Bita fue realmente secuestrada.
No esperó que algún día los enemigos de Senda se la llevaron como “la mujer de Senda”.
-No soy su mujer, realmente no soy, dejadme ir. No tengo ninguna influencia sobre él.-
Se dio cuenta de que todo lo que tuvo delante no fue una broma, sino algo fue real. Inmediatamente lloró y les suplicó clemencia.
-Su prometida es Mauren, mi media hermana. Ella es la mujer que más le importa a Senda.-
Aunque ella fue muy reacia a decir tal cosa, si esto pudo hacer que Mauren murió sin un lugar donde enterrarla, y pudo cambiar su seguridad, ¡está dispuesta a decirlo!
¡Pudo decir esto tantas veces como quiso!
-Tonterías, si no eres la mujer de Senda, ¿puede dejarte vivir en su lugar, día y noche?-
Un hombre con una máscara arrojó una pila de fotos a su alrededor.
Estas fotos fueron tomadas de su Twitter.
-¿No eres tú la persona de la foto? ¡Humph!-
-Sí, soy yo, pero...pero yo...sólo me quedo unos días.-
Bita estuvo realmente sin palabras. No esperó que Twitter, que suele usó para lucirse, se convirtió en su mayor peligro.
-Porque ... porque la prometida de Senda es mi hermana. Solo me quedo en la casa de mi hermana unos días. Es verdad.-
Su rostro estuvo lleno de lágrimas. Tembló de miedo.
-No me hagas daño, no tengo nada que ver con Senda. Realmente, lo prometo.-
-¿No lo llamas hermano todo el tiempo?-
-Pero él nunca me responde, mira...¡mira!-
Bita señaló una de las fotos en el suelo, -Cuando le tomé fotos, estaba lejos de mí. Realmente no le guata y me odia mucho.-
Varios hombres enmascarados miraron las fotos en el suelo y luego se miraron el uno al otro de nuevo.
Después de que la escucharon, volvieron a mirar las fotos. Pareció que de hecho hubo pocas fotos de ella y Senda cercó la una de la otra.
-¿Qué hacer?- Preguntó uno de ellos.
“¿Realmente atrapan a la persona equivocada? ¿La mujer es llamada Mauren es la mujer que a Senda le importa?” ellos pensando.
-Como ella no es la mujer de Senda, entonces...no sirve de nada quedársela. Te lo doy.-
El hombre de cabeza pareció disgustado y se volvió para irse.
-¡No!- “¡no no no! ¿Qué significa que él se la da a ellos?” Ella pensando.
“¡No! ¡No puede hacer esto! ¿No es esto más triste que la mujer que se convierte en Senda?” Ella pensando.
-No hacéis esto, no...- Vio a varios hombres caminar hacia ella, y Bita estuvo tan asustada que casi se desmayó.
“¿Qué quieren hacer? ¿están tratando de destruirla por completo?” Ella pensando.
-No, ese no es el caso, yo...yo...no venid aquí! Ah!-
Con el sonido, su ropa se rompió.
Bita casi se derrumbará, -¡Soy la mujer de Senda, lo soy!-
-¡Neurótico!-
Ella dijo que sí por un tiempo y dijo que no, ¿pensó que fueron tontos?
-Soy realmente su mujer, de verdad. No me hacéis esto, no, ah, ah…-
La habitación estuvo llena de risas de hombres. Sus voces cubrieron por completo la voz de la niña.
Bita lloró y su voz fue tonta, -Realmente soy la mujer de Senda, de verdad. Yo…a él le gusto, no le gusta su prometida. En serio…-
La tortura continuó. En ese momento, el hombre sudoroso la apretó con fuerza. La cara de Bita se congeló y cayó en desesperación.
Ella fue la primera dama de la Ciudad Norte, no pudo ser empañada por un hombre tan repugnante.
Aunque ya no fue virgen, los hombres que eligió fueron guapos y ricos.
“Pero esta gente, son los bastardos más baratos y asquerosos. Cómo pueden hacer el amor con ella” ella pensando.
-Ah, me dejáis ir, ah…-
-¿Qué quieres decir?-
…
Bita había vuelto.
Pareció una vagabunda cuando regresó.
Pero ella siguió diciendo, -En realidad, no me tocan. Mi cuerpo todavía está limpio. Senda, créeme.-
Senda no habló, e Ian se sintió triste poe ella. Luego rápidamente le puso su fino abrigo.
-Bita, ¿cómo…regresas?-
-Dijeron…que soy la mujer que más le importa a Senda. Quieren usarme para amenazar a Senda, pero no quiero lastimar a Senda, así que me escapo.-
-Esa gente en la Isla Paraíso es cruel. ¿Cómo escapas de su lugar?-
Hedi no quiso dudar de sus palabras. Después de todo, fue bueno volver.
Pero hubo muchas lagunas en lo que dijo, lo que hizo que la gente tuvo que dudar.
-Me escapo de todos modos. ¡No me preguntas, no me vuelves a preguntar!-
Bita estuvo temblando por todas partes. De repente corrió hacia Senda y gritó, -Mi cuerpo todavía está limpio, Senda, es real. Créeme...-
Senda le puso la mano en sul hombro e inconscientemente quiso apartarla.
Pero de repente, se sintió culpable en su corazón.
Ella estuvo muy asustada de esto caso. Basta con ver su aspecto decadente.
Ella fue el único pariente consanguíneo de su abuela, pero fue secuestrada bajo su protección.
Y todo comenzó a causa de él.
Siempre había un sentimiento de culpa en su corazón. Así que dudó por un segundo, y luego fue abrazado con fuerza por ella.
Mauren, de pie en el viento, se detuvo. Miró a las dos personas abrazados no muy lejos, y su corazón se enfrió gradualmente.
Comentarios
Los comentarios de los lectores sobre la novela: El corazón de Señor Peréz