Es complicado (Temática Bl) romance Capítulo 35

{...Narra Liam...}

{10 noviembre 07:30 PM}

Ya ha pasado un mes desde que las cosas entre William y yo cambiaron, somos prácticamente novios aunque aún no lo decimos directamente, por desgracia no hemos tenido el tiempo suficiente para vernos sin tener trabajo de por medio, si nos vemos es en la oficina y no tenemos tiempo para distracciones ahora que las cosas se volvieron complicadas.

La buena noticia es que las horas de trabajo disminuyeron a seis horas, William decidió cambiar las horas de trabajo como excusa para verme, sólo que aun así no hemos podido tener la oportunidad de hablar sobre nosotros como ambos queremos, no es algo que deberíamos tomar a la ligera, de todas formas, si hablamos sobre ello en el trabajo le quita la magia, no quiero decirle en medio de una reunió un– William, ¿seamos novios? O ¿Quieres ser mi novio? –considero que perdería toda la magia, a mí por lo menos no me gustaría que me lo pidiera en la oficina, ni en un sitio formal donde nos encontremos trabajando.

He pasado bastantes noches pensando en ello, quiero invitarlo a una cena, o en algún lugar romántico en donde podamos hablar sobre nuestra nueva relación, como dije antes, somos prácticamente novios, nos saludamos con un beso en los labios y de igual manera nos despedimos, también nos decimos "Te quiero" o nos regalamos algún detalle tierno que lo demuestra, siempre he dicho que no es necesario que me digan "Te amo" si me lo demuestran cada día.

Yo lo demuestro de forma clara, William ya lo sabe, aun cuando aprovechamos aquellos minutos que tenemos disponible para apagar el fuego que tenemos por dentro, amo el sexo, no soy de los que se cortan para decirlo, más bien si quiero tener sexo se lo digo para que William se dé cuenta de mis deseos que puede ayudarme a satisfacer, pero claro, lo intenta, o más bien lo intentamos en la oficina y siempre nos interrumpen cuando estamos en el mejor momento.

Un ejemplo claro fue en la semana pasada cuando luego de un par de besos nuestros cuerpos se fueron buscando de forma mutua, terminé arrodillado a sus pies chupando su erección mientras él me observaba con deseo, aunque recibió una llamada y con dificultad respondió excitado ante la idea de ser descubierto, pero hubo ciertos problemas que nos impidieron seguir con lo nuestro.

¡Quiero hacerlo! De verdad quiero tener sexo con William otra vez, pero ahora sin alcohol ni drogas, quiero recordar cada caricia y acción que compartamos en su cama o en la mía, pero el tiempo nos juega en contra y no podemos hacer lo que deseamos.

Miré a William desde mi asiento en aquella sala de reuniones escuchando de fondo lo que decía aquel hombre que supuestamente buscaba la solución para nuestro problema, no me estaba informando de nada, mis ojos estaban puestos en William, en aquellas atractivas facciones de un apuesto empresario, sin darme cuenta mi labio estaba siendo aprisionado con mis dientes y mis ojos estaban demostrando exactamente lo que quería, a él, lo quería a él, mi mente estaba creando ciertas fantasías que obligaban a mi cuerpo a sentarse recto y cruzar las piernas, William me miró por lo que bajé la mirada tratando de no fantasear con su cuerpo, ahora no era el momento.

–Bien, entonces viajáremos cuanto antes para hablar con dicho hombre, no podemos seguir perdiendo dinero– habló uno de los empresarios.

–¿Viajar? –me pregunté a mi mismo tratando de enterarme de algo.

–Muy bien señores, acabaremos esta reunión con esto, muchas gracias por venir y nos veremos pronto para hacer factible la solución –habló William.

–Buenas noches– fueron diciendo todos los socios que habían sido partícipes de la reunión.

William me miró tras estar a solas en la sala de reuniones, me levanté de mi asiento viendo como sonreía conforme con lo que habían hablado, nuestro día cerraba con esta última reunión por lo que podríamos irnos, caminé hacia mi oficina en busca de mis cosas viendo como él hacia una última llamada en su oficina, no sé de qué estaba hablando, pero hubo un momento en el cual se apoyó en su escrito y me miró con cierta malicia, antes de caminar hacia la ventana para mirar la ciudad por la noche.

Miré mi móvil un instante viendo fotografías de departamentos que Jeff me enviaba, creo que esto de mudarse era contagioso, primero comenzó Jace con esta idea, ya lo hizo, su casa mola mucho y me encanta, pero ahora es el turno de Jeff, me contó lo que quería para estar con Taylor, mi querido mejor amigo no podría estar más enamorado de ese chico y sin duda me alegraba que fuese así.

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