los miembros de la familia fueron avisados después de que la familia Situ-Baek despegara en el avión privado para llegar lo antes posible al funeral de David Mu.

Debido a la lluvia torrencial la demás familia no pudo llegar antes, pero ahora ya estan ahí.

"Lorelay."

Susurran las chicas antes de abrazar a su amiga.

Lorelay suspira antes de dejar caer algunas lágrimas de sus ojos adoloridos y rojos.

"Gracias por venir chicas."

Agradece Lorelay.

"Por supuesto que vendríamos, somos familia, te queremos y queremos a Flora."

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