Porque Yo lo digo (COMPLETO) romance Capítulo 55

-¿Te han dicho alguna vez lo deliciosa que te ves bailando?

El caliente aliento sobre su cuello cargado de ese pasoso olor a cerveza le provocó escalofríos, eso y la desconocida mano sobre su hombro

-¡Largo de aquí galán de mini market!

Le dio un empujón en el pecho al tipo que invadía el espacio personal de su amiga y rodeándole la cintura la atrajo a su pecho

-¡Wes!

Chilló Danielle, sorprendida..., y muerta de la risa por la reacción de su amigo. Wes, podía tener otros gustos pero era muy territorial cuando se trataba de su amiga. El tipo se alejó sin replicar.

-Esa camisa de seguro se la compró su mamá hace 4 navidades, es horrenda y ese aroma a perfume barato, no, no cariño, si te van a coquetear que al menos sea alguien digno

-Wes, solo iba a ignorarlo no te arrugues –le sonríe intentando borrar la arruga en su frente

-Dani, ya fue suficiente baile y creo que ese vestido fue un error, jamás debí escogerlo sin hacer que te lo probaras antes, está muy ajustado y corto –la observó negando con la cabeza

-Creí que se veía bien... -intentó tirar del dobladillo para cubrir un poco más sus muslos pero la tela no se movió

-Eres una sirena toda curvilínea y los babosos de aquí no saben apreciarlo solo se calientan y babean

-¡Ya cállate! -le dio un juguetón golpe en el pecho para que dejara de estar tan serio-. Vamos por un trago, creo que lo necesitas más que yo

-Si vas a enrollarte con alguien yo tengo varios candidatos dignos Dani

-Uy si ¿ya les pusiste el sombrero seleccionador? –bromeó

-¡Ja! Por supuesto y los patanes ya fueron descartados -afirma satisfecho-. Deja que te encuentre un príncipe azul ¿muy altos, o solo altos?

Preguntó mientras Danielle, lo jalaba de la mano fuera de la pista de baile hacia la barra.

-¡Oye amigo, ponme dos ron con ginger ale y mucho hielo!

Alzó la voz Wes, para que lo atendieran y a pesar que la barra estaba a reventar de gente sedienta el chico del bar le dio su orden en un segundo

-Entonces ¿puedo iniciar la búsqueda? –preguntó apoyando un codo en la barra observando detenidamente a su amiga

-Wes... -suspira bebiendo un sorbo-. Yo..., yo estoy un poco “emocionalmente con…, alguien”, no es “nada” aún pero nos gustamos y lo estamos tomando con calma

-Esa mierda no sirve, yo hablo de sexo, libérate

-Estoy bien en esa parte –vuelve a beber un trago para no tener que mirarlo

-¿¡Y no me has contado nada!?

-Quiero decir que no me urge, sucio -sonríe divertida por su expresión

-Si claro madre Teresa

Una hora más tarde Wes, se estaba disculpando con Danielle, por tener que irse tan pronto, le había surgido un problema con su padre y no quería esperar a la mañana siguiente para resolverlo

-Me voy a quedar

-Sola, no, no puedo dejarte sola

-Solo voy a acabar este vaso ir al baño, de seguro la fila es larga y voy a pedir un Uber, es temprano aun no quiero regresar

-Dani, vámonos ahora, prometo compensarte pero no me hagas dejarte sola

-Tranquilo amigo, yo me encargo de este primor

A su izquierda en la barra un hombre interrumpió su conversación, su tono y seguridad al hablar hicieron que Danielle, reconociera al dueño

-Zac... -se giró para confirmarlo

-¿Quién es este? -protestó Wes

-El hombre que le hará compañía a la mujer más despampanante del edificio

-No te sale lo adulador -se burla Danielle, con calma

-Tú decides Dani

-Me quedo Wes

-Voy a llamarte en media hora –anuncia nada de convencido

-Claro amorcito -sonrió divertida y agradecida por su preocupación

Relajándose Wes, abrazo a Danielle, despidiéndose sin muchas ganas de dejarla con el desconocido del que luego le pedirá información.

-Entonces bombón ¿quién era ese?

-Wes

-¿Qué es Wes, para ti?

-Eso no es asunto tuyo Zac

-No me muestres los dientes gatita, solo intento hacer conversación

-¿Estás solo? –preguntó mientras miraba alrededor en busca de una despampanante rubia

-Así es, solo

-¿Y eso por qué? Te encanta la atención, sobre todo femenina

-Frida, me tiene harto ya no la soporto así que necesitaba un trago

-O varios

-Exacto, pero qué bueno que te encontré –le sonrió agotado

-¿Es bueno?

