¡SUÉLTAME, DIABLO! romance Capítulo 7

—¡Ah!

Se oyó un grito.

José parecía haber adivinado que iba a gritar y la tapó la boca con su mano.

Él bajó ligeramente la cabeza y soplaba aliento caliente sobre su oreja. En ese momento, al sentir que la mujer en sus brazos temblaba violentamente de miedo, sonrió y dijo:

—¿No te dije que te quedaras quieta y aún corriste? ¿Tan mal educada?

—Suéltame, por favor...

Daniela no tenía el valor de darse la vuelta y mirarle. Su espalda estaba siempre tensa como una cuerda.

José se acercó a su oído y soltó una suave carcajada. Se quitó las gafas de sol, revelando sus ojos helados pero amorosos.

—Daniela, ¿sabes que los hombres tienen un deseo especialmente fuerte de conquistar a las mujeres que los rechazan?

Daniela se estremeció, apretó los dientes y le refutó:

—¿Qué crees que debo decir? Ante el acoso de un desconocido, ¿no debo gritar y luchar, sino que someterme?

—Resulta que, tanto si luchas como si me obedeces, sólo hay un resultado.

—¡Entonces, seguiré luchando!

La respuesta de esta mujer sorprendió a José. En el siguiente instante, sonrió y dijo:

—Pero, también no sabes que los hombres suelen vejar con más fuerza a las mujeres que les gusta resistir. Al igual que anoche, te...

—¡Ah!

Daniela gritó y se negó a escucharle hablar de nada sobre la noche anterior.

¡Se estaba volviendo loca!

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