La Nueva Esposa de mi Marido (COMPLETA) romance Capítulo 10

Jacob sólo había mirado a Sasha y su celular, no dijo nada sobre lo que hizo Sasha, y esta estaba nerviosa, ya que quizá sería regañada después de que comieran. Pero no fue así, Jacob sólo hizo una llamada y dejó sola a Sasha en el comedor. Sasha ayudó a la señora de servicio, su nombre era Naomi, y le dijo que su marido era el mayordomo de la casa de mis padres, por eso ella fue contratada para la casa.

Sasha sin nada que hacer volvió a la habitación de Jacob, y se llevó su bastidor y trabajó un rato en su bordado. Al atardecer, salió al jardín. Al ver que le faltaba algo de flores, quería ir a comprarlas, pero al recordar que no era su casa, se desanimó.

A la hora de la cena, Jacob no salió del estudio, por lo que Sasha cenó sola, sintiendo mi ausencia y recordando esos días que estuvimos juntas, algunas lágrimas se le salieron pero las secaba rápido. Al terminar, hizo un sándwich, tocó la puerta del estudio y no esperó a que le diera “pase” Jacob, ella entró y le dejó el sándwich junto a la laptop y tomó el vaso con whisky.

—¿Qué haces?

—Debe de cenar antes de seguir bebiendo, o se enfermera por voluntad propia, y no quiere eso ¿verdad?

Jacob frunció el ceño al escuchar a Sasha, así que se recargó en la silla, tomó el sándwich en su mano y lo empezó a comer. Sasha pensó que seguía enojado por el celular, así que no dijo nada hasta que el términó el sándwich.

—Señor, si piensa beber hasta desmayarse, podría irse a la habitación, o tendré que pedirle a los guardias que lo suban, hoy no está Joel ni Orlando para ayudarme a subirlo.

—Vete a descansar, mañana regreso a la empresa, así que no beberé igual.

Sasha se mordió los labios, no quería que bebiera Jacob, pero tampoco quería hacerlo enojar, así que decidió que lo mejor era ir a dormir.

—Está bien, buenas noches, señor Jacob, hasta mañana.

—Hasta mañana, Sasha.

Sasha salió del estudio directo a su habitación, ya dentro se resistió y se dio un baño, al secar su cabello, se sentía un poco deprimida, pues pensaba en que quizá Jacob de nuevo bebiera y durmiera en el estudio.

—Sam, no sé cómo ayudar a Jacob.... ni siquiera sé cómo lidiar yo con tu partida y la de mi padre —los ojos se le llenaron de lágrimas y empezó a llorar aunque lo hacía en silencio—. Sam te extraño y también debiste dejar más instrucciones.

Dejó de secarse el cabello y sacó su caja, miró el celular y dio un suspiro:

—También extraño a José... quisiera saber cómo está, y decirle que estoy bien, también para pedirle consejo —se fue a la cama y puso alarma a las tres de la madrugada, pasaron treinta minutos cuando se quedó dormida.

Jacob terminó el trabajo y subió a la segunda planta, y abrió la puerta de la habitación de Sasha, se acercó y miró que sus párpados estaban hinchados aún.

«También lloras por su ausencia... creo que cuando sepas la verdad, te dolerá más...»

Pensó Jacob y enseguida cerró la puerta, fue a su habitación, se duchó y salió en boxer, se acostó en la cama intentando dormir, cinco minutos después se puso de pie y se fue al sillón con la botella de whisky, se tomó media botella cuando se quedó dormido en el sillón.

A las tres en punto sólo la alarma de Sasha, se levantó casi dormida y la apagó, fue a la habitación de Jacob, dio un suspiro al ver la cama desecha y él no estaba, pero cuando iba por la cobija, se dio cuenta que estaba en el sillón, se asustó ya que pensaba que estaba despierto, ya que sólo llevaba boxer, pero al no escuchar nada, tomó la cobija y tapó a Jacob y le quitó la botella de la mano que estaba por caer al piso.

—No deberías de beber tanto —dijo y se dirigió al baño donde tiró el whisky en el lavabo y sacó una toalla de mano, la enrolló y se la puso en el cuello a Jacob para que no se torciera el cuello, Sasha sintió como si cuidara a un bebé, salió de la habitación y fue a la suya.

Jacob despertó por el sonido de su teléfono y junto con un dolor de cabeza no igual al del día anterior, se dio cuanta que estaba tapado y la toalla en el cuello.

«Esa niña ¿a qué hora vendría?»

Fue a buscar su traje de este día, llenándose con el aroma de mi ropa, se le llenaron los ojos de lágrimas pero se negó a dejarlas salir, se fue al baño para bañarse y alistarse.

Sasha se despertó antes que Jacob, sólo que ella bajó a la cocina directamente y le pidió a Naomi que preparara chilaquiles picosos y hot cakes para ella. Subió a su habitación, lavó su rostro y se cambió rápido de ropa, ya que sabía que Jacob salía temprano a trabajar, salió corriendo a la cocina, ayudó un poco al preparar el jugo de naranja natural y picó un poco de fruta. Cuando escuchó apenas pasos, salió corriendo hacia la sala, y vio que Jacob pretendía irse sin desayunar.

—No debería irse sin desayunar, de seguro bebiera en la oficina, es malo para la salud.

—¿No deberías de estar dormida? —aunque le agradecía que lo tapara, no se lo diría.

—Me levanté temprano, porque sospeché que no desayunaría, la señora Naomi le preparó chilaquiles, eso le ayudará con las náuseas.

—No tengo náuseas.

—Pero las tendrá si no come.

Comentarios

Los comentarios de los lectores sobre la novela: La Nueva Esposa de mi Marido (COMPLETA)