-Quiero preguntar algunas cosillas…, estaba pensando en ir a tu trabajo, de verdad que desde que te encontré que he pensado mucho en ti

-No creo que eso sea bueno

-Prometo que no es por alguna caliente fantasía, estoy en una especie de receso, no compañía femenina hasta conseguir una estabilidad para mi chico y yo

-Eso suena maduro Zac. Y responsable

-Probablemente tu amiga te habló no muy bien de mí para que estuvieses de su lado incondicionalmente –supuso con una mueca de fastidio hacia Frida

-Ya no somos amigas

-Quién podría de esa arpía fría e insensible

Divertida con lo agobiado que parecía le pidió al chico del bar un par de shots de tequila y le ofreció uno, con gusto Zac, lo aceptó y lo bebió antes de lanzar su primera pregunta

-¿Es verdad que se casó con su jefe?

Ouch, eso le provocó náuseas. Bebió su tequila y luego un trago de su vaso de soda.

-Sí, es verdad

-No quiero que un desconocido viva con mi hijo, esa zorra no lo va a cuidar bien

-¡Wow, calma vaquero! Sin palabrotas –pidió algo incómoda, no quería escucharlo hablar mal de Nicholas.

-Bombón, solo estoy diciendo la verdad, además esa mujer no hace nada, yo le pagaba a una niñera para que cuidara a Ian, ni siquiera le daba sus baños, es una holgazana

-Lo sé –asiente de acuerdo

-Supongo que tiene dinero, aunque estoy seguro que solo se quiere llevar a mi chico porque ya no le estoy depositando

-Ambiciosa, es probable Zac

-No sé cómo pude caer en su juego, siempre supe quién era

-¿Una arpía venenosa?

-Una puta

-Oye –le advirtió para nada de acuerdo con el insulto

-Dani, siento la necesidad de aclararte esto

-Puedes hacerlo, está claro que necesitas descargar todo lo que sientes por Frida

-Gracias

-Dispara

-No soy un idiota con dinero, siempre he sido responsable con mi chico, me gustan las mujeres divertirme y salir de fiesta y carajo si la mañana siguiente es mi día con Ian, me aguanto la resaca y me divierto con él, pero nada de lo que decía esa… “mujer” es cierto, me preocupo por él, y todas sus necesidades, sí, le pagaba extra a la niñera para que me contara las estupideces que hacía la madre del año, pero solo porque me preocupaba que mi chico lo pasara mal. Puede sonar medio egoísta o como quieras pero es un Lewis, y no le va a faltar nada

-Solo disciplina –murmuró recordando al muñeco diabólico

-Estoy trabajando en ello, está malcriado, muy malcriado, los Lewis, no somos llorones

-Vaya, quejumbroso que estás

-Disculpa, si no quieres seguir escuchando mi mierda cierro la boca y ya

-No te preocupes, me distrae de mi propia “mierda”

-Deja que te invite algo más que una soda ¿de acuerdo?

-Solo una copa más

-Hecho y yo mismo te llevo a casa, no voy a dejarte con algún pervertido

-Después de todo tienes instinto paternal -bromea-. Espero que Ian, no sea un mujeriego insensible

-Lo prometo

Ordenaron otra ronda y Zac, continuó haciéndole preguntas sobre Frida y su nuevo esposo pero Danielle, pese a las náuseas de hablar de ellos como una pareja respondió todo para aclarar que Nicholas, no era una amenaza ni un peligro para nadie, menos para un niño.

-¿Siempre fue tan odiosa? Quiero decir, en algún momento tiene que haberte encantado algo de ella además de lo físico ¿no?

-Cuando se lo propone es una maravilla, sensual, preocupada y hasta dulce, pero eso le requiere un esfuerzo tremendo y no dura mucho

-Le gusta el lujo y que la atiendan

-Que la mantengan y gastar es lo único que disfruta, cuando me pedía que le hiciera algún regalo y yo el idiota iba y se lo daba me lo agradecía con un increíble polvo, todo lo relacionaba al sexo

-Manipula así

-¿Quieres saber por qué nunca quise una relación real con ella?

-Me intriga, sí

-Bueno Dani, la madre de mi hijo es una puta. Cobra por su compañía, extorsiona por el placer de dominar, nadie puede hablar de ella con otros por sus “atenciones” o los perjudicará como tú y yo sabemos que es capaz

-¿No estas bromeando verdad?

