El Prohibido Amor de un CEO romance Capítulo 146

La puerta de la habitación se abre de par en par.

El hombre camina hacia la chica quien yace dormida sobre la cama.

Él trata de despertarla, pero ella no abre los ojos por más que la mueve.

"Perfecto."

El hombre la carga en brazos para conducirla a la planta baja, donde el auto los está esperando para que vayan lo más rápido posible al lugar del encuentro con los demás hombres que los están esperando.

De repente la chica se remueve en los brazos del hombre que la carga.

Ella trata de escapar mientras manotea, pero el alto hombre se lo impide, abrazándola con fuerza.

"Lorelay, tranquila."

Los ojos de la chica se abren mientras siente que las luces blancas le dan directamente en los ojos, cegándola momentáneamente.

"Donde estoy?"

Dániel le quita la máscara de su carita para que ella lo observe.

Él acelera el paso a la enfermería del lugar, donde ya la espera un médico y una enfermera de confianza de ella para examinarla a detalle.

"Lorelay, puedes explicarnos porque estás tan lastimada?"

Johana detrás de ellos se muestra muy preocupada, pues cuando la chica los llamó para verlos en el Coliseo, ella no dijo nada de sus heridas.

Lorelay guarda silencio ante el creciente dolor de su costado izquierdo cuando fue depositada en la cama de observación de la enfermería.

Con sumo cuidado, le quitaron la ropa, ante la cara adolorida de la chica.

De vez en cuando se muerde los labios para evitar llorar frente a sus guardianes, quienes se sienten peor al ver las heridas extendidas en todo el costado de su protegida.

"Maldición!"

Exclama Dániel saliendo de la habitación, pues no soporta ver que las quemaduras y cortes en la piel blanca de Lorelay.

"Por favor, recuestese de lado."

Pide el médico.

"Este medicamento disminuirá un poco el dolor, aunque usted podría tomar algo más fuerte."

"Sebo coser esta herida que se abrió por el reciente combate."

El médico le inyecta anestesia local que la deja insensible del lado lastimado.

El galeno comienza la limpieza de la zona afectada.

Con destreza comienza a coser la enorme herida abierta que sangra, por lo que Lorelay toma con fuerza la mano de Johana para soportar el dolor.

"Tranquila, por suerte traigo uno de tus extractos curativos más potentes conmigo."

"Tómalo ahora."

Indica Johana.

El médico termina su labor.

Con la ayuda de Johana levanta a la herida Lorelay para vendar con sumo cuidado sus heridas.

"Prefiero estas heridas de guerra que haber perecido en esa trampa que Carl me había preparado."

"No habría salido viva de ahí."

Lorelay recuerda el terrible momento cuando despertó dentro de una caja de cristal que estaba siendo sumergida en agua para darle una muerte lenta y angustiante.

"Si no hubiera sido por Tim, que me rescató justo a tiempo, la caja se habría roto ante la presión del agua, inundando el interior y ahogándome."

En efecto, cuando Carl la sacó inconsciente de esa casa donde la tuvo retenida...

Todo gracias a Tom, el maldito primo de Edward la llevó a una piscina vacía de un centro de entrenamiento en construcción donde la caja que había mandado construir ya la esperaba.

Tim se disfrazó como un trabajador de esa obra.

Con ayuda de la abuela Situ, había descubierto que Carl le pagó una cantidad considerable a uno de sus antiguos amigos para matar a la chica.

"Si tu mueres, solo me quedaran dos personas que asesinar para tener el control completo de las empresas y herencia Situ."

La voz de Carl muestra su locura total.

"Además me será más fácil asesinar a Edward, quien no soportará la imágen de su amada Emily muerta en sus brazos cuando llegue a este lugar."

"Porque ten por seguro que le llamaré para ponerlo sobre aviso de que estás muriendo en este lugar."

"Y tal vez le haga saber que tiene una ligera oportunidad de rescatarte."

Lorelay sin poder hacer nada esperaba su muerte...

Pero Tim se acercó a Carl sin que lo notara para golpearlo, dejandolo inconsciente en el suelo.

Tim detuvo el flujo el agua la cual ya había cubierto la caja de cristal por completo.

Rompiendo un costado la caja, la cual se llenó de agua, Lorelay terminó por despertar para salir deprisa de esa tumba acuatica.

Pero en el proceso de escape ella resultó herida en su costado izquierdo por los cristales, dejándole heridas abiertas.

Cuando los dos trataban de huir del lugar, uno de los hombres que despertaba, lanzó una bomba que estalló cerca de Lorelay.

Algunas flamas la alcanzaron, quemándole el costado ensangrentado.

Aún herida, Lorelay pudo seguir y actuar como Emily en su llamada, organizar todo en el Coliseo, coordinar a los hombres que convocaría y pelear...

Saliendo de sus recuerdos, Lorelay da un trago a su elixir sintiéndose mejor al instante.

Dániel entra en la habitación cuando ella ya está vendada y vestida con ropa diferente.

La abraza y le da un beso en su frente con mucha ternura.

Él sabe que ella puede aparentar se la más fuerte de todos ellos.

Sin embargo ella es tan frágil y delicada, que el instinto protector del chico aflora intensamente.

