Esposa falsa de Simón romance Capítulo 87

-¡Bang!- (El sonido de la puerta cerrándose)

Al cerrar la puerta, solo quedaba el sonido de respiración de las dos personas que estaban en una grande sala de reuniones.

Especialmente se oyó el sonido de la respiración de Frida, que estaba asustada en este momento. Por eso todavía no podía volver a respirar tranquilamente.

No se movieron las dos personas. Y Simón Frexia le dijo a Frida, -¿Cuánto tiempos quieres sentarte allí?-

Frida lo se dio cuenta de pronto y se levantó la cabeza.

Al mismo tiempo Simón bajó la cabeza también.

Todo el cuerpo de Frida estaba cubierto por la chaqueta ancha suya. Cuando ella se levantó la cabeza, solo se vio su carita y los ojos rojizos. Parecía un poco pobre.

El corazón de Simón sentía el dolor que parecía como alguien lo estaba apretando con las manos. Después del silencio, preguntó a Frida, -¿me ves bien?

Frida todavía estaba asustada por las personas y no recordó que se había enfadado antes. Todavía tenía miedo de entrar alguien.

Simón parecía que conocía su pensamiento interior y dijo, -Rafael está afuera guardando. ¿Si todavía no quieres ponerte la ropa, entonces continuaremos?

Frida, -…-

Después del silencio de 2 segundos, se levantó desde el cuerpo de Simón y tapó la chaqueta con la mano para que no sea desnuda. Así se movió muy lento.

Las manos pequeñas presionaron su cuerpo un par de veces. Al final ella se levantó y estaba de pie.

Frida se dio la vuelta y corrió a la puerta con los pies sin zapatos.

La chaqueta de Simón se quedaba muy grande en su cuerpo como ella robó la chaqueta de su padre y la llevaba. Cuando ella se inclinó para recoger la ropa, la chaqueta que llevaba se cayó un poco, no se vio muy bien.

Simón cerró un poco los ojos y frunció el ceño con la mano.

¡Mierda! ¿Qué le pasó?

Frida cogió la ropa, y vio un vestido de naranja clara con flores pequeñas encima. Era muy bonita y especial.

Pero no había nada lugar para cubrirse en la sala. ¿Dónde iba a cambiarse la ropa?

Se quedó allí cuando pensó en eso.

La voz de Simón con disgusto vino de atrás.

-Si sigues tan lenta, no me importa abrir la puerta para invitar a otros a verte.

Frida agarró la ropa y mordió el labio.

Qué hombre malo.

Sin importarle nada más y se alejó de Simón, dándole la espalda en un rincón para cambiarse rápidamente de vestido.

Después del cambio, acercó hacia a Simón con la chaqueta en las manos.

-Aquí tienes.-

-¿Crees que todavía voy a mantener esta chaqueta después de lo que llevaste?-

Después de escuchar eso, Frida agarró la chaqueta, mordió el labio y dijo, -No estoy sucia.-

-¿Quieres decir que estás limpia?- Simón se importaba mucho la relación entre ella y Óliver, y ahora ella estaba llevando la ropa que comprado por él.

En real ella se quedaba muy bonita con ese vestido nuevo. El color entre rojo y naranja hizo que su piel se vio maravillosa. El estilo del vestido también hizo que su cintura se viniera más hermosa.

Simón casi no podía controlarse y se quejó a sí mismo. Luego rodó la silla de ruedas hacia la puerta y dijo, -¡Qué mujer indecorosa!

La cara de Frida se puso roja y echó una mirada a su espalda.

-¡No soy indecorosa!

Él no le respondió nada.

Ella le preguntó otra vez, -¿De verdad no quieres tu chaqueta?

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