CUATRO ALFAS PARA LAS MAFIOSAS romance Capítulo 1

Rafaela

—Rafi! tu prometido no a llegado, el padrino dice que le llama pero que lo manda a buzón directo! ya hemos esperado casi una hora, ¿qué hacemos? —mi hermano Venus estaba al borde de la histería.

Más si él estaba así, ya pueden imaginarse cómo estaba yo?

Un gran hueco en el estómago, un temblor en las manos y una lágrima de tristeza rodaba por mi mejilla.

—Santiago dijo que me amaba, ¿ qué pudo haber pasado? ¿por qué no llegó a nuestra boda?

En una de las iglesias más bellas de la ciudad, un violonchelo tocaba encantadoramente en la boda de Rafaela Almanza y Santiago Lares, dos prominentes mafiosos que se habían enamorado, o al menos eso pensaba Rafaela la hija mayor de Rodolfo Almanza, un mafioso que había emigrado de México, el rudo hombre había amasado una gran fortuna gracias al narcotrafico.

Soy Rafaela Almanza, cumplí apenas veinticinco años, soy una chica rubia, de hermosas piernas estilizadas, mi cabello largo rosa mi pequeña cintura, mis grandes ojos azul turqueza y mis finas facciones heredadas de mi difunta madre, me convirtieron en una belleza que para la mayoría era inalcanzable o al menos eso pensaba hasta que conocí a Santiago en una junta de negocios

Santiago es socio de mi padre, lo nuestro no fue amor a primera vista, el mafioso tuvo que mover cielo y tierra para cortejarme, le tomó casi tres meses que aceptara ser su novia y después de un año por fin a llegado el día de nuestra boda, había esperado tanto éste día con mucha ilusión.

Mis hermanos me ayudaron a terminar de calzarme mi hermoso vestido de novia y el tocado, mi mejor amiga Samantha también me acompañaba, fue precisamente ella quién me dió el buquet, el último accesorio que me faltaba.

Salimos a la iglesia apurados, al llegar pensé que mi amado y atractivo prometido Santiago Lares ya me estaría esperando en el altar, pero grande fue mi sorpresa cuándo mi hermano Venus corrió a avisarme que él todavía no llegaba, esperamos por mas de una hora, y el novio no daba señales de vida.

—Venus súbete!— ordené a mi hermano, —llévanos al apartamento de Santiago! —pedí al chófer, el podía estar desmayado y yo aquí pensando lo peor de él, el corazón me galopaba a mil, la distancia me parecía eterna.

—Estás segura de ésto Rafi? mira que nos podemos llevar una desagradable sorpresa, si el desgraciado ese de tu prometido no llegó a la iglesia es por qué no merece la pena! tu eres tan valiosa y tú corazón tan grande hermana— Venus trataba de animarme.

—Tengo que verlo Venus, tengo que pedirle una explicación, si no me amaba ¿por qué demonios no rompió conmigo antes de llegar al altar? ¿era necesario humillarme de ésta forma?

Por fin llegamos al lujoso edificio, bajé cuál novia de rancho a la que han plantado, solo dios sabe cómo pude reunir el valor de llegar hasta aquí, porque yo todavía no sabía cómo podía seguir de pié, en ese momento todo me daba vueltas como si estuviera dentro de una película de angustia y desamor.

—¿que es lo que quieres aquí Rafaela? si lo que quieres es una explicación te la doy ya mismo! no me voy a casar contigo por qué no te soporto, no siento nada por ti, solo insistí en hacerme tu novio para que tú padre me aceptara como un socio mayor y me dejara trabajar en sus rutas ,pero ahora que ya no lo necesito no estoy dispuesto a sacrificarme casándome con una mujer que no me provoca nada!

—No parecías no sentir nada todas las veces que me rogabas que aceptara tener sexo contigo?— Samantha lo miró buscando una explicación, esos dos tenían bastante tiempo entendiéndose

—Mientes! Santiago no siente nada por ti que no sea repulsión y desprecio! él solo me ama a mí! yo soy el verdadero amor de su vida, nos casaremos y seremos muy felices, siempre te creíste invencible Rafaela pero ahora estás vencida, yo te e ganado, el que era tu novio ahora es mi amante

—No lo entiendo Samantha, por qué fingiste por tanto tiempo? qué ganabas con aparentar ser mi amiga?

—No es obvio querida? pasarle información a Santiago, tu me contabas todo y yo lo aprovechaba perfectamente, gracias a mí Santiago pudo independizarse de los Almanza, ahora que no los necesita más, podemos hacer nuestra vida soñada juntos

—Ya veo, ambos me utilizaron para sus propios fines, solo se les olvida algo, yo no me creo que lo puedo todo, yo lo puedo todo! y ustedes a mí no me van a vencer, son tal para cual no cabe duda, después de todo querida ex amiga hiciste mucho por mí al quitarme a semejante rata traidora de encima, ahora que es tuya no te relajes tanto por qué ya sabes los alcances que tiene, lo mismo va para ti Santiago, vigilense mucho para prevenir traiciones mutuas par de ratas!

Venus estaba apunto de sacar su arma para matarlos pero lo detuve, no lo hagas, eso sería demasiado fácil y misericordioso, mejor deja que la vida les cobre sus asquerosas acciones! volteé a verlos con asco antes de salir del penthouse que tantas veces había visitado.

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