12 de junio del 2001
Kharolan caminaba bajo el sol hasta un teléfono publico hoy era el cumpleaños de su hermano Christian y queria felicitarlo pero no quería hablarle por su teléfono, el cual desde el momento que huyo lo apago y tampoco quería hacerlo desde el hotel para que no pudieran rastrearía.
Al llegar a su destino encendio su teléfono y un suspiro abandono su cuerpo tenía llamadas perdidas de toda la familia Hudson. Ignoro completamente todos los mensajes de voz y texto., solo importaba el numero de su hermano, asi que en cuanto lo obtuvo lo cerro aun no lo quería apagar , coloco el pago por la llamada, cuatro segundos después la llamada fue contestada.
— ¿Bueno?.— se escucho la voz de Rory del otro lado de la línea.
— Rory, hola soy Kharolan.
— Hola Kharolan ¿Cómo estas?.
— No muy bien, pero no importa, Rory necesito hablar con Christian.
—Claro ahorita te lo paso.
— Espera— la interrumpio. — Necesito que me des tu número.
— De acuerdo.— ella le dicto su numero de telefono. — Kharolan ¿necesitas ayuda?.—Pregunto, preocupada, porque a pesar de que no conocia de hace mucho tiempo a Kharolan sabia que su voz se escuchaba extraña.
— Por ahora no, pero pronto te hablare, ahora si me podrías pasar a mi hermano
— Sí, claro fue un placer hablar contigo.— Se despidió Rory para ir al cuarto a entregarle su celular a el padre de su próximo hijo el cual acababa de salir del baño.
— Hola
— Feliz cumpleaños hermano, sabes que te amo muchísimo y te deseo lo mejor del mundo, perdón por no estar contigo el día de hoy, espero algún día lo entiendas y te explique todo. Pásala increíble futuro papá.
— Muchas gracias.— ninguno de los dos hablo. — Kharolan.
—Dime
—Porque son todas esas palabras.
— No hay tiempo.— la llamada se corto dejando con muchas preguntas a Christian.
Rory lo observaba desde la puerta, para ella era un sueño estar con el aunque sabia que solo fuera por que estuviera embarazada,.
— ¿Hoy cumples años?— pregunto curiosa, había escuchado parte de la conversación. Christian camino hasta su cajonera para sacar ropa interior.
—Si.— Rory camino hacía el y le dio un abrazo, tomándolo por sorpresa, estar cerca de ella le causaba algo que jamas había sentido con Paris.
— Feliz cumpleaños— el no respondió quedando estático. Lorelein se percato de eso. —Lo lamento.— se disculpo apartandose de el inmediatamente. Comenzo a caminar pero Christian la atrajo a el, abrazándola, el corazón de ambos latía rápidamente.
El bajo su rostro para encontrar el de ella, podían sentir la respiración uno del otro, acercaron aun más sus rostros hasta sentir un pequeño roce de sus labios. Pero el timbre del departamento son, se apartaron como si hubieran sido descubiertos.
— Ire a ver quien es— ella salio del cuarto casi huyendo, caminando hasta la puerta la cual no dudo en abrirla y ahi se encontraba aquella mujer de la cual muchas veces había sentido envidia.
— París.— La voz de ella sonó preocupada, miro para ver si Christian no venía.
— ¿Y tu eres?.— Cuestiono recorrió con la mirada a Rory, ella sabía por supuesto quien era ya que la había visto muchas veces en el campus de la escuela y en la cafetería en donde antes trabajaba.
— Soy Lorelein— Estiro su mano para saludarla, pero al no ver respuesta de la rubia la bajo.
— ¿Qué haces en el departamento de mi novio?.— cuestiono frunciendo el ceño.
— Yo..estoy— tartamudeo nerviosa-
— Paris ¿que haces aquí?— la voz de anhelo de Christian interrumpió.
—Vine a verte por tu cumpleaños— se acerco para abrazarlo, pero el por una extraña razón no sintio para nada como el abrazo que le había dado antes rory. Tomo su cara y le dio un beso, una punzada se instalo en Lorelein que rápidamente salio por la puerta aún abierta. Qué tonta había sido al pensar en que podría tener una oportunidad con Christian.
