El corazón de Señor Peréz romance Capítulo 178

Sonó un timbre claro.

Mauren se sorprendió e inmediatamente se retiró a la puerta y sacó el teléfono.

Era llamada de Liz...

En las primeras horas de la mañana, antes del amanecer, a esta hora le llamó, por lo que Mauren se sintió inquieta en su corazón.

Contestó el teléfono -Liz, ¿qué pasó?-

En el otro lado de la llamada, se oyó su voz ansiosa -Mauren, a Roberto le sucedió algo mal. -

...Mauren volvió la cabeza para echar un vistazo hacia adentro de la puerta.

Senda siguió poniéndose en pie al lado de la cama y ella no sabía de qué estaba hablando con el médico.

Parecía que el daño más serio para Bita era su barbilla y nada más, y mucho menos no había amenaza de su vida.

Ella solo vaciló un poco y luego salió de la sala de tratamiento médico.

Justamente, vio al abuelo y Maya salir desde la sala vecina.

-Maya, ¿cómo está abuela?- Ahora se preocupaba tanto que no saludó al abuelo.

Contestó levemente -No hay nada grave por el momento, pero su cuerpo está demasiado débil, y no sé cuándo va a despertarse. -

-¿Habrá alguna emergencia ?-

-No. -

-Muchas gracias.- Después de asegurarse de que la doña no tenía problema, Mauren en seguida habló con el abuelo -Abuelo, en mi escuela hay algo muy urgente y tengo que irme primero. -

El abuelo no dijo nada porque en ese momento no le importaba radicalmente quién quisiera irse o quedarse.

Mauren sabía que como la doña estaba así, el abuelo estaba de mal humor y no le parecía rara de su ignorancia.

Asintió la cabeza hacia él y volvió al exterior de la sala de Bita.

Al principio quería saludar a Senda pero él todavía estaba escuchando al médico.

No era bueno para molestarle, entonces le mandó un mensaje y luego caminó hacia el garaje inmediatamente.

Había unos conductores de turno en el garaje para la comodidad de recoger al propietario en cualquier momento.

Después de su salida, Pilar y Nerea se acercaron al abuelo en seguida.

-Abuelo, ¿cómo está abuela? ¿Ya podemos entrar a verla?-

Inmediatamente dijo Maya -Hace poco los señores Victor y Camisero han entrado para visitarla. Ahora déjenla descansar tranquilamente.

Si todavía no estaba despierta, para ella no era nada la visita.

La clave era que todo el que entrara debería estar desinfectado, lo que aumentaría la carga para los auxiliares médicos y enfermeras que estaban adentro.

Pilar asintió la cabeza sin decir nada.

Sin embargo, mirando adonde salía Mauren, Nerea se sintió muy indignada.

-Por lo general abuela le quiere tanto, no pensó que ahora pasa algo mal y ella ni siquiera la miró y se fue así. -

La mirada de Pilar también era fría, aunque su expresión no era tanta como Nerea, también era desdeñosa.

-A pesar de todo, no es hija de la Familia Pérez, ¿todavía esperas que sienta pena por nuestra abuela? Ella no es nuestro pariente en absoluto.

-Niñas, regresan para descansar temprano. - Casimiro salió desde adentro y les miró.

-Ya lo sabemos. Vámonos. -Pilar asintió la cabeza.

No obstante, Nerea todavía frunció sus labios -Queremos ver a Abuela. Estamos preocupadas de ella. -

-Sé que son buenas chicas, pero ahora abuela está enferma, no hay ayuda para ella aunque la visitan. -

Agitó la mano y dijo a la ligera -A regresar y descansar primero. Cuando ella se despierte, tendré a alguien que os informe de inmediato.-

Las dos muchachas finalmente se fueron.

Justamente Luisa salió de la sala vecina, les vio y se acercó en seguida.

-Papá, Casimiro. -

Inesperadamente, Senda solo asintió la cabeza sin decir nada.

Después de saludar a todos, se fue.

-Parece que Senda no odia a Bita.- Mirando su figura, Luisa siguió pensando.

Todo el mundo sabía que Senda odiaba lo más el acercamiento de las mujeres.

Pero antes hizo que Bita viviera en el Pabellón de Río. Ahora no tenía nada que objetar al arreglo del abuelo.

¿Acaso los rumores eran verdaderos que entre Senda y la segunda hija de la Familia López...también había algo?

Miró al abuelo de nuevo y parecía que él estaba pensando algunas cosas.

Luisa dijo -Papá, en este momento, vuelva primero para descansar. Aquí estoy y esto es suficiente. -

Casimiro también dijo -Déjela quedarse aquí y está bien. Papá, regrese para descansar temprano. -

El anciano volvió la cabeza y echó una mirada. Maya asintió la cabeza hacia él -No hay problema. No se preocupe, señor. -

Entonces el abuelo se fue. Después de saludar a Casimiro y su esposa, Maya volvió a la habitación para cuidar a la doña.

Casimiro miró la espalda del anciano y esperó a que caminara lo suficiente antes de decir -Parece que Papá está muy preocupado por esta chica llamada Bita.-

-Ya lo entiendo. Le voy a cuidar bien para que pueda recuperarse lo antes posible. - Luisa dijo en seguida.

-Prepara unas cosas y envíalas después de que viva en el Pabellón de Río. - Le recomendó.

La persona que a los abuelos les gusta, a él también.

Ahora el abuelo explicó especialmente que a Bita se le permitió vivir en el Pabellón de Río, y él podía apróximadamente adivinar bien sus ideas.

La primera dama de la Ciudad Norte, aunque en el futuro en su barbilla había un defecto pequeño, todavía debería ser una chica muy bonita.

Una chica hermosa y buena que a la doña le gustaba era mucho mejor que una futura nuera fea y con mala fama.

El abuelo estaba planeando el futuro para los niños. Después de todo, nunca le gustaba Mauren.

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