Matrimonio de primera romance Capítulo 130

El propósito de Delfino era empujar al Grupo Jimenez hasta el borde del abismo, hasta que Henrico no pudiera sostenerlo más y pidiera a Evelio que regresara al país.

Ya habían pasado once años desde que Evelio se apresuró a irse al extranjero para jubilarse.

Durante esos once años, Evelio nunca regresó al país.

Incluso para reunirse en familia, era Henrico quien llevaba a la familia al extranjero para encontrarse con Evelio. Pero nunca se había llevado a Yadira.

En cuanto al asunto de Jaime, Yadira sospechaba que podría tener algo que ver con Delfino.

Después de todo, el Grupo Auge realmente no permitiría que Jaime aceptara promocionar al Grupo Jimenez; no obstante, Apolo y Delfino tenían una relación cercana.

Pero si tenía algo que ver con Delfino, ¿por qué obligaba a Evelio a regresar al país a toda costa?

Yadira miró a Noela de repente, -Si el compromiso de Perla con Delfino está relacionado con el secuestro de ese momento, ¿se podría suponer que Delfino ha insistido tanto en obligar a mi abuelo a regresar al país porque mi abuelo también está relacionado con ese secuestro?-

Noela negó con la cabeza, -Pero si tu abuelo está relacionado con el secuestro de Delfino y su madre, ¿por qué la familia Dominguez lo dejó ir al extranjero para jubilarse? ¿Y por qué dejaron que hubiera un matrimonio entre las dos familias?-

Yadira pensó que las palabras de Noela tenían sentido.

Esa serie de cosas que hicieron la familia Dominguez daba a la gente una sensación de que estaban complaciendo a la familia Jimenez...

De pronto una idea pasó por la cabeza de Yadira, y frunciendo el ceño dijo, -Mi abuelo goza de buena salud. No necesitaba ir al extranjero para jubilarse once años antes. Debe haber alguna razón que lo obligó a ir al extranjero, y la promesa de matrimonio entre Perla y Delfino fue algo muy extraño. Estos dos acontecimientos juntos...-

Luego de una pausa, Yadira continuó, -No creo que haya tal coincidencia en el mundo. Sospecho que mi abuelo debe haber conocido algún secreto de la familia Dominguez, por eso llegó a tener un acuerdo matrimonial con la familia Dominguez, pero como la familia Dominguez es cautelosa, obligaron a mi abuelo a que se fuera al extranjero y no le permitieron regresar.-

Cuando terminó de hablar, vio a Noela mirándola con una expresión aturdida.

Yadira también sintió que le había puesto mucha imaginación al asunto, -¿Crees que he supuesto mal?-

Noela negó con la cabeza, -No, creo que lo que has dicho tiene mucho sentido. Además, mi papá también tuvo algún contacto con ese caso en ese entonces. Es cierto que tu abuelo está relacionado con ese caso, pero no ha influido mucho en ello...-

...

Por la noche.

Yadira abrió el grifo mientras sostenía su teléfono para ver las discusiones que había en Twitter sobre que Jaime era amenazado.

-¡Yadira!-

La voz de Fidelio llegó desde afuera.

Su voz se acercó poco a poco, -Yadira, ¿estás cocinando?-

Yadira dejó el teléfono y miró hacia fuera de la cocina, justo vio que Fidelio estaba corriendo hacia su dirección.

Cuando Fidelio entró corriendo, destapó la tapa del sartén, -¿Qué estás haciendo? ¡Huele muy bien!-

-Estofado de panceta de cerdo.- Yadira le dio unas palmaditas en la mano ligeramente, -Todavía no está listo, sal y espera.-

-Está bien.- Fidelio recogió su mano con una sonrisa y salió corriendo a toda prisa.

Delfino aún no había regresado durante la comida.

Yadira se quedó pensativa mirando la posición donde Delfino se sentada habitualmente.

Fidelio tomó un trozo de estofado de panceta de cerdo y se lo metió en la boca, se le llenó la boca de grasa y dijo vagamente, -Si echas de menos a mi primo, llámalo.-

-Quién lo echa de menos.- Yadira le dio otro trozo de carne, -Come y calla.-

-Vale.- Obviamente Fidelio no la creyó.

Después de que los dos terminaron de comer, Delfino aún no había regresado.

Entonces Yadira volvió a la habitación y se dio una ducha, se sentó en la cama y miró la habitación vacía, sintiendo que algo no iba bien.

¿Era por la ausencia de Delfino?

Sonó una vibración.

De repente, su móvil en la mesita de noche empezó a vibrar.

Yadira lo tomó y echó un vistazo, resultó ser una llamada de Delfino.

Dudó unos segundos, luego extendió la mano para cogerla.