30 de junio del 2001
Patrick estaba en su habitación sentado frente a la computadora de Sasha, en este tiempo había buscado en los poblados cercanos pero no había ningún rastro de Kharolan y eso lo frustraba. Cada día al salir de la escuela salia en buscarla sin ningún resultado.
— Mi amor ¿en donde estas?— cuestiono pasando sus manos por su cabello. No había ido en busca de ninguno de los hermanos de ella, porque sabía que ella no estaba con ellos.
— Patrick necesito la computadora.— hablo detrás de el Sasha.
— Dame una hora más Sasha por favor.— Suplico y siguió buscando en ciudades un poco mas alejadas de donde vivían.
— Patrick ella regresara cuando este lista.— consoló a su hermano.
— No regresara, la lastime y si no regreso con sus padres no lo hará conmigo por eso tengo que buscarla Sasha, por favor una hora más. —ella se sentó alado de su hermano.
— Kharolan es lista no va eligir un pueblo que al menos este a cinco horas de aquí— le recomendó.
Los continuaron buscando los mapas de las siguientes ciudades que no habían recorrido.
3 de julio del 2001
Terminando de meter sus pertenencias a su maleta Kharolan la cerro, había decidido rentar un pequeño cuarto, quería guardar el máximo posible de dinero, ya había pensado buscar un trabajo en cuanto diera a luz, ya que aún seguía sin querer regresar.
—¿Necesitas ayuda?— la voz de un hombre de aproximadamente 26 años la hizo girar, vestía ropa blanca de pies a cabeza.
— No, muchas gracias.— lo corto Kharolan quien empezo a empujar con dificultad las maletas, el al ver solo tomo las maletas. — Enserio no necesito ayuda— se quejo.
— Mi mamá siempre me educo para ayudar a las personas.
— Esta bien— cedió la castaña.
— ¿Que haces aquí si acabas de salir de turno?
— Es mi vecina y necesitaba ayuda.
— Pueden ponerme atención— intervino Kharolan. La enfermera entro mientras la doctora se preparaba, Klaus se coloco a su lado.
— Necesito que hagas lo que yo te diga .— ella asistió. — Puja.
Ella comenzó a pujar, sentía un inmenso dolor recorrió su cuerpo, estaba a nada de desmayarse, sintió una mano tomando la suya y se giro de inmediato, ahí se encontraba Klaus y ella inmediatamente la tomo para apretarla.
— Ahora respira.— ella comenzó a respirar.
Diez minutos después Kharolan estaba cansada, su cara estaba roja, sudaba y sentia que las fuerzas se le estaban yendo, como iba a hacer todo esto ella sola.
— Vamos Kharolan, ya coronaste, puja por ultima vez.
Kharolan lo hizo y dejo de sentir el dolor, el sonido del llanto de la bebé inundo el cuarto, lagrimas de felicidad cayeron por sus mejillas.
— Esta...bien
— Si esta bien, eres muy fuerte Kharolan.
Unos segundos después la enfermera coloco ya limpio a la bebé en los brazos de Kharolan.
— Hola hermosa.— miro a su hija, estaba roja, su cabeza tenía un poco de cabello rubio. — Te amo, tu eres mi fuerza, mi mundo y lo mejor que me ha pasado en la vida.— le dio un beso en su frente que hizo que la pequeña se despertara, encontrando unos ojos verdes.
— Es perfecta Kharolan.— Hablo Khaus.
— Si lo es.
-o-
Una inquietud despertó a Patrick en la madrugada, se sentía extraño, tenía unas inmensas ganas de llorar de felicidad y no se explicaba el porque.
Bajo las escaleras, para ir por un vaso de agua, encontrando a Elizabeth en la cocina.
— ¿Te encuentras bien?— pregunto su hermana al verlo tan tranquilo y le parecía extraño ya que la tristeza en el rostro de Patrick era muy característico desde que se fue Kharolan.
— Por alguna extraña razón me siento feliz.
— Quizás es momento de avanzar.— El negó.
— Tengo que encontrarlas Eliz.
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