Déjeme ir, Sr. Hill romance Capítulo 92

La frustración invadió a Shaun de repente.

Mald*ta sea. ¿Tenía que sonar Catherine tan alegre porque iba al registro civil?

A no ser que estuviera encantada porque por fin podría volver a encontrarse con él.

Debía ser por eso.

La otra noche, ella se había ido de una manera imprudente. Debió de arrepentirse de su decisión al pensarlo mejor, pero a ella le daba demasiada vergüenza reconocer sus errores.

Tal vez ella estaba inventando otra excusa para invitarlo a salir. ¿Él debía hablar en un tono más gentil cuando se encontraran más tarde?

Después de todo, él no había tenido una buena comida desde que ella se mudó.

Muy bien entonces, quizás él debería comprarle una tarta en el camino.

Él compró un trozo de tarta de queso antes de ir a reunirse con ella.

Al llegar al registro civil, Shaun se dio cuenta de que Catherine llevaba el vestido blanco largo debajo de una chaqueta del color beige que él había comprado para ella la última vez. La luz de la tarde que caía sobre ella iluminaba perfectamente su piel tierna y sus delicados rasgos.

Los sensuales y finos labios de Shaun se curvaron en una ligera sonrisa.

Ella se había arreglado solo para venir al registro civil. ¿Realmente quería el divorcio o estaba tratando de recuperar su corazón? Él ya estaba seguro de la respuesta.

Se dirigió hacia ella con grandes pasos, con la tarta de queso en la mano. Los ojos de Catherine brillaron al verlo. "Vamos".

Entonces, ella se dio la vuelta y se dirigió a la oficina de registro.

"...".

Shaun se quedó sin palabras.

Esto no era lo que él esperaba.

"Ehhh espera".

Él frunció el ceño. Esta mujer era realmente insensible. ¿No veía ella el trozo de pastel que él tenía en la mano? Evidentemente él había dado un paso atrás para perdonarla.

"Catherine, ¿quién crees que soy? ¿Crees que puedes empezar y terminar un matrimonio conmigo cuando quieras? Te dije que te mantuvieras alejada de mí en aquel entonces, pero seguiste molestándome para que me casara contigo".

"Recuerdo haberte dicho que nuestro matrimonio está ligado a un contrato de tres años. Si no te comportas bien, no te dejaré ir ni siquiera después de diez años".

Catherine empezó a sentir que le dolía la barbilla. Indignada, le gritó: "¡Ni siquiera te gusto y parece que te molesta mi presencia! Estar conmigo te disgusta, así que ¿por qué no terminamos con eso de una vez?".

"¿Es que todavía no lo entiendes?". Shaun entrecerró los ojos mientras hablaba con dominación: "Me has enfurecido. Eres la primera mujer que se atreve a desafiarme. ¿Crees que te dejaré ir tan fácilmente?".

Catherine tuvo ganas de llorar, pero no le salieron las lágrimas. ¿Había alguna pastilla en el mundo que pudiera curar el arrepentimiento?

"¿Qué puedo hacer para que cambies de opinión?".

"¿Quieres el divorcio? Vamos a ver". Él movió las comisuras de los labios en una sonrisa pícara. "Sé mi chef personal por tres años y aceptaré considerar tu petición".

Ella frunció el ceño mientras una sonrisa sarcástica se extendía por su rostro. "La ley dice que una pareja casada puede solicitar el divorcio y se divorciarán automáticamente después de vivir por separado durante dos años. Como no quieres divorciarte hoy, puedo seguir esperando. Dos años pasarán en un abrir y cerrar de ojos. Tengo muchísima paciencia".

Después de decirlo, ella apartó la mano de él de su barbilla y se dio la vuelta para marcharse.