Es complicado (Temática Bl) romance Capítulo 79

{...Narra Liam...}

{...Un año después...}

Ya ha pasado un año, todo se siente diferente a pesar de que la vida continuó después de la partida de 4 de mis amigos, a veces los extraño, siento que nos falta algo cuando nos reunimos Jeff y yo, ya sea en su casa o en la mía, supongo que nos falta más escándalo a la hora de juntarnos, después de todo, cada vez que estábamos juntos todo era más energético, siempre había risas y jugueteos entre nosotros, sin embargo, ahora sólo estamos Jeff y yo.

Claro que también esta Taylor y William, sólo que en algunas oportunidades ellos no entienden nuestras tonterías, por lo que les quita toda la gracia a nuestras acciones, además cuando Jeff y yo estamos junto es imposible no sentirme un niño, ya que siempre estamos bobeando y riendo por tonterías que a William y a Taylor no le hacen gracia como a nosotros.

Por otro lado, la pequeña Emilia casi está por cumplir los 2 años y es adorable la forma en la que a todos nos dice papi, a veces no sabemos a quién quiere, ya que dice "Papi" con tal de que alguien la cargue, aunque cuando le mostramos una fotografía de sus padres, ella dice "Papá" y "Mamá" mientras intenta tomar la fotografía para darle besitos, es tan linda, además todos la adoramos. William es quién casi siempre la mima demasiado, incluso cuando Jeff, Taylor o yo, la regañamos por gatear o tomar cosas peligrosas, William la salva mientras Emilia ríe casi diciéndonos "Ya no me pueden hacer nada" Es tan adorable, me encantaría comérmela a besos y escuchar su maravillosa risa todos los días.

Hoy quería verla, es sábado, pero William me invitó a una cita así que tendría que verla mañana, me sentía un poco triste por la idea, sin embargo, estar con William me encanta, por ello rápidamente aquel sentimiento de tristeza desapareció cuando él me miraba con una dulce sonrisa que me encantaba destruir con mis labios, después de todo, no dejaba de darle pequeños besos cuando él hacía o me decía cosas lindas.

William ha estado muy extraño, normalmente no es tan cariñoso y la mayor parte del tiempo me hace enfadar, pero hoy estaba de buen humor ¿Será por el sexo? Bueno, lo hacemos bastante seguido, sólo que no creo que sea solamente por el sexo ¿O sí? Aunque yo me comporto de forma similar cuándo el sexo es bueno, a pesar de que mi cuerpo se siente cansado en algunas ocasiones.

En fin, la cita comenzó en la mañana, fuimos al acuario, me la pasé genial, me sentía un niño y deseaba explorar todo el lugar, por ello pasamos alrededor de cinco horas en el acuario, prácticamente William me obligó a salir de allí debido a que ya era momento de almorzar, aunque aún nos faltó un poco por explorar, el lugar era inmenso y todo era tan bonito ¡Saqué muchas fotografías!

A la hora de almorzar todo estaba delicioso, William inclusive me compró dos postres, bueno, en realidad, era uno suyo y otro mío, pero como soy muy insistente él terminó dándome la mitad del suyo. En mi defensa, él suyo era diferente al mío y quería probarlo, aunque mientras me lo comía mencioné que me gustaría ir a un zoológico, por ello como él estaba cariñoso me llevó.

Me sentía muy amado, William hacía todo lo que yo deseaba, por lo que intenté jugar con su paciencia durante todo lo que quedaba de cita, aunque acabamos en la playa justo en el momento del atardecer en donde yo me sentía embobado, pero vi a un niño comiendo un helado, así que mi lado infantil apareció y se lo pedí a William.

–Mi amor, quiero un helado– dije viendo al niño quién parecía muy feliz con su helado.

–Pero...– soltó William tras sólo llevar un par de segundos sentados.

–Porfis– insistí haciéndole caritas para convencerlo, algo que logré bastante bien.

Me estaba divirtiendo mucho, William se levantó del suelo y fue hasta el lugar en donde vendían los helados con tal de comprarme uno, sé que me traerá mi helado favorito, pero ¿Y si le digo que ya no quiero? *Risitas* ¿Se enojará? Tengo muchas ganas de enfadarlo, cuando me da mucho amor siento que debo molestarlo con tal de que ame mi personalidad más irritante.

Cuando William regresó se sentó nuevamente a mi lado, aún estaba la puesta de sol, pero yo quería molestarlo un poco más así qué sonreí de forma juguetona viendo como él miraba el atardecer, a decir verdad, era muy bonito, en ese momento lo único que oíamos era el romper de las olas y las vistas eran preciosas, aunque cuando recibí mi helado con una cereza encima, simplemente lo miré a él.

–Amor, no quería este– dije viendo como William despegaba su vista del atardecer con tal de verme a mí.

–¿Por qué no? Es tu favorito– me preguntó aun teniéndome paciencia.

–Sí, pero hoy no quería este– dije viendo como en sus labios se curvaba una sonrisa.