El Prohibido Amor de un CEO romance Capítulo 141

"Esto no puede estar pasando!"

"Máscara de Plata debería ser destituida de una vez por todas!"

"Solo es una mujer!"

"Además debemos acabar con esos maricas Black que juegan a ser mafiosos!"

Mario, uno de los capos italianos de la ciudad, vocifera.

El hombre golpea la mesa de madera contundentemente con su puño dejando sentir su inmensa enojo.

De alguna manera, el grupo de los cinco capos que están conspirando para derrocar a Máscara de Plata se enteran que un escuadrón de la muerte de grupo Black ha atacado la casa de seguridad del Topo a quien hicieron su rehén.

"Debemos hacer algo antes que ese idiota Topo hable a nuestras espaldas!"

Roman, el líder de los bares clandestinos de pelea también está de acuerdo que deben tomar acciones inmediatas contra todos los implicados.

Los hombres que están sentados en esa elegante sala de reuniones asienten.

Todos tienen frente a ellos ya sea un vaso de escocés, de whisky o de vino de las mejores y costosas cosechas.

Algunos hombres fuman sus habanos importados.

Los segundos hombres al mando están sentados a sus lado.

Los guardaespaldas los protegen mientras las meseras son un meto atractivo visual.

"Tendremos que actuar ante este imprevisto."

"El Topo se confío demasiado y jamás pensó que los Black lo atacarían teniendo en su poder a su hombre químico."

"Por cierto es una buena oportunidad para tener a ese hombre bajo nuestro poder."

"De ese modo podríamos tener el suero de la verdad y otros inventos que ese hombre fabrica."

Roman, Mario, Marcos, Dimitri y Hans votan a favor entendiendo las consecuencias de su golpe de estado en esa pacífica epoca.

La buena coexistencia entre todas las familias delictivas gracias al reinado de terror y sangre impuesto por Máscara de Bronce está a punto de caer.

"Si hacemos esto bien, nos coronaremos reyes de esta ciudad."

"Tendremos accesos a las demás ciudades y redes de la mafia y por que no, también el mundo entero."

"Esto no se detiene aquí."

"Pasemos a repasar nuestros planes, cada uno tiene una misión."

"Lo importante es matar tanto a Maurice como a Mascara de Plata."

"Aunque propongo capturarla con vida y hacerla nuestra esclava sexual."

"De esa forma podríamos humillarla más."

"Máscara de Bronce jamás debió haberle dejado el lugar que le correspondía a otro hombre."

"Ninguna mujer jamás reinará a los mafiosos!"

Ese discurso por parte del mafioso Mario arranca aplausos entre los hombres.

Una de las chicas sale de la habitación para cambiar la botella de vino vacía por otra llena.

El enorme y musculoso hombre de la puerta la deja salir.

El gigante la observa detenidamente mientras ella sale por la botella y regresa.

Sin quitarle la mirada, antes de que abra la puerta le quita la botella de las manos antes de cargarla.

De ese modo puede mirarla a los ojos pues la mujer mide poco más de un metro sesenta, mientras que ese gorila mide casi dos metros.

"Eres nueva aquí verdad, nena?"

"No te había visto antes."

"Todas las chicas de Dimitri pasan por mi cama, es una regla."

"Como veo que eres tan delgada y delicada seré muy cuidadoso contigo para no romperte en dos..."

El musculoso hombre aprieta el cuerpo blando de la pobre chica que emite un suspiro al dejar salir todo el aire que le quedaba en sus pulmones.

La chica tiene que aguantar las ganas de vomitar al sentir su contacto, su agarre asqueroso y su aliento apestoso sobre su carita pequeña.

La diminuta y casi inexistente falda de la chica se le sube hasta la cintura, revelando su firme y bien proporcionado trasero.

El hombre se apresura a poner su enorme mano abarcando completamente el trasero de la niña.

Estrujándolo para su agrado.

"Huuummmmm!"

"Eres deliciosa!"

"Ya estoy ansiando que acabe esta reunión para hacerte mía."

Con esas últimas palabras el hombre la deja en el suelo, le recompone la falda y le da una sonora nalgada antes de que termine de cruzar la puerta.

Los capos adentro ya han terminado de hablar.

Algunas chicas ya tenían los brazos de algunos hombres rodeandolas por la cinturas, por lo que ellas se iran con ellos para satisfacerlos sexualmente.

La chica que apenas llega se hizo a un lado para que todos pudieran salir.

Dimitri, su amo, le ordena que limpie la sala entera antes de que ella regrese a su jaula con las demás chicas.

La chica asiente de forma sumisa mirando el suelo.

Ella comienza a recoger la sala de colillas, vasos con algunos líquidos en ellos, servilletas usadas y demás basuras que encuentra a su paso.

El hombre que le ayuda, le da una bolsa de basura y la deja sola, pues no es su responsabilidad limpiar.

"Termina y métete a tu jaula pequeña bestia."

El hombre abre la puerta y sale seguido por el enorme hombre de la puerta que sabe que pronto tendrá a la niña en su cama.

La chica termina de recoger las cosas, saca su celular de su escondite debajo de la mesa y abre un panel escondido de la pared, el cual ella pudo ver que Mario abría previamente.

La chica entra en ese pequeño compartimento y hace la llamada que tanto quería hacer.

"Con un demonio Teresse donde carajos te metiste?"

Tommy vocifera enfurecido de nuevo.

"Por que carajos no estás en la ubicación que me enviaste?"

"Estoy parado aquí en una casa como un idiota con mis hombres y tú no estas aquí!"

"Mujer, me haz hecho enojar demasiado!"

"Si no fuera porque te amo y nos acabamos de casar te mataría con mis propias manos!"

