El corazón de Señor Peréz romance Capítulo 104

-El señorito vino a buscar a Noan por otras cosas, no tiene malas intenciones. Pero en realidad vino aquí esta vez por usted, señora.-

Hedi sonrió cortésmente a Mauren, -En ese momento, el señorito ni siquiera terminó la comida, dejó sus palillos y se fue.-

Después de ver que Senda ya estaba un poco lejos, Hedi se acercó a Mauren y bajó la voz.

-He trabajado con el señorito durante tantos años, nunca había visto que él reaccionó con tanta ansiedad ante nada. Solo por usted, señora.-

-Por eso, señora, tiene que saber que el señorito se preocupa mucho por usted. Cuando regrese a casa, no se enfade con él.-

De hecho, el señorito era realmente paciente frente a la señora y su temperamento era lo suficientemente bueno.

La señora no sabía cuáles serían las consecuencias si los demás enfadaban al señorito.

Ella… tuvo mucha suerte.

-Ya me voy.- Miró a Liz que estaba detrás de Mauren, Hedi sonrió.

Liz estaba temblando de miedo, escondiéndose detrás de Mauren, sin atreverse a asomar la cabeza.

Hasta que Hedi alcanzó a Senda y los dos entraron en el ascensor, Liz suspiró de forma aliviada.

-Vosotros dos…- Mauren la miró con una mirada de confusión.

-¡No pasó nada entre nosotros! Mauren, ¡no nos malinterpretes!- Liz negó de inmediato.

-¿Dije que pasó algo entre vosotros?- Pero al ver su mirada ansiosa y tímida, algo debía haber sucedido.

Liz se mordía los labios y bajó la cabeza, se quedó callada, su rostro todavía estaba sonrojada.

En realidad, no pasó nada. Pero ese chico la garró y apenas…apareció a la vista de Mauren y el señorito Senda en esa postura con ella…

¡Dios! ¡Incluso ella misma sintió que no podía explicar que no había pasado nada entre ellos!

-De verdad, él y tú…- Cuando bajaban las escaleras, Mauren todavía la miraba con mucha duda.

Liz la miró con fiereza, -¡No! ¡Dije que no! ¡Nunca vuelvas a mencionar este asunto!-

¡Estaría bien si ella nunca volvía a ver a ese hombre llamado Hedi!

Pero, ¿podía dejar que este asunto pasara?

-Pero, te sonrojas así. Seguramente Xavier y Noan te preguntarán más tarde.-

-Yo… solo estaba preocupada por ti, y corrí un poco rápido. Por eso, mi respiración está inestable y me sonrojo.-

Liz casi iba a llorar por sus palabras, sacudió su brazo, -Querida Mauren, no hables más de eso, y no lo digas a Xavier y Noan.-

“¡Hoy es simplemente un día de desastre!” Liz pensando.

Al ver que ella estaba tan ansiosa que sus ojos su pusieron rojos, Mauren dejó de burlarse de ella y asintió.

-Está bien, no hablaré de eso.-

Apenas Liz dio un suspiro de alivio, pero escuchó a Mauren diciendo, -Pero de hecho, Hedi es bueno, es guapo y rico…-

Como el asistente especial del señorito Senda, era imposible no tener dinero.

-¡Mauren!-

-Vale, vale. Ahora, de verdad no hablaré de eso. Pero realmente puedes considerarlo a él a ver si puede ser tu novio.- Este chica realmente no aguantaba nada de los bromas.

-Mauren…-

-Ya llegamos, ¿todavía quieres hablar esto?- Mauren sonrió de forma astuta, pero Liz no podía hacer nada.

Porque realmente llegaron a la habitación de Noan y Xavier.

Hacía un rato, después de saber que era el señorito Senda quien estaba con Mauren, Xavier regresó aquí de inmediato.

Y él estaba arreglando todo el desorden de la habitación.

Tan pronto como Mauren y Liz entraron por la puerta, vieron un desorden por todas partes.

-¿Lo hicieron?- ¡Desordenaron las maletas de Xavier y Noan, y la ropa estaba tendiendo en el suelo!

¡Era indignante! ¡No respetaron las reglas!

-Ellos van a recibir su castigo, no pasa nada.- Noan miró a Mauren, -¿Estás bien?-

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