Carta Voladora Romance romance Capítulo 386

Sin embargo, esta alegría no duró mucho antes de ser sofocada por el vendaje en la cabeza de Octavia.

Alexander recordó que Estrella le llamó durante el día, pidiéndole que no se enfadara cuando viera a Octavia. Parecía que esa era la razón.

Alexander apretó los puños en secreto y bajó los ojos para combatir su ardiente odio.

Afortunadamente, sus movimientos pasaron desapercibidos ya que todos los demás estaban concentrados en el espectáculo.

De lo contrario, mañana saldría en los titulares.

Tras posar en la parte delantera del escenario, Alexander se dio la vuelta y se dirigió al final del mismo.

Estrella se inclinó cerca de Octavia y susurró:

—Señorita Carballo, Alexander vio la herida en su cabeza y parecía infeliz. Aunque lo disimuló bien, vi a través de él.

Ante esto, Octavia suspiró:

—Está bien. Sólo dile la verdad más tarde.

Ya había adivinado que Alex no estaría contento, así que estaba mentalmente preparada.

Entre bastidores, Alexander se dirigió al área de descanso.

—Alex, bebe un poco de agua —El agente le entregó una botella de agua.

Alexander le ignoró y se dirigió al área de descanso. Con una mano, cepilló todos los cosméticos que había sobre la mesa hasta dejarlos en el suelo.

Esto atrajo la atención de todas las modelos entre bastidores y de sus agentes.

—Alexander, ¿qué pasa? —Preguntó una modelo con preocupación.

Alexander seguía haciendo oídos sordos. Bajó la cabeza y todo su cuerpo se llenó de un aura aterradora.

¿Quién fue exactamente el que la hirió?

¡Cuando lo descubriera, definitivamente mataría a esa persona!

La expresión de Alexander era espantosa y anormal.

Al ver esto, su agente se puso rápidamente en medio para evitar que lo fotografiaran a escondidas. Si alguien le tomaba una foto y la difundía en Internet, sería una bomba para el público.

—Alex, ¿qué ha pasado? ¿Por qué estás tan irritado? —Preguntó su agente en voz baja mientras inclinaba ligeramente la cabeza.

Alexander respiró profundamente y consiguió reprimir las oscuras emociones de su corazón. Respondió con indiferencia:

—No es nada.

—No parece nada. Ni siquiera disimulas tu verdadero ser. Debe...

—¡Muy bien, chicos! —Antes de que el director pudiera terminar su frase, fue interrumpido por un miembro del personal.

El funcionario dio una palmada:

—Es el momento de llamar al telón. Por favor, formen fila y vuelvan al escenario de uno en uno.

Cuando el agente escuchó esto, sólo pudo tragarse lo que había querido decir. Le recordó a Alexander:

—Muy bien, Alex, ve a agradecer el aplauso del público primero. Recuerda contener tus emociones y controlar tus expresiones. No dejes que los medios de comunicación vean nada malo. Si no, tú y yo seremos criticados mañana.

—Lo sé —dijo Alexander, con los ojos brillantes.

Después, se frotó el entrecejo, retocó su expresión y se dirigió hacia la entrada del escenario.

Estrella también sabía que el telón estaba empezando. Volvió a levantar su teléfono con la intención de hacer una foto de Alexander de vuelta al escenario.

Octavia se sentó a su lado y escuchó en silencio.

Pronto, el telón terminó y todas las modelos se fueron.

Todo el público que veía el espectáculo se puso en pie y aplaudió.

Octavia recibió el apoyo de Estrella y se puso de pie.

—Sra. Carballo, ¿vamos a encontrar a Alexander? —Preguntó Estrella.

—Por supuesto, vamos —Octavia asintió.

Estrella le devolvió el teléfono y la ayudó a llegar a los bastidores.

Sin embargo, se detuvieron en la entrada del backstage, ya que pensaban esperar a que Alexander saliera.

Afortunadamente, el agente de Alexander no tardó en llegar.

El agente conocía a Octavia y se había encontrado con él dos veces antes.

—Sra. Carballo, ¿también está aquí para ver el programa de Alex? Me alegro de verla aquí —El gerente se acercó a saludar a Octavia.

—Sí, Vincent. Fue Alex quien me invitó aquí —respondió Octavia con una sonrisa.

—¿Quieres ver a Alex? —preguntó el agente, mirando a Octavia.

—Sí, Vincent. Por favor, llámalo de mi parte —Octavia pidió.

—De acuerdo, me iré ahora. Por favor, espera un momento —aceptó Vincent.

Comentarios

Los comentarios de los lectores sobre la novela: Carta Voladora Romance