Tommy sigue vociferando en el celular en medio de una casa de seguridad en ruinas y vacía pues no hay ningún hombre, ni su amada esposa.

Solo hay dinero, drogas, pruebas contra algunos políticos famosos e importantes, armamento y balas.

"Tommy, se que tenía que estar ahí, pero cuando te mande mi ubicación, les llegó a estos malditos una llamada de una reunión secreta de los conspiradores contra Máscara de Plata y los demás."

Responde Teresse.

"No podía quedarme esperando, por lo que les hice que me trajeran como carne nueva y..."

La chica quiere explicarle a su amado sus motivos.

"QUE?"

Tommy vocifera exasperado del otro lado de la línea.

El chico aprieta el celular en su mano porque no quiere aventarlo al suelo pues no quiere escuchar lo que su aún esposa dice.

Tommy en este momento esta considerando seriamente pedir el divorcio.

"Tommy, escúchame."

"Los capos Roman, Mario, Dimitri, Hans y Marcos estan apoyando al Topo, pero ahora Edward lo tiene capturado."

Tommy sabe eso pues Edward llevó al Topo a una de sus escondites para torturalo y sacarle información del paradero de Daniel Black.

"Van contra todos los Black, pero también contra Máscara de Plata."

"Ellos están planeando hacer varios movimientos en la ciudad para distraer y capturar viva a Máscara de plata."

"Ellos quieren hacerla su esclava sexual."

Tommy se tapa la cara con una de sus grandes manos al oír eso.

"Puedes envairme tu ubicación para dirigirme a donde estas?"

"Y esta vez, podría esperar verte en esa casa o volverás a escapar?"

Cuestiona Tommy.

Teresse por el tono de voz de Tommy sabe que él está molesto y decepcionado de ella, pero esto es guerra, por lo que todo vale.

Todo cuenta cuando se quiere ser el vencedor.

"Estaré aquí esperándote Tommy."

"Tengo que mandarte fotos de algunas locaciones que planean atacar..."

Responde Teresse.

"Tommy, tienes que perdonarme."

"Jamás hubiera hecho esto si no fuera por esta situación extraordinaria y lo sabes."

La chica trata de explicar sus acciones.

Tommy sin querer oír más termina la llamada.

Para sacar su furia destroza varios muebles de esa casa.

Los hombres del escuadrón que lo acompañan siempre han visto a Tommy tranquilo, sereno y de buen humor.

Pero ahora ellos pueden ver como la furia lo transformado en un demonio furioso que destruye cosas con sus propias manos.

"Carguen las armas en nuestros autos."

"Suban el dinero y las drogas para llevarlas al bunker."

"Rocien gasolina la propiedad y préndanle fuego desde sus cimientos!"

"Ahora!"

Tommy ordena de forma dura.

Su segundo al mando se le acerca para y darle su celular pues se lo había dado antes de comenzar con sus destrozos.

En el celular se aprecia la ubicación que le mando Teresse.

Tommy subió a un auto para ponerse en marcha.

La enorme rabia asesina que lo inunda hace desear a Tommy encontrar muchos hombres en el lugar donde se dirige para matarlos con sus manos.

Y de esa forma apaciguar un poco su furia.

"Creo que se enojo..."

Teresse susurra cuando ya no escuchó nada del otro lado de la línea.

Tommy terminó la llamada sin que ella pudiera decirle que tan grave y delicada era la situación actual.

Pero, con Lorelay enfrentando al enemigo, Lara por fin a salvo...

Carolina aún convaleciente en el hospital, Johana protegida por Dániel y Maggie con James recuperandose en el hospital, Teresse debe actuar

Todos hacen algo.

Todos ayudan de alguna manera, porque no puede comprenderla Tommy?

Volviendo a asumir su papel de muchacha servil, Teresse terminó su labor de limpieza.

Llevando la bolsa de basura al bote mas cercano, tomó la escoba para recoger la basura del suelo.

Cuando terminó y dejó las cosas en el armario de limpieza, Teresse se dió cuenta que la puerta del despacho de Dimitri esta entreabierta.

Ella entra sin hacer ruido para tomar fotos de la información que el hombre tiene sobre su escritorio.

En los documentos aparecen nombres de restaurantes de cinco estrellas, algunos bares tradicionales y

algunos cines.

Las direcciones de villas de ricos y famosos en esa ciudad, los cuales son los blancos a atacar para crear caos.

Teresse toma fotos de forma rápida y callada, hasta que escucha gemidos de mujer, seguidos de gritos y golpes fuertes que provienen de la puerta contigua.

Ella sabe que todavía no puede hacer nada por lo que se seguir retira al sótano donde esperaría a Tommy para que la rescate.

Pero, con lo que Teresse no contaba es que el gorila que la había manoseado la espera en el sótano, con una cuerda en las manos.

Teresse trata de mantenerse tranquila mientras baja sin quitarle los ojos de encima a ese idiota.

Ella trata de averiguar como derrotarlo con el menor esfuerzo y ruido.

"Ven aquí pequeña, quiero un poco de placer."

Las chicas que permanecen dentro de las jaulas se abrazan unas a otras, pues todas han tenido la misma desagradable, horrible y dolorosamente sangrienta experiencia con ese mastodonte desalmado al que los gritos, lágrimas y suplicas solo logran excitarlo más.

Teresse se puso a su lado.

Ella deja su celular en las manos de una de las chicas quien parpadeó varias veces al tener ese objeto en sus manos.

Sin dudarlo, la chica marca el número de la policía para que la rescate de ese lugar junto con las otras chicas quienes la rodearon para llamar por ayuda.

"Pero que demonios?"

"Como conseguiste eso?"

El hombre cuestiona mientras camina para tomar las llaves de la jaula y abrir la puerta para quitarles el celular a sus esclavas.

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