Tú decidiste Rechazarme romance Capítulo 6

Al día siguiente:

Samara Pov:

Desperté y me sentía algo cansada. Pero eso no me detendrá.

Y algunos se preguntarán ¿Por qué tan animada?

Pues ayer, después de haber hablado con mi madre, fui a la piscina de mi casa, ahí vi mi reflejo y pensé que todo estaría bien, que si pasó fue por algo ¿No?

Mi loba se sentía tan bien. Así que decidí ser optimista.

Me levanté de mi cama y me dirijo al baño; pongo música, me quito mi pijama y me meto a la ducha. Canto en la ducha mientras me baño.

Al terminar salgo con dos toallas, una en mi cuerpo y la otra está en mis manos mientras seco mi cabello con ella.

Voy a mi closet; me pongo unos jeans claros y una blusa de mangas largas con detalles claros; me acerqué a mi cama y me puse mis botas beige.

Hacía frío ya que el día estaba nublado.

Me peiné el cabello y lo dejé suelto. Me puse un poco de rímel, y un labial claro; miré mi rostro y estaba algo pálida, y mis ojos siguen algo raros; me echo algo de rubor para disimular.

Ya lista bajo a desayunar, ahí me encuentro con Jess que está sentada con su celular esperando que le sirvieran el desayuno.

- Hola- la saludé con una sonrisa, ella despegó sus ojos del celular para mirarme, sonrió ampliamente.

- ¿Y cómo durmió la princesita? - me dijo divertida

- Sabes que no me gusta que me digan así- dije algo molesta.

- Discúlpeme, futura reina- dijo imitando de manera burlona a los estirados de la corte.

- Está perdonada plebeya- dije imitando a mi madre.

No aguantamos y reímos sin parar.

Nos sirvieron el desayuno y comimos. Acabamos y subí a lavarme los dientes, cuando bajé Jess ya estaba en la puerta esperándome.

- Apúrate Samara- me gritó Jess desde la puerta, yo fui a la cocina por el té caliente que pedí que lo pusieran en un frasco para llevar, los días que hace frio me encanta llevar algo caliente para el camino.

Salí y subí a la limosina. En el camino Jess y yo hablamos sobre quien podría ser mi nuevo beta. Cuando llegamos estaba Malcon esperándonos.

Salí del auto con rapidez y sin que él se lo espere me impulse para abrazarme a él.

- Yo también te extrañe- me dijo siguiéndome el abrazo.

- Chicos, los quiero, pero necesitamos llegar temprano a las clases de Samara, debemos de avanzar- dijo Jess, nos separamos y caminamos en dirección a el salón donde seria nuestra clase.

Para mi suerte me tocaba con Malcon esta clase y Jess estaba permitida de entrar conmigo; pero para mí mala suerte también me tocaba con Marcus.

Entramos a clases y no le hice caso, no me iba a arruinar el día. Pasamos normal las 3 primeras horas.

- ¿Normal? - me preguntó irónica Lazuli- Todos los chicos nos quedaron mirando, a mí me incomoda esta atención, siento que somos algún animal raro en exposición.

- Lazuli, somos la futura reina, es obvio que nos miran así, pronto nos miraran muchos más- le dije.

- Claro, la desventaja de ser la futura reina.

- No mientas, te conozco, esto te agrada, aunque sea un poco, ser el centro de la atención- le dije.

- Bueno, si me gusta un poco de atención a veces, pero no siempre.

- Tranquila, no estamos rompiendo ninguna regla- corto la conexión.

Estamos dirigiéndonos a la cafetería. Estamos Jess, Víctor, Malcon y yo.

- Hablé con tu madre sobre el nuevo Beta y dijo que se retrasó- comentó Jess. Entramos a la cafetería y nos sentamos en la mesa del medio.

- De seguro- dije sin darle mucha importancia.

- Chicas, iremos a buscar a Fabián- dijo Víctor a lo que nosotras asentimos.

