¡SUÉLTAME, DIABLO! romance Capítulo 2

Al escuchar esta voz, Daniela se estremeció suavemente de con pánico.

La luz tenue hacía que la escena que veía irreal.

El hombre sentado en el sofá cruzó las piernas, y Daniela sólo podía ver sus labios ligeramente fruncidos y su mandíbula.

Daniela se congeló.

Nunca había visto a ningún hombre que se ajustara tan bien a negro y que tuviera un temperamento tan impresionante.

—¿Quién eres?

Sólo cuando la desagradable voz del hombre volvió a sonar, ella salió de su estado de embeleso.

Daniela se maldijo en secreto por haberle mirado con fascinación, bajó la cabeza con disgusto. Se apresuró a explicar:

—Lo siento, no quiero molestarle. Irrumpí en su habitación porque me estoy escondiendo... Lo siento, me iré enseguida.

Sin embargo, perdió la fuerza para levantarse a causa del alcohol.

De repente, el hombre del sofá se río fríamente.

—¿Cuál es tu propósito de venir a mi habitación?

Al escuchar sus palabras, Daniela se congeló. La sensación de sentirse insultada le hizo levantar la cabeza con obstinación y le replicó con frialdad:

—Señor, no sé quién es. Te has equivocado conmigo. ¡No me interesas en absoluto!

El hombre se levantó de repente y se acercó lentamente. Su mirada era como una enorme red que la atrapó.

—Entonces, ¿qué le interesa? ¿Dinero o cuerpo? Puedo satisfacerte con todo eso.

—¡Señor, por favor, respétame!

Daniela se mordió el labio, con las manos apoyadas en el suelo rígidamente cerradas en puños.