-Claro que no Frida, es hija de gente humilde de campo y siempre se avergonzó de ellos, por eso los dejó atrás y se mudó a la ciudad, no sé muy bien cómo acabó siendo “acompañante” pero creo que así fue como me “escogió”, ella me lo pintaba como el destino, como él, hombre de sus sueños y esa mierda cursi, pero la realidad es que mientras trabajaba con un cincuentón adinerado en alguna fiesta de etiqueta me vio y averiguó qué tan grande era mi billetera, además de no ser un viejo sucio con ganas de cogerse jovencitas y me cazó, consiguió toda la información que pudo de mí y bueno al principio fue solo sexo pero como te dije es buena actriz, me gustó por un rato pero yo sabía de su trabajito y a veces dudaba que solo saliera conmigo, traté de tomar distancia, terminé con ella, pero me buscaba, iba a fiestas donde sabía que yo podría estar y me seducía, se embarazó a propósito, creyó que así iba a dejar de alejarla y olvidar que cobraba por sexo o por acompañar.

-Yo…, oh Dios…, creo que, que…

-Tranquila, eres una chica buena jamás te habrías imaginado que es su deporte favorito seducir millonarios para chuparles no solo el pene, también el dinero

-Espero que Nicholas, no corra peligro con ella

-¿Hablas de tu jefe?

-Sí, yo…

-Espera ¿Nicholas? –sonaba sorprendido

-Sí, mi jefe, su jefe… -aclaró preocupada

-Mierda, lo consiguió la muy zorra

-Zac, me estás preocupando ¿hay algo que deba saber?

-Bueno hace unos años en una de nuestras discusiones por el bienestar de Ian, nombró a un “Nicholas” jactándose de lo apuesto y adinerado que era y ahora la muy perra consiguió su ticket dorado

Pálida y en shock comenzó a procesar rápidamente todos los comentarios extraños que tuvo durante el año que trabajó con Frida, las preguntas sobre Nicholas, o el motivo por el que nunca quería darle malas noticias...

¡Mierda!

Tal y como lo prometió Zac, llevó a Danielle, hasta su edificio, claro que su chofer condujo estaba bastante pasado de copas pero gracias a ella liberado del peso que sentía al guardar el secreto de Frida.

La nueva semana inició y junto a ello las exigencias de la señora Frida, según ella cumpliendo con su papel de esposa ejemplar, se apuntó en varios eventos con las esposas de empresarios con los que Nicholas, se relaciona y para variar le ordenó a Danielle, hacer todo el trabajo y llevarse el crédito para quedar bien con las mujeres y con su esposo. Y así fue, en agradecimiento por lo bien que lo hacía Nicholas, le dio un nuevo auto, uno excesivamente costoso y que solo su esposa pudiese conducir.

Agotada emocionalmente por tener que literalmente quedarse sentada mientras el hombre del que está enamorada sigue con su vida, lo intenta, trata de auto convencerse que lo hace por el patrimonio de su abuelo, pero entre un hombre que dice quererla y otro que le manda regalitos con propuestas indecentes ya no lo soporta. No quiere ir a trabajar, odia escuchar el despertador cada mañana y ver a Frida, pavonearse cada vez que le da trabajo, es una sensación tan, tan desagradable que las náuseas siempre están y cuando la ve con Nicholas, del brazo siente como si la apuñalaran, y ya tiene varias heridas sin sanar, se encuentra al borde de lanzar la bandera blanca, es su cordura o un hombre que antepone el dinero y ambición a ser... FELIZ o tal vez eso sea lo que desea…

Entre Frida y Takeshi, se las arreglaron para mantenerlos separados, no había ni siquiera un minuto para estar a solas, siempre había un tercero y mucho trabajo, sobre todo para Danielle, así que básicamente volvieron a distanciarse aunque ya parecía condena y realmente se cuestionaba cada día el haber tomado las decisiones correctas

No casarse

Ser la otra

Esperar

Estar sola

Dos semanas pasaron y ambos estaban resignados a que este era el único modo de “soportarlo”, aunque cada vez que Danielle, le contaba que saldría inmediatamente la mente de Nicholas, pensaba en sus amigos hombres. Como si no tuviera suficiente sufriendo al verlo con otra, además le hacía escenas de celos que acababan hiriéndola, ella no se besaba con nadie ni dejaba que la tocaran, pero él, insistía en que no era lo mismo, que lo suyo es falso, aunque fuesen besos reales y caricias muy verdaderas.

