"Das un paso más hacía idiota mi y le entierro esta cosa en la garganta."
La niña asevera con frialdad.
Reconozco su coraje y su tono de voz.
Es casi el mismo que usé cuando llegué al sótano de Rey.
"No seré más el juguete de nadie..."
"No quiero que nadie más me usé para complacerse!"
La hoja afilada del bisturí se me clava un poco y me viene una idea...
Podría dejarla que me mate y acabar con mi tortura.
Además sería un castigo perfecto para Rey.
Pero si en verdad cariño viene por mi como prometio para llevarme con Él?
No se...
Rey intenta moverse lentamente hacía la niña.
Ella sigue rodeándome con su brazo y el bisturí.
"Si te acercas hijo de puta le rebanaré la garganta tan rápido y después me hare lo mismo para acabar con este suplicio de ambas!"
"Hazlo."
Digo con voz resignada.
"No importa, hazlo pequeña niña, líbrame de esta vida."
La niña tiembla porque tal vez no esperaba que dijera eso.
Esta parece una buena oportunidad para poder escapar de Rey.
"Callate tonta, este estúpido de enfrente no dejará que te haga daño."
"Pero si me dejará ir si tú vas conmigo."
"Y tu idiota, donde intentes algo más le rebano la... aaaayyyyy!"
La niña grita, siento que el bisturí me rebana la clavícula y el hombro mientras que la sangre comienza su cálido descenso por mi piel seca.
"Eres una estúpida niña que entenderá de una vez por todas que no debe de escaparse más!"
La niña fue sorprendida por la velocidad de Rey cuando con una mano tomó su tobillo arrastrándola lejos de mi.
"Princesita!"
Grita Rey cuando me mira mi hombro que se tiñe de rojo al igual que las sabanas de la cama.
Mierda, se va enojar Rey por haber manchado su cama con mi sangre!
Le da un puñetazo a la niña dejándola inconsciente tirada en el suelo y corre para atenderme.
"No te quedes ahí, vamos al diván para que te limpie la herida y te cosa la piel Princesita, ahora!"
Tomo su mano y veo a la pobre niña tirada en el suelo con un hilo de sangre cayéndole de su nariz.
Es una criatura más pequeña que yo esta jovencita.
Y esta tan maltratada, delgada, sucia y triste.
Estaba decidida a todo para escapar de aquí.
Rey me sienta desnuda en el diván mientras que observo el pequeño rastro de gotitas de sangre que dejé detrás de mi.
"Ay mi Princesita, esa maldita niña te lastimó mucho!"
Rey me pone compresas en mi hombro y lo oigo buscar cosas en este especie de consultorio.
Me limpia con agua oxigenada que arde muchísimo pero no hago ningún gesto de dolor.
Debo permanecer tranquila para que Rey no se enfade más con la pequeña escapista.
Cuando esta cosiéndome con cuidado la herida, después de ponerme una especie de sedante tópico se escucha un ruido por fuera de la puerta.
"Carajo, esa niña no entiende!"
"Rey, déjame tranquilizarla yo, por favor."
"No mi princesa, ella ya te ha hecho mucho daño."
"No quiero perderte, no soportaría que te hicieran más daño."
Más daño?
Lo que dice Rey no refleja lo que hace.
Si quisiera que estuviera sana y feliz no me hubiera secuestrado y mantenido un puto año en ese sotano con esas malditas princesas.
"Rey..."
Digo con tono más firme a la vez que me levanto para poder ponerme la bata de hospital verde que esta colgando en un percha.
"No Princesa, no dejaré que te lastime de nuevo!"
"Esta asustada Rey como yo estuve hace mucho tiempo..."
"Es una chiquilla estúpida que jamás debí de haber aceptado cuidar para el maldito Chef."
Espera...
Cariño golpeó a esa niña de afuera?
Ella es su juguete?
Osea que yo soy solo una más para cariño?
Algo dentro de mi se quiebra en pedacitos.
Tal vez haya sido mi última esperanza.
"Yo puedo controlarla Rey, te lo prometo y no me dañara."
Rey se sorprende por mi rudeza de palabras y abre la puerta.
"Ahora, dejarás de hacer tu ridículo intento de escapar y lastimar a otros porque lamento decirte que de aquí nadie sale."
"Creeme, puedes pasarte un año en ese sotano de allá abajo sin comida ni agua, pero entonces solo morirías sin razón."
"Dame ese maldito bisturí niña, que bastante me duele el hombro por tu culpa."
Extiendo la mano hacia la niña que intenta ponerse de pie con dificultad mientras que sus manos toman el marco de la puerta.
"Mátame...por favor.. mátame."
Se lo extiendo y ella me ve con ojos temerosos.
Toma el vaso y lo bebe con ansiedad, me lo da y me pide más.
Cuando camino de nuevo al baño la escucho preguntar.
"Porque haces esto?"
"Porque no te uniste a mi para que ambas pudiéramos escapar de ese hijo de puta que te estaba violando?"
"Acaso tienes síndrome de Estocolmo?"
Suspiro porque no se si puedo confiar en esta pequeña niña maltratada y además necesito que conteste mis preguntas.
"Nunca le ganaríamos, tu lo viste, Rey es muy rápido y fuerte."
"Una vez alguien intento sacarme de aquí..."
"Y presencie como el doctor y otra estúpida mujer junto con Rey la violaron en grupo."
"Eso es lo que quieres tú?"
La niña toma mis manos con sus huesudas y debiles manos para que la mire a los ojos.
"No quiero volver a la tortura que me da cariño, es una bestia infame..."
"Él me ha...Él..."
Llora de nuevo y no creo que estemos hablando del mismo hombre.
"Por favor ayúdame a morir, no puedo regresar a Él, no quiero, por favor ayúdame!"
No puedo continuar con mi interrogatorio porque Rey regresa y me pide que quite a la niña de la cama.
Quita las sabanas rosas de las putas princesas y las reemplaza por unas sabanas azules simples.
Deja nna manta delgada en la orilla de la cama junto con una almohada sencilla blanca.
Todo muy impersonal.
"Princesita continua, quiero escuchar lo que haz dicho, repítelo ante mi."
"Si Rey."
"No puedes gritar ni exigir comida o habrá castigo."
"No debes de hacer ruido por la noche y debes de agradecer siempre que alguien te de agua o pan."
"Debes de responder siempre a lo que te pregunte mi Rey."
"No intentes forzar de nuevo las cadenas o habrá azotes muy duros para ti."
"Debes de permanecer quieta, tranquila y sumisa."
"NO HAY ESCAPATORIA de este lugar, eso apréndelo de una vez y no serás infeliz."
"No morirás porque tienes un propósito."
"Y ese es ser un Dulce Juguetito."
***By Liliana Situ***
Valoro mucho tu opinión.
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