Desaparecieron de la cafetería ambos.

Pasaron 15 minutos y ya estaban sentados con nosotras unos chicos que trataban de convencernos de ir al baile con ellos.

Cuando de pronto las puertas de la cafetería se abrieron dejando ver a los de la manada Black Moon, encabezados por el patético de mi ex mate.

Pasaron y se dirigieron a nosotros.

- Hola- me dijo Marcus coqueto- ¿Puedo sentarme?

Jess y yo nos miramos, y ambas hicimos cara de disgusto.

Tomé mi manzana y le di un mordisco.

- No- respondió Jess- Esperamos a alguien.

- No te pregunté a ti- la miró molesto- Además no es forma de que le hables así a tu futuro rey.

La manzana que estaba comiendo se me quedó atorada en la garganta al escuchar eso, después de calmarme le dije- ¿Tu qué? - pregunté molesta.

Marcus iba a hablar, pero una voz femenina lo interrumpió.

- Así que este es el idiota que rechazó a una de mis mejores amigas- todos miramos a la dueña de la voz; esos ojos color café no los confundiría nunca, han pasado ya 4 años que no la veo, pero sé que es ella.

- ¡Cass! - gritó Jess, se abalanzó encima de ella.

Se abrazaron. Me paré de mi asiento ignorando a Marcus y la miré de pies a cabeza. Llevaba unos jeans oscuros y ajustados, una blusa negra y su cabello marrón está suelto.

- Cassandra Evil- dije mirándola.

- Samara Moon- me dijo de la misma forma.

No soportamos más y nos unimos en un fuerte abrazo.

- Te extrañé Cass- le dije todavía sin soltarla.

- Y yo a ti- nos separamos.

- ¿Cuándo llegaste? - pregunté incrédula y emocionada.

- Hace una hora, fui a dejar mis cosas en tu casa. Tu madre me dijo que también diera un comunicado a los alfas jóvenes sobre la reunión que habrá- dijo con una sonrisa radiante.

- Oye y ¿Sabes si ya llegó el nuevo beta? - preguntó Jess.

- Estás hablando con ella- dijo Cass alzando levemente sus manos y mordiéndose el labio inferior levemente.

La miramos sorprendidas y nos dimos un abrazo grupal. Cuando nos separamos y vi cómo agarraron a Jess del brazo con brusquedad y la tiraron al piso para después cogerme por los brazos a mí.

- ¿Qué te pasa? - grité furiosa haciéndole frente.

- Esa niña es una insolente- dijo Marcus mirando a Jess con odio. Casi la ayudó a levantarse.

- Tú no tienes derecho a tratarla así, al ser mi beta es igual o más importante que tú- le dije molesta y furiosa.

- Soy su futuro rey, merezco respeto- me dijo furioso.

- No eres NADA, solo el alfa de una manada, luego de eso no eres NADA– le dije furiosa haciendo énfasis en la palabra “nada”.

- NO ME VAS A HABLAR ASI A MI, SOY TU MATE– me gritó con fuerza.

Iba a responder, pero alguien me gano.

- Oye imbécil- él volteó y Cass lo derribó de un solo golpe, haciendo que me suelte por defecto y de esa manera perdiera el equilibrio y su trasero chocara con el piso antes de quedar completamente echado, Cass lo acababa de noquear de un solo golpe- Dulces sueños cariño- le lanzó un beso y me cogió de la mano mientras me sacaba a mí y a Jess de ahí.

- ¿Cómo hiciste eso? - pregunté atónita.

- Fácil- paramos cerca de los casilleros para descansar- No se lo esperaba, todavía no es un alfa, por eso no tiene toda la fuerza de su manada a su favor, y yo soy una beta completa- dijo tratando de tomar el aire- Eso fue divertido, ¿Lo hacemos de nuevo? - dijo divertida.

- Con ese cuerpito que te llevas parece que ni siquiera puedes con tu propio peso- empezamos a reír.

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