Mi dulce corazón romance Capítulo 13

Al día siguiente, Cordelia llegó a la empresa a primera hora de la mañana.

Cuando entró a la oficina, sintió que el ambiente de hoy era un poco diferente.

Todos susurraban algo en voz baja, pero cuando la vieron entrar, cambiaron de expresión sutilmente y cerraron la boca al unísono para observarla en silencio con una mirada extraña.

Cordelia frunció el ceño y entró en su oficina sin mover la vista.

Tan pronto como se sentó, marcó la línea interna para llamar a Cristina.

Cuando entró Cristina, actuaba muy cautelosamente y le dirigía una mirada de lástima.

A Cordelia le pareció un poco graciosa, así que la observó recostándose en su silla.

—¿Qué ha pasado? Solo no te he visto en dos días y ¿me miras con esta mirada?

Cristina sonrió incómodamente y dijo avergonzada:

—Gerente Cordelia, ¿no… has recibido noticias con antelación hoy?

Cordelia enarcó las cejas, cogió la taza de la mesa, se levantó para llenar un vaso de agua, mientras se lo bebía despreocupadamente respondió:

—¡No! ¿Qué pasa?

—Mmm… nada. Dicen que hoy vendrá un nuevo empleado a la compañía, que parece ser de nuestro departamento.

—¿En serio? ¿Todos recibieron la noticia?

—Lo mencionaron los compañeros del departamento de recursos humanos cuando estaban charlando. La persona que va a venir es una veterana en las relaciones públicas, parece que está bastante calificada porque ha tratado casos de muchas celebridades de primer nivel.

Hizo una pausa, luego miró a Cordelia dubitativamente con un rastro de vergüenza en sus ojos.

—Gerente Cordelia, ¿sabes con qué intención ha invitado el señor Bosco a tal persona?

Todos en la empresa sabían que Cordelia estaba a cargo del departamento de relaciones públicas de Viento Entertainment. Aunque nadie conocía los antecedentes de Cordelia porque era demasiado discreta. Aparte de los asuntos de la empresa, casi no hablaba de otro tema en la compañía.

Pero no importaba cuáles eran sus antecedentes, su edad ya lo decía todo, ¿cuánta antigüedad podía tener una chica de veintitantos?

En esa industria que daban mucha importancia a la antigüedad, nadie iba a creer que Bosco había invitado a una veterana tan experimentada solo para que fuera subordinada de Cordelia.

Pero si no era una subordinada, solo podría ser…

Cordelia finalmente entendió por qué todos la miraban tan rara hoy.

Entrecerró los ojos levemente, ocultó las emociones en sus ojos y sonrió a la ligera.

—Ya veo, ¡ve a hacer tus cosas primero!

Al ver su apariencia tranquila, Cristina se sintió un poco preocupada, pero sabía que no tenía derecho de decir nada, por lo que salió con cara de preocupación.

Después de que Cristina se fue, Cordelia pensó un rato y luego dejó sonar una risita.

Empacó sus cosas sin complicarse mucho, sacó la carta que había preparado hacía mucho tiempo de su bolso y se dirigió a la sala de reuniones.

Eran las nueve de la mañana.

La sala de reuniones se había llenado con todos los altos cargos de Viento Entertainment.

Al verla entrar, todos la saludaron uno tras otro, algunos sinceros y otros fingidos.

Después de todo, la capacidad y el coraje que había demostrado en los últimos dos años había convencido a la mayoría de la gente, pero todavía había unos pocos que pensaban que ella era demasiada joven y tenía muy poca experiencia como para ocuparse de un puesto tan importante.

Cordelia no se molestó en considerar los pensamientos de esas personas para caminar hasta su asiento y sentarse.

En ese momento, la puerta de la sala de conferencias se abrió de nuevo y levantando la cabeza vio a Bosco entrando con un grupo de personas.

Las pupilas de Cordelia se contrajeron de repente y su expresión se volvió fría.

Además de sus dos secretarias, Briana y su agente Estela Oliva venían detrás de Bosco.