Dulce Juguetito romance Capítulo 20

Permanezco sentada en silencio teniendo acaloradas discusiones en mi mente sobre lo que fresita me dijo.

Cariño es más sádico y más hijo de puta que Rey.

Rey al menos siempre me dió de comer...

Cuando me portaba bien.

Rey al menos me permitió ir al baño...

Cuando podía levantarme para ir al baño claro está.

Rey al menos no me ha torturado tanto...eso creo yo.

De repente me siento como si estuviera viviendo en un palacio y que me comparta con otras personas en esta casa ya no me parece tan malo.

Después de escuchar lo que la niña me dijo rogaré quedarme para siempre con Rey.

Además de que espero que no sea una moda contagiosa la de cariño.

No quiero que Rey comience su propio harem de dulces juguetitos.

Dejé a la niña lo más comoda y limpia posible en ese sotano lúgubre, con una tenue luz encendida para que ella pudiera ver donde pisaba en el suelo.

Se quedó acurrucada lo mejor que pudo abrigada con la frazada limpia que le ofrecí.

Mi mente me dice que soy una estúpida, que no debí ni debo confiar en nadie.

Todos pueden ser igual o peor que cariño, tengo los precedentes muy a la mano.

El famoso médico y la doctora que violaron de forma sádica a mi amiguita.

Como estará ella?

Espero en verdad que siga con vida...

Dios, yo que que anhelaba en verdad que cariño me "rescatara" de mi estancia con Rey.

Esta revelación solo me da más fuerzas para poder escapar de esta prisión.

Y ahora tengo un aliciente más, llevarme a fresita conmigo.

Tengo que idear un plan para tener dinero para poder huir a otro país y que nadie nos vuelva a encontrar nunca más.

Tengo mucho que pensar por lo que me hago ovillo en el sillón con una frazada nueva para pensar mucho que podría hacer.

Lo primero que debería saber es donde Rey guarda su dinero en efectivo, cuanto tiene y si tiene cuantas en el banco.

Tareas nada sencillas, pero con algo de astucia de mi parte lo lograré averiguar.

Lo segundo será rogarle a Rey porque fresita se quede con nosotros.

No importa si tengo que sacrificar mi cuerpo por ella, la pobre ya ha sufrido mucho.

Aunque...

Como puedo saber que lo que me dice es cierto y no me esta engañando para que tenga empatía con ella?

Paso mis manos por mi cara y mi cabello alisándolo.

En este juego de la confianza parece que estoy perdida.

Rey me ama tanto que dice que me matara para que nadie más me tenga.

Eso es amor enfermizo, tal cual.

Solo estuve una vez con cariño, no conozco como es.

Tal vez por eso Rey estaba tan renuente a dejarme con Él a solas en primer lugar...

Porque no había pensado eso?

Rey me dijo que me amaba varias veces cuando cariño estuvo conmigo, incluso intentó atrasar nuestro encuentro íntimo.

Ay maldita sea, porque todo se tiene que complicar de manera tan rápida?

No se a quien creerle, a quien no creerle, que creer...que debo creer.

Después de mucho divagar en mi mente he decidido no confiar en nadie hasta que tenga pruebas por mi misma.

Tengo que ser cautelosa con lo que digo y hago para que esta niña no me delate con Rey.

Porque también puede ser una espía que Rey haya contratado para que no intente de nuevo escapar.

Aunque me parece algo retorcido que alguien acepte esta clase de maltrato por dinero...

No sé, pero no debo ni puedo confiar en nadie más que en mí.

Debo de volver a intentar salir de este lugar.

La puerta se abre sobresaltándome porque estaba tan enfrascada en mi lucha mental conmigo misma que no escuché llegar a Rey.

Pero no está solo, alguien más lo acompaña.

Es un hombre joven que jamás había visto.

Me alegro de estar cubierta con la frazada pues solo traigo la sudadera larga...

No traigo ropa interior.

"Oh princesita, aquí estás."

"Déjame presentarte a mi princesa amigo."

"Princesa, Él es mi amigo, el practicante."

Este joven frente a mi con cabello café muy claro ondulado, tez pálida, ojos miel, nariz pequeña y labios pequeños me mira como examinándome por debajo de la frazada.

Su enorme y cálida mano contrasta con su cuerpo delgado sin tanto músculo como Rey.

Rey me carga del sillón y me sienta en su regazo con todo y frazada.

"Ella ya está entrenada y adiestrada para satisfacer mis más oscuros deseos..."

"La niña que tal vez te pueda interesar está en el sotano."

"Es seguro bajar mi princesa?"

"Si Rey."

El practicante alza las cejas porque se que puede notar mi sumisión ante Rey.

"Demonios, no bromeabas maldito afortunado!"

"Ella es en verdad hermosa y sumisa..."

"Te tengo un poco de envidia ahora amigo..."

El practicante sonríe de lado malévolamente.

"Princesa, puedes venir un momento por favor al sotano?"

"Si Rey."

Mi corazón palpita locamente y siento que se me subio hasta la garganta.

Habré hecho algo malo?

Rey me castigará?

Bajo descalza los escalones para llegar hasta donde esta Rey con la cabeza gacha.

Dócilmente digo cuando llego hasta estar frente a Rey.

"Aquí estoy Rey, hice algo malo?"

El practicante me mira de arriba a abajo y Rey se ríe un poco.

"Ves niña, así debes de ser, sumisa, obediente y en todo momento servil."

"Es tu única función, servirme en mi casa y complacerme en mi cama!"

El practicante intenta acercarse a la niña que insiste en hacerse ovillo pegada a la pared.

"No te me acerques, le perteneci a cariño, él te destripara si me tocas!"

El practicante se ríe por sus palabras mientras que Rey sigue mirándome.

"Princesa, puedes alzar la mirada."

Obedezco y miro los ojos de Rey.

"Hiciste bien en enseñarle modales y limpieza a esta niña."

"No parecía gustarle lavarse ni cambiarse de ropa ante mi."

"De ahora en adelante te encargaras de entrenar y educar a esta niña."

"Tu eres perfecta mi princesa y por lo que he visto a todos les ha gustado tu forma de ser."

Rey me abraza por la cintura colocándome frente a Él.

"Nadie me educará, no lo comprenden?"

"Cariño no necesita que nos eduquen, solo somos sus pertenencias, sus juguetes."

"Cuando nos usa nos limpia!"

El practicante y Rey se miran para después reir.

Fresita y yo nos miramos extrañadas porque no sabemos porque se rien.

"El chef ya no te quiere, dice que estás defectuosa."

"Me ha hecho un traspaso de tu propiedad y le platique a mi buen amigo el practicante de tu situación."

"Además, para mi solo hay una sola princesa."

"No necesito mas juguetitos con ella me basta y me sobra."

***By Liliana Situ***

Valoro mucho tu opinión.

Historial de lectura

No history.

Comentarios

Los comentarios de los lectores sobre la novela: Dulce Juguetito