Mi Chica Melifluo romance Capítulo 13

Se rio con voz ronca, usó las manos para contener el agua y la vertió sobre sus pechos uno a uno, observando luego cómo las gotas se deslizaban por sus senos.

Dulce encogió los hombros, pero le tendió la mano inmediatamente para levantarle la barbilla y la besó.

—Mmm...

Ella forcejeó por un rato, pero al instante fue sujetada por él. Su firme pecho se le acercó y presionó los pechos grandes para que se desformaran y se estrecharan contra su cuerpo.

—¿Te duele?

Sus largos dedos le tocaron la parte inferior, masajeando con fuerza adecuada sobre la sedosa suavidad.

—Sí.

Ella alzó la barbilla y le miró a los ojos.

Por todo lo que estaba experimentando ahora, todavía no podía creer que fuera real... El matrimonio, un joven y rico hombre de negocios caído del cielo y los dos cuerpos entrelazados en la bañera...

—Espero que te comportes poco mejor mañana.

Retiró su mano, sacó la toalla de baño y la envolvió alrededor de su cintura.

—Tenemos tres días, Dulcita, nos vemos mañana.

Bajo la mirada atónita de Dulce, la envolvió en una toalla de baño y la empujó afuera de la puerta.

¿Qué demonios era esto?

«¿Qué demonios quiere, Alberto?» ¿Qué quería decir con tres días que había mencionado?

Vio cómo se cerraba la puerta y en el silencio sepulcral del pasillo, ella era la única cubierta de gotas de agua y parada sobre la alfombra...

Agarró fuerte la toalla de baño con una mano y se limpió la cara con la otra, se dirigió descalza hacia el ascensor a gran paso. Su puerta dorada reflejaba el aspecto suyo un poco lamentable, pero más encantador... ¡Había pasado de niña a mujer!

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