Enséñame el placer romance Capítulo 23

Narra Amelia.

Estaba preparandome un emparedado. Cuando mi telefono vibró. Era un número  que no conocía.

—Hola—dije.

—Señorita García, habla Carolina la secretaria del señor White—me extraño su llamada.

—¿Pasa algo ?—pregunte.

—Su padre y mi jefe ellos...—dijo haciendo una pausa, su voz era nerviosa.

—Dime que paso por favor —le pedí con un poco de desesperación.

—Su padre  vino  borracho a buscar a mi jefe y discutieron.

—¿Discutieron? ¿ Sobre que?—quise saber.

—Fue por usted señorita. Que pena, pero creo que no es necesario decirle sobre que se trató la discusión —agregó en un tono suave, claramente estaba incomoda con la conversación. Fue ahí que me dí cuenta nuestro romance había sido descubierto, pero ¿como?. Sentí mis piernas débiles y mi garganta seca—.El señor García  golpeo con el arma que traía detrás de la cabeza de mi jefe—comentó.

No podía creer lo que me estaba  diciendo ¿mi padre borracho y armado? Jamás lo hubiese creído. Mis nervios comenzaron apoderarse de mi, sentía que mis manos sudaban y estaba temblando.

—¿Como esta mi padre y Daniel?—pregunte.

Carolina me informó que Daniel fue llevado al hospital y mi padre estaba en la estación de policías con cargos de agresión. Busque las llaves de mi auto y luego salí de la casa. Ingresé al vehículo y arranque el motor. Estuve nerviosa durante todo el viaje. Aceleré a través de los semáforos, evite las señales de alto y ni siquiera me moleste en usar la intermitente.

Realmente no podía entender lo que había sucedido. Papá había agredido a Daniel por mi culpa. Agarré la correa de mi cinturón de seguridad, rezando que estuviera bien.

Llegue a la estación policial. Corrí hacia el escritorio y le pregunte a un oficial  la ubicación de mi papá. Mientras hablaba, miré a mi alrededor para ver si podía encontrarlo. Me tomó un minuto, la oficina era bastante grande, pero más allá de algunos escritorios y ventanas que separaban la habitación lo vi. pero él no volteo. El vidrio parecía ser especial como en las peliculas, por fuera lo podía ver, pero de adentro hacia afuera no se veia nada.

Comentarios

Los comentarios de los lectores sobre la novela: Enséñame el placer