Si es destino estar contigo romance Capítulo 30

—No lleves este tipo de pijama. —Lucrecio dijo en tono de mando.

Yolanda miró su pijama y no sintió nada malo, solía ser este tipo, ¿por qué no se podía llevar? Sin embargo, al ver que la expresión fría de Lucrecio, asintió obedientemente.

—Cualquier cosa que digas, obedezco.

Yolanda parpadeó, sólo que no sabía que su aspecto actual hacía que Lucrecio no pudiera soportar más.

Lucrecio se dio la vuelta y dijo:

—Muy bien, baja a comer.

—¡Abrázame! —Yolanda abrió los brazos y empezó a ser mimada, quería que Lucrecio la bajara.

—Caminas sola. —Lucrecio ni siquiera giró la cabeza hacia atrás y bajó directamente las escaleras.

De hecho, sus pies casi se habían curado y podía moverse libremente. Ella bajó las escaleras hasta el comedor y se sentó.

—Señorita, el helado está listo, ¿quieres algo?

Lina no sabía lo que acababa de pasar arriba y se había concentrado en preparar comida para ella.

—¿Helado?

Yolanda olvidó lo que había dicho, y luego reaccionó inmediatamente.

—Bien, espolvorea más chocolate.

—¿Cómo? ¿No es helado de mazapán? —Lina estaba confundida.

Yolanda se quedó sin palabras y miró con cautela a Lucrecio. Se dio cuenta de que éste ya la estaba mirando.

Ella sonrió:

—Tengo poco memoria últimamente...

—Lina siempre te ha mimado, y no dejaré que vuelvas a hacer esto.

Lucrecio le pellizcó suavemente la nariz, aunque era una reprimenda, pero sus ojos estaban llenos de cariño.

Yolanda asintió inmediatamente, por supuesto que sabía que Lina la quería.

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