Jardín Oceánico.
La vecindad, formada por cabañas y villas, se construyó junto al Río Elm. También estaba cerca de un lago, un centro deportivo y otras instalaciones.
El vendedor llevó a Catherine y a Freya a dar una vuelta durante toda la tarde. Cuando volvieron al lugar de ventas, el gerente se sorprendió al reconocer a Catherine, e inmediatamente le informó al jefe. El jefe llamó rápidamente a Hadley y éste transmitió el mensaje a Shaun. "Primer Joven Amo, la Señorita Jones está buscando comprar una casa".
El hombre, que estaba leyendo documentos de trabajo en la oficina, frunció el ceño. "¿Qué está tratando de demostrar? Solo fue una pequeña discusión. ¿Realmente no quiere volver a casa?".
"...".
Hadley no creía que fuera sólo una pequeña discusión. Sin embargo, sabía que debía consolar al hombre en lugar de provocarlo más. "Quizás... ¿Está haciendo una inversión? Muchas señoras ricas también hacen lo mismo".
Los rasgos tensos del rostro de Shaun se relajaron. Tras una breve consideración, dijo: "Ya que mi mujer está planeando comprar una propiedad... Diles que le hagan el mejor descuento. Hmm, un 90% de descuento".
"...".
Las comisuras de los labios de Hadley se crisparon. "Pero Primer Joven Amo, la Joven Señora definitivamente sospechará si usted hace eso. Incluso podría cambiar de opinión sobre la compra".
Shaun le lanzó una mirada molesta. "El 70% entonces. No pueden bajar más que esto".
"Mm... Claro".
Hadley se quedó sin palabras. Era la primera vez que veía que el jefe intentaba darle más descuento del que debía a un cliente.
***
En el Jardín Oceánico.
Catherine y Freya estaban muy satisfechas después de la visita. Lo único que la desanimaba era el precio, porque se salía un poco de su presupuesto. La propiedad más barata aquí costaría al menos cientos de millones de dólares.
Catherine se quedó sin palabras.
Se sentía como si le hubieran lanzado un hechizo de suerte.
¿Podría haber cambiado su destino para mejor después de dejar a Shaun?
Salió del lugar de ventas sintiéndose aturdida.
Freya no estaba mejor que ella. "Nunca he tenido tanta suerte en la compra de propiedades. ¿Crees que es posible que Shaun esté secretamente...?".
"De ninguna manera. Probablemente esté disfrutando de su tiempo con Shelley. El único momento en que piensa en mí es probablemente para encerrarme de nuevo". Ella hizo un puchero.
"Tienes razón. Quizás hasta Dios se apiadó de ti. Olvídalo. Volvamos al hotel y recojamos nuestras pertenencias. ¡Deberíamos ir al bar esta noche para celebrar tus ganancias!".
Comentarios
Los comentarios de los lectores sobre la novela: Déjeme ir, Sr. Hill
Cuando agregan mas capitulos?...
Quisiera leer más capítulos de este libro es muy bueno 🤗🤗❤❤...