El Amor De Antonio romance Capítulo 188

Al terminar la asamblea empresaria, Clara y Alejandra se cruzaron los brazos para salir de la sala de conferencia. Acababa de pasar por la puerta, fueron detenidas por unas mujeres.

Después de mirarlas bien, encontraron que eran del Departamento de Propaganda.

Excepto las colegas del mismo departamento, cuando encontraron a las de otros departamentos, solo saludaron inclinando la cabeza, así que conocieron sus caras, pero no supieron sus nombres.

A pesar de que estas mujeres vinieron con malas intenciones, Clara puso una sonrisa en su cara, y dijo-¿tenéis algunas cosa que os puedo ayudar ?

Las mujeres la miraron con la mirada maligna, y dijeron desdeñosamente, -Tienes un rostro normal, antes pensamos que eres tan guapa como los ángeles.-

Al escuchar esto, Alejandra arrugó su entrecejo, -Oiga, ¿no sabéis que criticar el aspecto de los demás es descortés?-

-Ja, con ella, no necesito hablar cortesanamente.- una mujer dijo indiferentemente y desdeñosamente.

-Es verdad. Excepto la amante del director ejecutivo, no tiene otra cosa especial.-

-Pues, no te estoy de acuerdo. ¿Cómo es posible que es tan inútil? Puede ser la amante del Director Ejecutivo, porque es una experta en seducir a los hombre. ¿No?-

-Jajajajaja.- las mujeres rieron cubriendo sus bocas con sus manos.

-¡Vosotros...!- Alejandra estaba tan enfadada que iba a pelear con ellas.

En aquel entonces, Clara le impidió, -Alejandra, no pelees con ellas, porque esto te degradará.

-Tienes razón. Estas perras solo saben ladrar en vano. Excepto envidiar y burlarse de los demás, no saben nada.- Alejandra dijo irónicamente.

Al escucharlo, las mujeres estaban enojadas, -¿A quién te refieres?-

-A las personas quien me responden.- Alejandra levantó su barbilla de forma provocativa.

Clara tocó su frente, ya le había dicho que no chocar con ellas, pero ¿por qué no tenían el síntoma de cesar?

-Vamos a rasgar su boca.-

Las mujeres arrastraron el pelo de Alejandra.

-¡Locas!!!!!- Alejandra gritó en voz aguda, pensó que pelarían todo su pelo, y no pudo controlarse a llorar.

Viendo esto, intentó a impedir a las mujeres, dijo, -Soltad vuestras manos. Si no, pediré al Director Ejecutivo a despediros.-

Pero estas mujeres no tenían en cuenta su aviso, seguía tomando el pelo de Alejandra, y la rascaron con sus uñas.

Clara se enfadó mucho, gritó, -¡Parad!-

En aquel minuto, todos estaban silenciosas.

Esas mujeres fueron asustadas por su entonación, y soltaron sus manos.

Aprovechando esta oportunidad, Alejandra las empujó, y salvaguardó su pelo. Pero, olvidó que estaba llevando los zapatos de tacones altos, la reacción energética le hizo caer de espaldas sobre el suelo.

Clara lo vio, gritó, -¡Alejandra!-

“Dios mío, ¿por qué cada vez soy la más desafortunada?”

Con este pensamiento, Alejandra cerró sus ojos para recibir este dolor.

Pero lo que le tocó no era el dolor, sino un pecho suave, mientras que un olor agradable de mente entró en su nariz.

Este olor familiar aceleró el ritmo de su corazón.

Cerró sus ojos, y no se atrevió a ver a la gente quien la había salvaguardado.

-Director Ejecutivo.-

Oyó las voces espantadas de las mujeres.

Y luego, fue la voz de Clara-Guillen, afortunadamente vienes. Si no, temo que Alejandra se convertirá en una tontita por culpa de caerse.