Campo de golf.
¡Bam! Shaun blandió el palo de golf y la pelota voló al instante a lo lejos.
Chase, que estaba de pie a su lado, sintió la brisa que pasaba y se le puso la piel de la gallina incontroladamente.
Desde que Catherine se fue de su casa, Shaun se había estado comportando de forma hosca todos los días. Chase se estaba volviendo loco por esto.
"¿Catherine no ha vuelto todavía?".
"No es asunto mío si está viva o está muerta". Shaun dio un bufido de desprecio antes de caminar hacia otro lado. Su estómago comenzó a refunfuñar de repente.
Chase se rascó la punta de la nariz. "Sé que estabas acostumbrado a su comida, pero no puedes matarte de hambre ahora que ella se ha ido...".
"No lo haré", respondió Shaun, sonando evidentemente molesto. "Por fin puedo mantenerme en dieta ahora que ella se ha ido".
"...".
El sudor se formó en la frente de Chase. No había descubierto antes esta faceta de su amigo.
De repente admiró a Catherine por haber sido capaz de vivir con ese hombre durante tanto tiempo. Él se habría vuelto loco al cabo de unos días.
"Pasado mañana es la fiesta de compromiso de Rebecca y Ethan. Probablemente Catherine también estará allí. La familia Jones me envió una invitación. ¿Debería ir y... persuadirla?".
Shaun levantó una ceja. "Creía que era la celebración del octogésimo cumpleaños de la abuela Jones".
"No he oído hablar de eso". Chase negó con la cabeza.
Una expresión seria apareció en el rostro de Shaun. Al parecer, la familia Jones no tenía la intención de celebrar el cumpleaños de la anciana para nada.
Esa estúpida mujer. ¿Acaso no tenía miedo de volver a ser intimidada por esa gente?
"No tiene sentido preocuparme por eso. Esto es solo otro truco de ella. Espera y verás. Estoy seguro de que vendrá a rogarme antes de la fiesta de compromiso".
En cuestión de segundos, recibió un mensaje de texto de Catherine.
"Ves, aquí está". Pinchó en el mensaje para ver que Catherine le había enviado los comprobantes de tres transferencias para ingresar de sesenta mil dólares en su cuenta.
Su apuesto rostro se congeló. Chase se acercó para echarle un vistazo. Confundido, comentó: "Está gastando mucho para recuperarte de nuevo".
"Sí". Los rasgos tensos de Shaun se relajaron.
Debía ser otro truco suyo.
Esta mujer seguía escribiendo al otro lado del celular.
Esperó a ver qué iba a decir.
Veinte segundos después, recibió otro mensaje de texto.
[Sesenta mil dólares incluyen los gastos del hospital y la comida. Estoy segura de que es más de lo necesario, pero hoy me siento amable y te regalo un poco de propinas].
Una sonrisa peligrosa se extendió por la cara de Shaun. Simultáneamente, las venas de su frente se abultaron.
Vaya, vaya, vaya. Esta mujer tenía el coraje de un león.
"...".
Chase, que había echado un vistazo al mensaje, no se atrevió a comentar nada.
Pensó que Catherine era impresionante.
Probablemente era la única persona en este mundo que se atrevía a desafiar a Shaun.
Sin embargo, no pudo evitar pedir clemencia de su amigo para la hermosa e inocente dama.
"Esto debe ser un truco más para atraer tu atención. No solo está tratando de sobornarte con dinero, sino que mira su nombre de usuario. 'Shaunerine', qué romántico".
Shaun se sintió mejor consigo mismo al escuchar esto y reveló una sonrisa sarcástica. "¿Y qué? Ya no importa. Si puede arrodillarse delante de mí y suplicarme por tres noches...".
Sin embargo, antes de que pudiera terminar la frase, Catherine cambió de repente su nombre de usuario de WhatsApp a un "Nuevos comienzos". Incluso cambió su estado a: [Solo quiero tratarme mejor a partir de ahora].
"...".
***
Pronto llegó el octogésimo cumpleaños de la abuela Jones.
También era un gran día para las familias Jones y Lowe.
El Hotel Gran Bowin estaba situado en el centro del distrito comercial. También era el único hotel de siete estrellas de todo Melbourne.
Solo los magnates de Melbourne podían celebrar banquetes en este hotel. Simbolizaba el poder y el estatus de las personas en la ciudad, ya que no cualquiera con dinero podía reservar una cita allí. Esa noche, tanto la familia Jones como la familia Lowe habían gastado una increíble cantidad de dinero para reservar el Jade Exquisito, la sala de banquetes más espléndida del hotel.
Catherine estaba de pie en el vestíbulo con la tarjeta de invitación en sus manos. No pudo evitar soltar un suave suspiro.
En algún momento del pasado, su madre le había prometido organizar su boda con Ethan allí mismo, en ese hotel.
Pues bien, la ceremonia de compromiso se había celebrado como acordado y Ethan seguía siendo el novio. Sin embargo, la novia ya fue diferente.
Entró en el salón de banquete, con el vestido blanco que llevó a la fiesta de cumpleaños del Viejo Amo Harrison la última vez. Un grupo de periodistas la esperaban en la entrada.
La emboscaron en cuestión de segundos.
"Señorita Jones, ¿no dijo que la familia Jones la había encerrado y torturado? ¿Por qué ha venido aquí para asistir a la fiesta de compromiso de Rebecca y Ethan?".
"¿Es porque los Jones no le maltrataron antes? ¿Fue toda una invención por su propio interés?".
"...".
Catherine no era una tonta. Supo al instante que los periodistas habían sido llamados por la familia Jones. Sin duda, los habían sobornado y les habían dado instrucciones sobre lo que debían decir.
Ella había previsto que esto sucediera, por lo que reaccionó con calma.
"Hoy es el octogésimo cumpleaños de mi abuela. Estoy aquí para celebrar su cumpleaños".
"¿De verdad? No hemos oído nada sobre eso. Solo sabemos que hoy es la ceremonia de compromiso entre los Jones y los Lowe. El vestido que llevas es espectacular. Si no me equivoco, es un vestido de edición limitada de la colección de otoño de una marca de lujo. ¿No dijiste que los Jones te trataron horriblemente?".
Una sonrisa sarcástica se dibujó en el rostro de Catherine. "Bueno, ¿cuánto les ha pagado la familia Jones para avergonzarme hoy?".
Comentarios
Los comentarios de los lectores sobre la novela: Déjeme ir, Sr. Hill
Cuando agregan mas capitulos?...
Quisiera leer más capítulos de este libro es muy bueno 🤗🤗❤❤...