Jefe Atrevido: Amor Retardado romance Capítulo 27

No sabía qué tipo de afrodisíaco era. Su efecto era fuerte.

Vanesa apretó los dientes en el proceso.

—Santiago, ¡para! El efecto debería haber ido casi. ¿No?

En este momento, Santiago debería haber recuperado algo de cordura. Incluso soltó una risa pero no se detuvo sino besó la oreja de Vanesa,

—No, ¿ te gusta así? —dijo con voz seductora.

El efecto realmente fuerte, tanto psicológico como físicamente. Pues Santiago nunca había dicho algo tan atrevido.

Vanesa cerró los ojos y le respondió con tono frívolo..

—Claro que sí, me gusta.

Santiago se quedó asombrado por un momento.Vanesa sabía que era su voz ligeramente frívola lo que lo había estimulado.

Pero ¿por qué estaba enojado?

¿Qué derecho tenía de estar enojado?

Después de un rato, Vanesa escuchó que alguien se acercaba y giraba el pomo de la puerta. Luego sonó la voz de Adam.

—Vanesita, ¿por qué has cerrado la puerta con llave? Sal rápido, que no encuentro a tu ex-marido.

Vanesa frunció la boca y palmeó a Santiago en el hombro. Se detuvo.

Vanesa se calmó un rato antes de hablar,

—Está conmigo —Trató de hacer que su voz sonara calmada.

Adam permaneció en silencio por un largo momento.Vanesa cerró los ojos, preguntándose si le debería decir algo para explicarlo. Pero cuando quería decir algo, de repente se escuchó a Adam decir,

—Ay, perdona, seguid. Me voy primero.

La vergüenza en su voz hizo que Vanesa directamente se cubriera la cara.

Santiago esperó un rato hasta que la persona de afuera se fue.

—Oye, ¿no crees que es un poco vergonzoso? —Vanesa jadeó.

Santiago ladeó la boca y besó los labios de Vanesa.

—No, quiero más.

Comentarios

Los comentarios de los lectores sobre la novela: Jefe Atrevido: Amor Retardado