Casualidad Destinada romance Capítulo 63

Y en ese momento, en la habitación de invitados, el Don Leguizamo llevaba puesto el pijama, pero no estaba acostado en la cama, sino que daba vueltas sin cesar.

Tras la prueba y el conocimiento iniciales, estaba relativamente satisfecho con esta nieta-en-ley por ahora.

Si Milagros pudiera llevar una vida armoniosa con ella, entonces el anciano se alegraría mucho.

«Ambos son jóvenes y vigorosos y están en su mejor momento, por lo que es muy posible que Isaias se quede embarazada después de un tiempo pasional de matrimonio. De esta manera, ¿no podré tener un bisnieto muy pronto?»

Con eso en la mente, el Don Leguizamo se puso muy contento, pero luego frunció el ceño.

«¡Espera! Ese mocoso suele ser muy terco y se ha mostrado reacio a casarse durante estos años. ¿Cómo es que se ha casado tan repentinamente sin informar a ninguno de nosotros? Esto no es su estilo.»

Con tales dudas en la mente, el anciano decidió a hacer una investigación más profunda cuando tenía tiempo libre.

***

Después de terminar de ducharse, Isaias salió del baño, vio que Milagros estaba sentado en el sofá, y dijo algo incómoda:

—Ya termino. Puedes ir a lavarte ya.

El hombre asintió, miró de reojo el pijama del color rosa que la mujer llevaba y la mirada se le profundizó ligeramente. Luego, tomó su propia ropa y fue a ducharse.

Al ver que la puerta del baño se cerró, Isaias dejó escapar suavemente un suspiro de alivio.

Aunque sabía que era una pura actuación para mentir al anciano, seguía estando bastante nerviosa por compartir la misma habitación con Milagros

El aura del hombre era tan fuerte y le resultaba difícil a ella ignorar su presencia.

Isaias se secó el pelo y se recostó en la cama, dispuesta a leer un rato antes de dormir, pero el sonido del hombre duchándose y el ruido del agua resonaban sin cesar a sus oídos y le impedían concentrarse en la lectura.