EL CEO Y LA HUÉRFANA romance Capítulo 67

Después de una comida bastante amena, él le contó de algunos proyectos comerciales que tenía en marcha y ella le comento de las clases en línea que ya había pasado su primer etapa de exámenes y que le había ido muy bien, terminaron su comida sin novedad, él la llevo a un parque de diversiones, se subieron a la rueda de fortuna, la montaña rusa y otras atracciones.

Al bajar de los juegos mecánicos pasaron delante de los puestos de juegos. Un vendedor se acercó a ellos y le entrego un aro a Luisa y le comento – el primer lanzamiento va a cuenta de la casa por ser una joven tan hermosa, vamos pruebe suerte - 

Luisa le divertía ese tipo de juegos y accedió aventó su aro hacia un conjunto de botellas, el punto era que tenía que insertar el aro en una de ellas y cada una de las botellas tenían un número según el número era el premio que ganaba.

Al lanzar fallo al ver su cara de decepción Julián le sonrió y le dijo al vendedor que le diera una ronda de aros  y último aro resulto con premio era una pequeña alcancía de un puerquito, Luisa estaba tan contenta por haberse ganado el premio que estallaba de felicidad por el premio tan económico que había ganado.

Pasaron a siguiente juego era el de un rifle de aire comprimido donde al igual que el anterior estaban numerados los premios y había varios círculos al cual tenían que disparar para ganarse un premio Luisa Jugando le indico a Julián, ganare ese oso de peluche para ti.

Tiro sus 10 oportunidades sin logar ganarse nada se desilusionó y comento – vámonos - él sonrió y le indico - es porque el que debería ganar el premio soy yo para la bella cumpleañera – el compro otra ronda de tiros y tiro del gatillo y consiguió ganar el premio que le gustaba a Luisa en el octavo tiro.

- te lo dije lo conseguí para ti – ella se echó a reír y le entregaron el oso que tanto le gusto.

Ella abrazo a Julián, se sentía como una chiquilla con su juguete nuevo y el sin pensarlo mucho la abrazo, la cargo y le dio un beso en los labios un poco demandante y dominante. Ella por la alegría que desbordaba se dejó llevar y le devolvió el beso sin pensar en nada.

Los dos estaban pasando una tarde muy agradable, como todavía tenían la fiesta de la noche no pasaron mucho tiempo en el parque y acudieron a centro comercial, la intención era comprar un vestido hermoso para que lo estrenara en la noche pero al entrar en la tienda de ropa se encontraron con Olivia.

- Julián hoy no quiero tener discusiones con nadie me estoy pasando una tarde tan agradable que no quiero problemas vámonos ahí está tu querida novia –

- jajá- Julián se echó a reír pero accedió a salir de ahí – Luisa tú eres mi novia que no se te olvide – él se acercó a ella y le dio un beso en los labios profundo.

- esto es para que no se te olvide de quien eres novia – dijo el con una sonrisa en la cara y ella se quedó callada, no sabía que decir o como proceder, solo pensó es el segundo del día.

- vamos iremos a otro centro comercial para comprarte tu regalo – dijo y la toma de la mano

Pasaron a otra tienda de ropa, no tan exclusiva como la anterior se midió tres vestidos escogidos por Julián, al final opto por un vestido muy juvenil un poco entallado al cuerpo sin ser tan revelador pero con el cual se veía hermosa.

Cuando salió del probador y el la observo se acercó a ella y le dio un beso en los labios y le indico –te vez hermosa – ella estaba sorprendida pero se quedó callada.

Compraron unos zapatos a Juego y salieron del lugar con todos los atuendos que se había medido. Salieron y entraron a un salón de belleza, para que la peinaran y le pusieran un poco de maquillaje al terminar salieron del centro comercial rumbo al estacionamiento.

Justo saliendo del centro comercial se toparon con Adrián Conti él llegaba con su novia.

- Señor Rivera que gusto en verlo, señorita ¿cómo está usted?- dijo Adrián con la sonrisa en la boca, al tiempo que los saludaba de mano.

- muy bien señor Conti, que agradable coincidencia - dijo Luisa

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