Una aventura imperfecta romance Capítulo 4

Luego de convencerla seguía una de las partes más difícil, debíamos elegir entre los dos, obviamente mas ella que yo, a la persona que estuviera de acuerdo a realizar esta fantasía con nosotros, y aunque ella es muy guapa y tiene lo suyo, porque siempre a donde va llama la atención, la siguen las miradas y nunca sobra uno que otro pretendiente, debía ser alguien de mucha confianza, que primeramente no dijera nada, y además que no fuera a querer ir mas allá; que fuera muy aseado, con experiencia y que de alguna u otra forma despertara algún tipo de deseo en ella, para que ella lograra entregarse sin ningún problema claro está, así que tarea fácil no iba a ser!

Tras ver diferentes prospectos, conocidos, compañeros de universidad y hasta vecinos, pusimos los ojos en el que en ese momento considerábamos nuestro mejor amigo, que además era nuestro jefe, y que conocía nuestra relación prácticamente desde que nos conocimos en la universidad, ya que ambos, junto con él fuimos compañeros desde que nos conocimos, iniciamos nuestro noviazgo y nos casamos. Él era soltero, al menos unos diez años mayor que nosotros, podía estar en este entonces con unos 32 años, muy alegre, sin planes de casarse y con una que otra novia para divertirse, era reservado, pero con nosotros no, siempre nos sentábamos a hablar de su noche anterior mas que todo para reír un rato y para poder tener una repetición al instante de todo lo que hacía, ya que era muy caliente! Nosotros sabíamos de él que era un fiel amante del sexo, le conocíamos la gran mayoría de sus aventuras y en otras palabras, sabíamos que no se iba a contener de la idea; así que antes de comentarle y tocarle el tema, decidimos averiguar si este amigo, la veía a ella con otro tipo de ojos o que eventualmente íbamos a poder hacer que se le despertara el deseo; sabíamos que su amistad era leal, pero no sabíamos si en algún momento había tenido algún tipo de mal pensamiento con ella, en especial por la tremenda confianza que nos teníamos y de que aunque nunca lo hubiésemos visto en acción prácticamente le conocíamos por completo.

Así que, con este pensamiento, ella empezó a llegar a la oficina un poco mas provocativa, se arreglaba un poco mas tanto con maquillaje, cabello y la ropa que usaba ya que recuerdo que para ese entonces ellos compartían la oficina, esto no quiere decir que no se arreglara, no no, en realidad Rose es una mujer en extremo coqueta y siempre se preocupa por su aspecto, siempre anda arreglada, pero había que ir un poco mas allá y teníamos que poner a prueba muchas cosas, ya que Rose era algo así como su asistente, así que no dudó en utilizar sus atributos, entre ellos sus pechos, que siempre fueron grandes y redondos, y tras su primer embarazo ellos crecieron y se quedaron de un mejor tamaño, con blusas escotadas, en ocasiones sin brasier con blusas semi transparentes y que dejaran poco a la imaginación, empezó el ataque; él, naturalmente empezó a fijarse más en ella, pero me parece que simplemente porque ya en su naturaleza trae que no se puede contener con una mujer guapa y que se le vea un poco de mas tras su ropa y bien que mal, hombre heterosexual que disfrutaba de las mujeres. Yo aportaba ideas, porque cabe destacar que el mas “alborotado” de la relación siempre he sido yo y creo que yo era el que mas disfrutaba de todo esto, además de que con todo y todo, ella hasta la fecha es mas tímida y por mas adulta y madura que sea ahora, ella en aquel entonces no podía o no sabía insinuarse ni coquetear, mucho menos con la idea de provocar deseo y sexo; así que bueno, para eso estaba yo, para dar mis recomendaciones y verlo todo desde la perspectiva de hombre y de lo que nos gusta, de todo lo que vemos en una mujer, en realidad todas las noches antes de acostarnos juntos decidíamos el “outfit” de trabajo.