La secretaria Indomable romance Capítulo 103

Me cambié de ropa. E inicie, todo como antes, como la princesa Ana. Mi vestido, de tela fina, y borda, todo como estaba ese día, no olvide ni un detalle, de como éramos en aquellas épocas. Como estaba vestida. Hice que la cambiaran también. Al salir, todo se quedaron mirándome, no comprendían que hacía, pero tampoco preguntaron, eso me ayudo mucho. Porque no sabría qué responder. 

Jack Bill.

Estaba sentado en la esquina con mis hombres, charlábamos, cuando ella salió y dos mujeres le sostenían la mano, en enfundada en un vestido blanco, y una larga capa, en su espalda, una reina. O una princesa, no sabía que es lo que ella quería hacer, pero no quería tampoco preguntarle, estaba completamente diferente. Ella caminaba en la alfombra llena de flores, voltee y vi a mi padre, bajar de un coche. Estaba bien vestido. Su mirada se enfocó en ella.Había una sonrisa en su cara.

So lo yo, no sabía lo que estaba pasando.Pero juro, al verla en este vestido, estaba hermosa, resplandecía como una niña de quince años, era una mujer hermosa. Su pequeña panza no se notaba, pero, es como que la vi con una grande, estaba muy bella. 

Mi padre se paró a mi lado, y me sonrió.

_ ¡Gracias hijo!

_ ¿Por qué jefe?.

_ ¡Por venir, con ella, estar presente, cuando dejara atrás todo su pasado!

_ ¿Qué quieres decir?.

_¡Ella, es la chica en tus muros, siempre la narras en tus historias, la ves y no puedes reconocerla!

Si no fuera un hombre fuerte, me desmayaría al instante, joder, que está pasando, la princesa Ana hablada en el rollo chino, que compre en una subasta, es ella. Ella es la deidad, bendecida, por su sabiduría y coraje, que me lleve quien me trajo, esto me está dejando fuera de todo. 

_ ¿jefe, no entiendo, como puede ser ella, la princesa Ana de mi mural, en THE KING?

_ ¡Pues así es, hijo mío! Recuerdas, como estaba vestida, la chica en tu mural, y que tenía puesto, como fue la historia que pagaste al mejor pinto de pintar en tu palacio THE KING.Mira por ti mismo. Y solo imagina como está tu palacio.

Al decir, verdad si, así estaba vestida, con un vestido blanco, de seda, semi trasparente, fina como la nube. Una capa larga, que el viento hacia su majestuosidad al moverla por los lados. 

_ ¿jefe, como te diste cuenta de eso? 

_ ¡Porque también, has cosas, que te llegan en la mente, sabes que también estuviste allí! Y que las cosas pasaron sin tu entender, el porqué, o tal vez, cuáles es el significado de tu propia vida. ¿Qué había pasada antes?, ¿si debes ahora a alguien, si es un sí o un no? Muchas veces soñamos con algo, y justo al día pasa igualmente, y has muchos sueños que hacemos y lo olvidamos porque estamos hipnotizados con los trabajos del día, que olvidamos su significado, sucede y es cuando nos damos cuenta de que tuvimos un sueño igual.

_ ¡¿Qué tratas de decirme?!

_ ¡Cada ser humano, tiene una historia, sea para un bien, o para un mal! Viviste ante, en donde, cuando nadie lo sabe, pero la vida por sí misma es un misterio, ser un plebeyo, una princesa, una reina. Todo seguirá fluyendo como tal. Lo que tuviste entes, como estuviste en tus vidas pasadas, te seguirán donde estés, lo actual, tu futuro. Es la razón, que las buenas acciones, se duplican, sea en esta vida. O en la otra. Pero todo hemos vivido antes.

_ ¿Quieres decir que yo estuve en su historia? 

_ ¡No te diría, si es un sí o un no, talvez recuerdes, al verla si es un sí, o un no.lo sabras tú! ¿Te has preguntado, porque se nos permite vivir, solo una cuantas horas en otro mundo?.cuando duermes, donde viaja tu alma? ¿Dónde estás viviendo?, no solo es una recopilación de lo que te paso en día, es donde vas cuando duermes que al otro día, es tan difícil recordar lo que viviste, hasta tal punto que tu cerebro borra todo lo que paso.  Hay mucho misterio, y no hay quien te diga como pasaran las cosas.

Escuchaba a mi padre hablar, y mi mente viajaba, no sé donde, pero estaba en un lugar, y justo vi esa mujer, la princesa Ana. Siempre fui quien soy arrogante, presumido, y con poder. Pues con razón no he cambiado. La miraba, ella caminaba y se arrodilló frente a la piedra. Princy tal vez entendió, lo que estaba pasando se puso a gritar.

_ ¡No, no puedes deshacerte de mí! No te permitiré, borrar todo lo pasado.

No entendía, que quería decir, pero ella sabía lo que pasaba y el porqué.