"Iremos a Golden Osmanthus donde descansarás por unos días."

"Nos encargaremos de todo, solo relájate."

Indica el chico, Lorelay concuerda.

Cuando el auto se pone en marcha hacia el departamento, Dániel se comunica con James.

Le dice donde estarán, por lo que tanto él como Maggie corren a ver a Lorelay.

La abuela despide a los chicos.

Ella observa el auto de lujo que sale de la casa oculta, donde ella está recluida.

"Necesito el informe completo de como Tim rescató a mi nieta."

"Necesito que por el momento Lía escolte a los Niam-Mu a otro lado, que lo hagan esta noche."

"Aun puede ser usados en contra de Lorelay."

Ordena la abuela.

Aunque la guerra con el Topo haya acabado, declarando la supremacía y poder justificados de Lorelay como Máscara de Plata, Carl todavía está escondido en algún lado y no han podido encontrarlo.

La abuela está en espera de que su nieto haga algún movimiento para cazarlo.

Sissy, la enfermera del Coliseo termina de limpiar la habitación, espera a que el médico se vaya y marca un número en un teléfono fijo.

"Sus heridas están muy mal, se dirigen a Golden Osmanthus, van solo los tres..."

Alguien habla por el otro lado del auricular.

"De acuerdo, te veré ahí."

Sissy cambia su vestido blanco, deja su tocado de enfermera en la mesa, toma sus llaves y sale del Coliseo ante la mirada de algunos hombres de Máscara de Bronce que custodian armados fuertemente el lugar.

Enciende su auto compacto y maneja hasta ese lugar donde espera a que llegue la persona con la que habló hace apenas unos minutos atrás.

James y Dániel discuten fuertemente en el departamento mientras que Maggie junto con Johana acomodan a Lorelay en su cama para que descanse.

Pero son tantos los gritos y las cosas rompiéndose que las chicas salen para tratar de calmarlos.

"Se supone que tú eres el guardián de mi prima y la dejaste que peleara en su estado!"

" Mira ahora el resultado!"

"Ella esta muy lastimada!"

"Donde estabas cuando más te necesitaba?"

Recrimina fuertemente James a Dániel.

"Estabas escondido en este lugar con tu amada, mientras ella fue secuestrada por ese psicópata?"

"Mientras ella sufría por lo que le hizo ese bastardo tu estabas seguro y feliz con Johana!"

"No sirves para proteger a nadie!"

James grita sus fuertes reclamos a Dániel.

Cuando James llegó a Golden Osmanthus pudo ver el semblante de su prima.

Demasiado pálido y adolorido!

Justo cuando James llegó con Maggie puedo ver que Dániel intentaba cargar a Lorelay.

Por lo que se le adelantó.

James mismo la sacó del auto, percibiendo el intenso dolor que ella sentía.

Ese dolor solo hizo que James se maldijera por haber sido tan descuidado cuando la amenaza de bomba había llegado a la empresa de diseño.

Él apresuró a los empleados, que incrédulos no le creyeron, pero salieron.

James corrió a su escritorio por contratos firmados importantes que tenía guardados cuando la bomba estalló.

"Al menos puedo cuidarla mejor que tú!"

"Fuiste negligente con la amenaza de bomba y ahora estás lastimado como para poder protegerla siquiera!"

Ataca con igual ferocidad en su voz Dániel.

"Tú no eres nadie para reclamarme!"

"Solo le respondo a ella, quien es mi protegida!"

"Y si estaba en casa era porque no sabía que había sido secuestrada!"

"Se suponía que estaba con ese idiota de Situ comiendo en un restaurante cuando un don nadie se la llevó a punta de pistola!"

Vocifera furioso Dániel hacía el furioso James.

"Mo supe nada de ella, hasta que la abuela nos mandó a rescatar al químico para llevarlo a su Coliseo!"

"Johana fue por el Topo con hombres de la abuela."

"Tú tampoco ayudaste en nada para que ahora me reclames!"

Los ánimos y los reclamos suben de tono.

Los dos hombres se enfrentan debido a las heridas de la chica, su protegida y prima respectivamente.

A la cual adoran como si fuera una hermanita pequeña a la que no debe pasarle nada malo.

"Suficiente!"

Gritaron a coro Maggie y Johana, quienes alejan a los hombres tomándolos de la mano.

Desde la habitación todos escucharon por unos segundos el sollozo de Lorelay.

Todos corrieron a verla.

En ese momento, todas las fuerzas de la chica parecían haberse drenado.

La presión por terminar esa guerra que ella no había empezado consumió sus fuerzas.

Las chicas la abrazan cuando observan que ella trata de levantarse.

Los hombres miran hacía otro lado pues no soportan verla tan lastimada.

"No peleen..."

"Debemos estar unidos."

"No es culpa de nadie lo que me pasó."

Susurra Lorelay.

"Prefiero esta herida que duele y me me indica que estoy viva de milagro."

"No discutan más por favor Dániel y James."

La chica hace sentir mal a los chicos quienes baja la cabeza sintiendose mierda por haberle fallado.

"Ustedes son mi familia, no quise exponerlos."

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