Esposa Mia romance Capítulo 42

Arthur.

Al ver a mi esposa toda desangrada y a mi hijo en manos de ese loco, pensé que sería el fin, pero luego quite esa idea de mi cabeza y decidí negociar con el desgraciado para que me entregara a mi hijo. Todo sucedió tan rápidamente que hasta era creíble.

No le deseo la muerte a nadie pero supongo que se lo merecía por desgraciado, manipulador y asesino. Después de todo lo que sucedió nos trasladamos rápidamente al hospital más cercano de vieja león.

Cariza se encontraba débil, su herida se abrió provocando una fuerte infección y mucha pérdida de sangre por suerte la pequeña Jadara tenía el mismo tipo de sangre y le dono a su hermana mayor.

Ahora me encuentro en el cuarto de recuperación sentado cerca de la camilla en donde está mi pequeña, Martha tiene a nuestro bebe en sus brazos caminando de lado a lado, tarareando una música de cuna, sonrió al ver felicidad en su rostro.

Mi esposa sigue durmiendo por dos días enteros, tuve mucho miedo al verla mal. El médico le suturo la herida y me notifico que mi esposa jamás quedaría embarazada eso fue una noticia muy dura para mí, me sentía mal, solo espero que ella pueda superarlo.

-Iré a tomar un café, él bebé se durmió está en la cunita ¿Quieres algo?-. Me pregunta mi suegra. Niego y le doy las gracias, se acerca a Cariza deposita un beso y sale del cuarto. Jaime me contó que Cariza lo llamo papá ¿Cómo se habrá enterado? Bueno lo importante de esto es que ella lo aceptara, lo sé.

-Tu mama te ama un montón y sé que tu igual, no sé cómo te enteraste que son tus padres pero me alegra saber que ya lo sabes-. Susurro cerca de su oreja, recuesto mi cabeza, cierro los ojos y me pierdo por el sueño.

Unas frágiles manos acarician mi rostro, me levanto de golpe al saber que se trata de mi esposa.

-Hola-. Balbucea mi esposa con la voz ronca.

-Hola mi amor, ya todo termino-. Le digo, ella mira para todos lados ya que me imagino que desea ver a nuestro bebé.

Me levanto de la silla y me acerco al cunero, saco a mi bebé y luego lo deposito en sus brazos ella lo mira con las lágrimas brotando de sus ojos.

-Pobrecito, todo lo que tuvo que pasar por culpa de ese loco-. Susurra besando la cabecita de Axel.

-Lo bueno es que él está bien, gracias a Dios.

Tocan la puerta, les digo que pasen, él médico que atendió a mi esposa entra con el expediente de ella.

-Buen día señores ¿Cómo amanece señorita?-. Le pregunta a mi esposa.

-Un poco adolorida pero bien al saber que mi niño está sano.

Él medico empieza a dar instrucciones sobre el tratamiento que debe llevar Cariza, pongo mucha atención, le informa que por el momento no amamante al bebe ya que contrajo una infección muy fuerte.

-¿Podre más adelante?- Inquiere preocupada.

-Si podrá señorita descuide y procure cuidarse, bueno lo siguientes es que lamentablemente usted nunca más podrá quedar embarazada por la fuerte infección y coagulación que se le formo en su vientre, lo lamento mucho.

Me acercó a mi pequeña, acaricio su espalda mientras solloza, hunde su rostro en mi pecho, beso su frente, él médico me hace señas de que saldrá y luego vendrá para dar las otras instrucciones.

-Ya no podre darte más hijos, lo lamento pero tenía que salvar a mi hijo por eso me tire del balcón de esa casa-. Llora.

-No importa mi amor, olvida eso, ya verás que Axel nos dará muchos nietos-. Le digo tratando de animarla, ríe bajito y asiente.

Pobre todo lo que tuvo que pasar para salvar a nuestro pequeño, hasta me duele el alma, no sé qué haría si los hubiese perdido.

Los días pasan volando, mi mujer y mi hijo están en casa ya por fin, me siento feliz y completo. Jaime, Martha incluyendo Jadara organizaron una fiesta de sorpresa, mi pequeña acepto a su nueva familia sin restricciones está más que alegre con su hermana menor.

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