Más que un trato romance Capítulo 36

•William•

Hoy fue un día muy largo pese a que Uno diosa se la pasa de mal genio conmigo escucharla y verla hacen que mi día pase rápido, Jonathan está extraño y no hemos podido hablar por tantas reuniones y la más pesada de todas fue con las modelos las cuales se me pegaban como moscas a la miel, siempre me ha molestado eso pero lo soportaba ya que siempre me metía en la cama con algunas de ellas, después las dejaba así como las conocí, pero hoy no tenía humor de soportarlas así que cada que se ponían cariñosas les decía que ya estaba comprometido cosa que es verdad, firmamos contrato con aquellas que no se me pegaron como moscas y unas que Jonathan escogió, fuimos a mi apartamento a beber algo y quitarnos todo el estrés de tanta gente, las luces estaban apagadas hacia mucho que no era así pero hoy Isa se quedaría en el hospital con su tía, vamos al mini bar y nos servimos un wiski.

- ¿Ahora sí me vas a decir que te pasa? -atacó a mi mejor amigo.

- Creo que metí la pata y hasta el fondo o no se -dice pensativo y eso sólo era provocado por mi prometida.

- ¿La seduciste?

Me mira incrédulo por mi pregunta- claro que no, nunca lo haría.

- ¿Entonces?

- Esta tarde me pregunto si la quería como amiga... -bebe un trago- le dije que sí o quizá como una hermana y Dios casi se pone a llorar o quizá no lo hizo porque la veía pero sus ojos estaban llenos de lágrimas.

Doy un suspiro y bebo un trago- eso pasaría alguna día.

- Creo que sabe, que se lo que siente por mi.

- Yo se lo dije hace mucho pero no me creyó -subo mis hombros y el tuerce los ojos como huevos fritos.

- Ya lo sé,  pero como dices no te creyó.

- Quizá se lo dijo su tía yo se lo dije a ella también creo que ayer.

- Eres un cabron por qué no me dijiste.

- Perdón se me pasó decírtelo con todo el drama que me hizo Isa, pero su tía ya lo sabía quizá se lo dijo está mañana.

- Entonces, lo sabe su tía y su hermano Jorge -saca una pequeña libreta negra- ni modo estar a en mi lista negra su nombre.

- Dame eso -le quitó la libreta riendo ya que esa libreta es de las mujeres a las que le a roto el corazón y la tiene porque una volvió con él después de un tiempo y le destrozó el automovil y el apartamento, aunque más bien debería llamarse la lista de las obsecionadas, también supongo que está la loca que atacó a mi diosa.

- ¡Oye! Dame mi lista.

- Sabes bien que está lista es de puras locas obsecionadas.

- Pero tu prometida está loca.

Ambos reimos ya que si estába un poco loquita mi prometida pero por mi culpa y sólo a mi me trata mal, siendo que no fui el único que la tiene atada conmigo.

- Sabes que no te ara nada sin que yo lo sepa y aún te quiere o te hubiera partido esa cara que te cargas.

- ¡Na! Sólo espero que como amigo, hermano o de perdis conocido porque no me quiero quedar sin mis atributos -nos reímos y terminamos nuestro trago, si señoras y señores esa era prometida, aun recuerdo la paliza que me dio cuando trate de besarla en el estacionamiento y este idiota miro todo en primera fila desde su auto aunque diga que no, después pedimos pizza de la pizzería donde trabajamos eran las más deliciosas de la ciudad y de las pocas comidas me gustaba pedir, seguimos platicando y me cuenta lo que pasó con Afrodita cuando la fue a llevar a casa de su tía, sabía que en algún momento ella preguntaría pero no tan pronto, Jona se marcha y yo me doy una ducha y me acuesto a dormir.

El sonido del cel me saca de mi sueño, aún era de madrugada puesto que no quería contestar pero al final tomo mi cel, el número que se marca es desconocido.

- ¿Hola? -digo medio dormido.

- William Isa tuvo una accidente -reconozco la voz es la de July y me despierto por completo por lo que dice aún está asustada.

- July calmate y dime que pasó -le digo mientras me pongo de pie.

- Estaba dormida y desperté al escuchar hablar a Isa y la tía Diana, y al abrir los ojos... sólo vi a Isa caer se pegó en la cabeza con esquina de la mesa de noche y.... y luego sangre... fue muy rápido todo, enseguida llegó una enfermera y se la llevaron.

Decía la pobre llorando y mi corazón no deja de latir rápido por la preocupación por lo que sólo me pongo la bata y así como estoy salgo a tomar el elevador.

- July tranquila ella estara bien, ya voy para allá tu tranquila y llama a sus padres su madre -corrijo si metí las cuatro patas ya ni modo.

- Si está bien....

Cuelgo y el tiempo en que baja al estacionamiento se me hace eterno, las puertas se abren y me meto en el auto manejo a toda velocidad.

《Dios que este bien, no te la vayas a llevar después de conocerla tan poco tiempo》

Aunque es corta la distancia se me hace eterno bajo del auto, no se si estoy bien estacionado pero me importa muy poco si me infraccionan sólo quiero que Afrodita este bien, así que bajo y corro hasta la sala de espera buscando a July y la miro una mujer con un cuerpo casi de modelo, justo como la describía Afrodita y como la foto del investigador me entregó.

- July ¿qué sabes?

- Nada aún, lo siento William estaba tan nerviosa cuando te hable que olvide decirte que traía un vaso cuando callo.

- No te preocupes, ¿tu tía cómo está?

- Tuvieron que sedarla, se puso bastante nerviosa.

Colocó mi mano sobre su hombro en apoyo ya que se que Diana es mas que su tia- lo siento.

July suspira y se limpia las lágrimas- gracias.

Los minutos pasan y no nos dicen nada, la familia de Afrodita llega y es justo cuando el médico sale preguntando por sus familiares, nos acercamos todos.

- La joven está bien sólo tuvo una baja de presión, no tiene lecion cerebral sólo el golpe y una herida en la mano 8 suturas, en cuanto se termine el suero podrán llevarla a casa.

- Espere ¿no se quedará? -pregunto confundido.

- No, ya le hicimos todas las pruebas y salieron negativas así que no es necesario que se quede, sólo ir a casa, descansar y dejar sanar la herida.

El médico se marcha y ya que sólo nos queda esperar.

- ¿Es por esto que estas al pendiente si come? -Jorge pregunta mirándome y el resto de la familia hace lo mismo y no me queda más que suspirar y decir lo que a pasado.

- Sí, cuando está estresada más la falta de alimento hace que su presión se baje súbitamente y no hace caso de no dejar pasar una sola comida -digo lo último con frustración.