Y como si fuera poco tener que soportar la constante presencia de Frida, en la oficina o en las fotografías de eventos a los que Nicholas, debía asistir con ella colgando de su brazo o tocándolo para asegurarse que todos se dieran cuenta que están casados no fuese suficiente castigo, de todas las tiendas que había en el centro comercial justo tenía que entrar a la misma que Frida y Vanessa, un lindo sábado arruinado, hizo lo que pudo para intentar escabullirse y evitar tener que saludarlas. Tomó a Mika, de la mano y la jaló para alejarse, pero ya era demasiado tarde, la habían visto y cuchicheaban entre ellas mientras la observaban creyéndose importantes, superiores.

-¿Esa no es...? -dijo Mika, en cuanto se dio cuenta de la presencia de Frida

-Sí, no la mires que no quiero tener que hablarle

-Vaya, parece que se encontró uno con dinero, va de diseñador la muy perra

-Si... -intenta hacer que se mueva

-Y al parecer la amiga también tiene dinero -continuó sin moverse de su sitio

-Mika, vamos muévete no quiero hablarle

-¿Por qué?

Pero ya era demasiado tarde Frida y Vanessa, ya estaban frente a ellas sonriendo con arrogancia

-Vaya, no creí que te alcanzara para “Victoria’s Secret” asistente -doña petulancia se había acercado

-Frida, madura -pidió Danielle, lanzándole una mirada a Mika, para que se alejaran pero fue ignorada

-Vamos niña que no es ningún secreto -continuó la arpía

-Si hablamos de secretos -contesta impaciente

-Si tienes algo que decir de Frida, solo hazlo no te calles -la animó Vanessa, con malicia

-Anda, la envidia te corroe, estas enamorada de tu jefecito y esperas como tonta a que se separe algún día QUÉ PATÉTICA, sigue soñando pobretona

Fulminándola con la mirada Danielle, lo intentó, de verdad que sí, no era su estilo humillar a la gente pero Frida, hace rato que se lo estaba buscando así que cuando vio cómo el par se giraba para marcharse victoriosas disparó

-Dime ¿ya te has encontrado con alguno de tus clientes ahora que eres parte del circulo y no solo una acompañante?

Atragantándose con su propia saliva Frida, dejó escapar un grito y como si de una película de terror se tratara giró lentamente la cabeza clavando su mirada asesina en Danielle, casi era Regan, la niña del exorcista, igual de endemoniada y menos niña

-¿Sí o no? Porque hay un par de ancianos con mucho dinero y poco tiempo de vida que tal vez necesiten de tus atenciones

De una bofetada Frida, le dio vuelta el rostro a Danielle, hirviendo en una mezcla de odio y pánico al saber que conoce su sucio secreto

-¡¡Frida!!

Chilló Vanessa, llevándose una mano a la boca por la sorpresa. En cuanto a Mika, empujó a esa mujer lejos de su amiga y buscó algo en el rostro de Danielle, tal vez sangre o algo roto porque el sonido del golpe se escuchó en toda la tienda

-¡¡¡Quién te lo dijo!!!

-Mi buen amigo Zac, me contó que han preguntado por ti, bastante -mintió

-¡Mientes! Zac, no te buscaría, le gustan como yo

-¿Huecas por dentro? ¿O con el signo $ tatuado en la frente?

-¡Basta ya! O hago que te despidan en un maldito segundo –escupió fuego

-Quiero verte intentarlo -la desafió-. Sabía que eras interesada pero jamás imaginé que a tal extremo

-Si alguien se entera tú y yo vamos a tener más que palabras pendeja tonta

A punto de lanzarse sobre ella con sus garras recién afiladas Frida, fue detenida por el guardia de la tienda que para su humillación particular le pidió que abandonara el lugar.

-Creo que hay mucho que no me has dicho Dani

Comentó Mika, mientras Danielle, se sostenía la mejilla con una mano y no quitaba la mirada de la bruja siendo sacada y humillada

-No y prefiero que siga así -respondió sin mirarla

-Dani -suspiró preocupada-. Sé que la cagué en muchos sentidos pero soy tu amiga

-Y yo decido qué contar y qué no ¿tengo colorado? -le enseña la mejilla

-No...

-Y no me pongas esa cara, aprendí la lección no tengo que contarlo todo, hay cosas que simplemente son mías y no debo decírselas a nadie

-Yo..., lo lamento, no debí contarle a Amanda, que Nicholas, te había pedido que te casaras con él, para cobrar su herencia

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